Vacaciones contra el odio
Hijos de v¨ªctimas palestinas descubren en Galicia las gambas y las piscinas
Vivir en Palestina no es f¨¢cil para un ni?o. En una tierra partida, ocupada militarmente y en continuo conflicto desde hace medio siglo, una actividad tan cotidiana como ir al colegio se convierte en un sinvivir de controles que franquear y muros que bordear, s¨®lo para llegar a tiempo a clase. Y cuando por fin vienen las vacaciones, salir de viaje no es una opci¨®n para muchos de estos chiquillos que crecen rodeados de violencia.
En este contexto, la Fundaci¨®n Araguaney, que dirige el empresario palestino afincado en Compostela Ghaleb Jaber, recibe por noveno a?o consecutivo a 10 chavales de entre 9 y 11 a?os procedentes de campos de refugiados cerca de Yen¨ªn, Tulkarm o Nablus, en el norte de Cisjordania, para que disfruten de las vacaciones lejos de la opresi¨®n con la que se enfrentan habitualmente. El proyecto se llama Vacaciones por la paz, y lleva a los ni?os por varias localidades gallegas durante dos semanas. Un peque?o grano de arena para aliviar, siquiera m¨ªnimamente, la desgraciada situaci¨®n de los hijos de un pueblo que, s¨®lo entre Gaza y Cisjordania, suma m¨¢s de 1,8 millones de refugiados, seg¨²n datos de la UNRWA (la agencia de la ONU para los refugiados palestinos).
"Est¨¢n en guerra", apunta una ni?a. "?Y beben agua mala!", chilla otra
A los chicos les sorprende poder recorrer el pa¨ªs sin controles militares
Neval tiene 11 a?os. Sus ojos de ni?a son negros y grandes, curiosos. Es su tercer d¨ªa en Galicia, y los chiquillos est¨¢n en Vedra (A Coru?a) participando con cr¨ªos de la zona en las actividades de la ludoteca municipal, que organiza talleres de dibujo, deportes y juegos en equipo. Neval pretende calzarse unos patines, pero le est¨¢ costando bastante trabajo. Cuando por fin lo consigue, intenta erguirse, pero se cae al suelo. Lejos de quejarse, se r¨ªe a carcajadas. Dice que las gambas que cen¨® ayer no le gustaron mucho, a pesar de que su hermano -que vino a Galicia el a?o pasado con el mismo programa- le hab¨ªa insistido en que las probase. Johnny-Jehad Jabeer, presidente de la Asociaci¨®n de la Comunidad Galaico-?rabe Jenin, es quien traduce las respuestas de los ni?os. Cuenta que tanto a Neval como a sus compa?eros les llama la atenci¨®n poder recorrer libremente el pa¨ªs "sin encontrarse un checkpoint militar".
"La mayor¨ªa de estos ni?os son hijos de padres asesinados en la Segunda Intifada, o que est¨¢n en las c¨¢rceles israel¨ªes", dice Bassam Yasin, un funcionario de la UNRWA, que les sigue durante el viaje. "Est¨¢n felices, viendo cosas que nunca hab¨ªan visto antes", comenta afablemente, mientras los observa jugar sentado en una silla de ni?o que le viene peque?a.
Las ni?as r¨ªen al tiempo que se prueban disfraces y los chicos juegan al f¨²tbol en el patio. Wasiim -"con dos ¨ªes", puntualiza-, est¨¢ "encantado de conocer a los ni?os gallegos", seg¨²n traduce Jabeer. A Wasiim le cuesta hablar, mira de reojo y s¨®lo se suelta cuando uno de los amigos que ha hecho durante el viaje se acerca y le pasa la mano por el hombro, en un gesto de camarader¨ªa. Dice que tiene 13 a?os, pero aparenta alguno menos. Lo que m¨¢s le ha sorprendido de Galicia es "la piscina". Probablemente disfrutar¨¢ de la playa cuando el martes la expedici¨®n llegue a la costa, a Portos¨ªn.
La pachanga de f¨²tbol ha terminado. Parece que ha ganado el equipo visitante, y los lugare?os protestan. "Ese del pelo rapado me ha empujado", se queja amargamente uno. Los chavales de Vedra se arremolinan en torno a una mesa. No todos est¨¢n puestos en el conflicto ¨¢rabe-israel¨ª. "Vienen de ?frica", lanza uno audazmente. Cuando le hacen ver su error, se justifica: "Es que no s¨¦ nada de geometr¨ªa". "Est¨¢n en guerra y viven en campos de refugiados", apunta una ni?a, m¨¢s atinada. "?Y beben agua mala!", chilla otra.
Noa Morales trabaja en la Fundaci¨®n Araguaney y acompa?a a los ni?os, y destaca de ellos que casi "no piden de comer ni de beber" y que se entretienen con cualquier cosa. "Juegan con lo que sea", explica. Por la tarde, si el tiempo acompa?a, ir¨¢n a hacer pirag¨¹ismo, y en los pr¨®ximos d¨ªas pasar¨¢n por Oleiros y visitar¨¢n el acuario de A Coru?a y el zoo de Vigo. Una agenda apretada para entretener a los ni?os, en un viaje en el que los responsables de la fundaci¨®n tambi¨¦n pretenden sensibilizar a los gallegos de la injusticia de la situaci¨®n en Palestina.
En ese sentido, Julio Rodr¨ªguez Bueno, presidente de la ONG Paz Ahora que colabora con Araguaney en este proyecto, denunciaba el lunes, durante la rueda de prensa de presentaci¨®n de la iniciativa, que hab¨ªa sido imposible traer a ni?os de Gaza. La raz¨®n: el bloqueo que Israel ejerce a la salida de palestinos de la franja, alrededor de 1,5 millones de personas que en la pr¨¢ctica est¨¢n encerradas en 360 kil¨®metros cuadrados, una superficie que equivale a poco m¨¢s del doble de la del t¨¦rmino municipal de Pontevedra.
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