El hombre que dibuja sus mundos
"Ni la educaci¨®n ni la cultura se pueden entender de espaldas al gallego. Es suicida", defiende Miguelanxo Prado, el ilustrador coru?¨¦s m¨¢s internacional
Desde la terraza del bar, la vista parece que la ha dibujado ¨¦l. Un fondo de mar y cielo grises con trazos blancos, enmarcado por un paseo mar¨ªtimo un tanto desolado, con gaviotas posadas en las farolas (aunque ¨¦l se hubiese esmerado algo m¨¢s en las farolas) y hasta el detalle de una bicicleta solitaria apoyada en la barandilla. Es media ma?ana en As Lagoas, camino de la Torre de H¨¦rcules. Hora ("nin tarde nin cedo") y lugar que vienen bien a las dos partes, aunque considera que la de entrevistador y entrevistado "es una relaci¨®n imposible". Miguelanxo Prado (A Coru?a, 1958) es, ya saben, el m¨¢s internacional de nuestros dibujantes, lo que no le impide, en v¨ªsperas de inaugurar la XII Edici¨®n de Vi?etas desde o Atl¨¢ntico, el sal¨®n del c¨®mic que fund¨® y dirige, tener que gestionar con el m¨®vil crisis organizativas como unas lonas a¨²n sin serigrafiar, "y eso que estaban preparadas desde junio".
"En los Goya todos se besaban, y yo estaba solo, apoyado en una columna"
-?No es raro que un autor sea el promotor de un Sal¨®n?
-Es que Paco [V¨¢zquez] no hac¨ªa m¨¢s que insistirme en que hab¨ªa que hacer algo... y yo quer¨ªa hacer un sal¨®n que no fuese ni el caos entusiasta de los organizados por fans, ni la frialdad eficiente de los que promueven las instituciones. En Vi?etas hemos conseguido que los editores asistan, que los aficionados vengan, que las obras sean protagonistas como en ning¨²n otro y que los autores est¨¦n c¨®modos.
-Y, conseguido el objetivo, ?por qu¨¦ sigue?
-No hay razones para dejarlo. Despu¨¦s de cada clausura, siempre me digo que ser¨¢ la ¨²ltima vez, pero cada enero me sorprendo pensando: "A esta edici¨®n podr¨ªa venir..."
Adem¨¢s de minicrisis como la de las lonas, Prado viene de lidiar con un proyecto que le absorbi¨® casi cinco a?os: De Profundis? su largometraje de animaci¨®n. Una experiencia gratificante en lo creativo: "Fue una reinvindicaci¨®n de la autor¨ªa y de la impronta humana en el dibujo, algo que en la animaci¨®n est¨¢ diluid¨ªsimo". Curiosa en lo social: "En la fiesta de los Goya todos los del cine se besaban y saludaban, y yo estaba solo y apoyado en una columna. En otra columna hab¨ªa otro tipo. Cuando por fin se acerc¨® y se present¨®, result¨® ser el otro nominado en animaci¨®n". Y que no repetir¨¢: "Hay proyectos en cartera, pero esperar¨¦ a que se desarrollen las herramientas, la tecnolog¨ªa que permita que no sea una labor tit¨¢nica".
Retomar el dibujo a secas ha sido "un proceso angustioso, porque hasta ahora, siempre que finalizaba un libro, ten¨ªa ya la simiente de otro". Prado lleva meses trabajando en lo que parece ser¨¢ su obra m¨¢s ambiciosa. Se titular¨¢ Ardal¨¦n, lo que ahora se llama una "novela gr¨¢fica" de 170 p¨¢ginas (Trazo de tiza, su obra de referencia, ten¨ªa 64), que calcula finalizar¨¢ en 2011. "Ya he hecho 16 p¨¢ginas. Va de la memoria, pero no la hist¨®rica, sino la personal. La idea de que somos lo que recordamos, y lo que los dem¨¢s recuerdan de nosotros". Y pasa en la monta?a.
Con la crisis, "todos los soportes est¨¢n en desbandada", desde el cine a los peri¨®dicos. "Y al libro le tocar¨¢ en un par de a?os", vaticina. El monstruo que amenaza es, por supuesto, Internet, "ese acontecimiento hist¨®rico que hemos podido presenciar". Prado se confiesa preso del dilema de ser "un usuario feliz de poder acceder a todo lo creado, pero preocupado porque de algo tienen que vivir los que van a crear las obras futuras". Tendr¨¢ que haber una alternativa, "y la que asoma no me gusta mucho", reconoce, "grandes corporaciones que se encargan de suministrar contenidos. T¨² pagas por la botella, no por lo que viene dentro". Habr¨¢ que encontrar una opci¨®n mejor para que crear sea rentable". ?l no tiene p¨¢gina web. "Es por vagancia, y porque me echa para atr¨¢s la inmediatez. Tiendo m¨¢s a lo reflexivo".
La media ma?ana se ha convertido en hora de ir comiendo. Hay que acometer las preguntas inevitables. ?El c¨®mic en Galicia va...? "Creativamente muy bien, muchos autores y media de calidad buena. Y el nivel editorial mejora. Pero el mercado gallego no da para mantener a todos los autores de aqu¨ª. Hay que abrirse, es lo natural, pero hay quien publica fuera y su obra no se edita en Galicia. Mi obra est¨¢ traducida a turco o fin¨¦s, pero no est¨¢ casi nada en gallego.
-Son las leyes del mercado.
-La cultura, la imagen de marca, el copyright, genera ingresos. Hay gente que va a Par¨ªs a hacer la ruta de El C¨®digo DaVinci, por decir las m¨¢s circenses, y Rosal¨ªa de Castro genera riqueza. Lo que no tiene sentido es intentar generar riqueza con productos culturales ajenos.
-?Propios supone que sean en gallego?
-Es imposible hablar de cultura gallega obviando el idioma. Con todas las concesiones que se quieran al pluralismo y a la cordialidad, la cultura del pa¨ªs es la que es. El 90% se genera alrededor de una herramienta que es la lengua. Pol¨ªticamente, es posible que en unos sectores cale el "vamos a poner orden en eso del gallego", pero despu¨¦s ni la educaci¨®n ni la cultura se pueden entender de espaldas a esa realidad. Es suicida.
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