La vacuna del papiloma es segura

La vacuna del papiloma humano (VPH) no se desprende de la pol¨¦mica. En esta ocasi¨®n, es la prestigiosa revista JAMA la que publica dos art¨ªculos y un editorial. Una de cal y otra de arena. El editorial incide en que todav¨ªa hay incertidumbres sobre el balance entre beneficios y riesgos de la vacuna. Esta reflexi¨®n acompa?a a un estudio que, sin embargo, concluye que sus efectos secundarios son similares a los de otras vacunas. Eso s¨ª, ocasiona m¨¢s s¨ªncopes (desmayos), algo atribuible a que el pinchazo es m¨¢s doloroso respecto a otras vacunas. Tambi¨¦n hay m¨¢s efectos adversos relacionados con la formaci¨®n de co¨¢gulos.

El estudio, realizado por los Centro de Control de Enfermedades (CDC en ingl¨¦s), el organismo estadounidense encargado, entre otras cosas, de establecer el calendario vacunal, desvela que en EE UU se han registrado 12.424 efectos adversos en chicas entre 13 y 26 a?os desde que se aprob¨® la vacuna, en el a?o 2006. En un 6,2% de los casos fueron graves. 32 chicas murieron despu¨¦s de recibir la vacuna. Son las cifras que, seg¨²n los autores, se equiparan a otras vacunas. En concreto, seg¨²n explica a EL PA?S Barbara Slade, autora del estudio, se ha comparado el impacto de la vacuna del papiloma con el de otras, como la de la meningitis o la vacuna combinada del t¨¦tanos, la difteria y la tosferina (en Estados Unidos se administran juntas como la TDAP). "En estas podemos tener el doble de efectos adversos", dice Slade.

En total, entre 2006 y 2008, en Estados Unidos se han administrado 23 millones de dosis a chicas entre 9 y 26 a?os. Entre los efectos no graves (la mayor¨ªa) se encuentran reacciones cut¨¢neas, mareos, dolor de cabeza, y n¨¢useas. La vacuna del papiloma se administra en tres dosis repartidas en un periodo de seis meses. Seg¨²n el estudio, en un 61% de los casos el efecto no deseado se produjo con la primera dosis de la vacuna, el 25% con la segunda y el 13% con la tercera. Entre los 1.900 s¨ªncopes registrados, 93 tuvieron consecuencias serias. "Pueden caerse, golpearse la cabeza o romperse un hueso", explica Slade . "Despu¨¦s de la vacuna, siempre hay que pasar 15 minutos en observaci¨®n", explica Silvia de Sanjos¨¦, del Instituto Catal¨¢n de Oncolog¨ªa (ICO) y una de las investigadoras sobre la vacuna.

Los investigadores del CDC han utilizado datos de la VAERS, una red que recoge avisos de m¨¦dicos y pacientes. Los propios investigadores, muy cautos con los resultados, reconocen que en algunos casos los registros no permiten establecer una causalidad clara. En el caso de los eventos trombol¨ªticos (56 casos en total), m¨¢s de una tercera parte de las chicas tomaba anticonceptivos, tambi¨¦n relacionados con este tipo de eventos. Para saber si en otros casos existe relaci¨®n con la vacuna, "vamos a seguir investigando", dice Slade.

Los investigadores tampoco se mojan a la hora de relacionar las muertes. Afirman que, efectivamente, ocurrieron tras recibir la vacuna, pero que los datos disponibles tampoco permiten establecer una relaci¨®n directa. De las 32 fallecidas, con una edad media de 18 a?os, algunas sufr¨ªan otras enfermedades. Cuatro fueron muertes inesperadas, una podr¨ªa ser atribuible a un abuso de drogas y el resto fueron por eventos cardiovasculares y trombosis pulmonares.

Los resultados de este estudio no zanjan la pol¨¦mica. Los investigadores creen que el seguimiento es imprescindible. Para Sanjos¨¦, "el estudio no es alarmista y permite continuar vacunando, aunque hay que monitorizar". Para Carlos ?lvarez-Dardet, Catedr¨¢tico de Salud publica de la Universidad de Alicante e impulsor de la plataforma que pide una moratoria de la vacuna hasta que su efectividad est¨¦ totalmente probada, "el estudio demuestra que se est¨¢ realizando un experimento con el permiso de los gobiernos". La plataforma argumenta que la vacuna s¨®lo protege ante cuatro cepas del virus, responsables de entre un 55% y un 28,2% de los c¨¢nceres de ¨²tero, lo que significa que se deben continuar tomando medidas preventivas. As¨ª pues, dudan sobre el coste beneficio de la medida y si vale la pena correr riesgos, sean cuales sean.

En el 2007, el Consejo Interterritorial de Salud aprob¨® incluir la vacuna en el calendario para las ni?as entre 11 y 14 a?os. S¨®lo en Espa?a, se contabilizan 2.100 nuevos casos de este tipo de c¨¢ncer al a?o, con 740 muertes. Entre los a?os 2007 y 2008, se han distribuido 1.146.000 dosis y se han notificado 103 casos adversos, 35 de ellos graves. Los m¨¢s conocidos, las dos chicas ingresadas en la UCI en Valencia a las que, finalmente, un comit¨¦ de expertos determin¨® que las convulsiones sufridas se deb¨ªan a un "s¨ªndrome de conversi¨®n fruto de la ansiedad". En Valencia han creado la Asociaci¨®n de Afectadas por la Vacuna del VPH.