La ¨²ltima valla de Serrano

El due?o de la joyer¨ªa, protegida con puerta autom¨¢tica, resopla al otro lado del doble cristal. La chica que vende la prensa en el quiosco esquiva las vallas mientras se protege los ojos del polvo. ?Cu¨¢ndo volver¨¢ Serrano a ser Serrano? deben preguntarse todos. Todav¨ªa quedan meses de zanjas, rampas met¨¢licas y vallas. El primer respiro llegar¨¢ a final de a?o pero habr¨¢ trabajos al menos hasta 2011.

En Serrano trabajan dos administraciones. La mayor¨ªa de las zanjas pertenecen a las obras de tres aparcamientos subterr¨¢neos, un plan promovido por el Ayuntamiento de Madrid. No son los ¨²nicos que est¨¢n abriendo en canal la Milla de Oro. En un lateral se ha asentado esta semana un nuevo hu¨¦sped. Las m¨¢quinas del Ministerio de Fomento han empezado su tercer t¨²nel, destinado a la alta velocidad. Queda para rato.

Por partes. Para navidades, el Ayuntamiento ha prometido a los comerciantes "una parada t¨¦cnica" para que los madrile?os puedan pasear (y comprar) a lo largo y ancho de la calle de Serrano sin esquivar vallas. Retirar¨¢ las m¨¢quinas, dejar¨¢ expedito el paso a las tiendas donde ahora mismo lo que m¨¢s entra es polvo.

ADIF (administrador de infraestructuras ferroviarias, dependiente de Fomento) gestiona su propia parcela en la gincana. Entre los n¨²meros 95 al 107 de Serrano han dado un mordisco a la calle para construir un pozo de ventilaci¨®n. Ese tramo est¨¢ reservado para obras hasta mitad de 2011. Desde la empresa p¨²blica aseguran que eso no significa que tengan las m¨¢quinas sobre el asfalto todo ese tiempo y se comprometen a abrir un carril adicional -han dejado s¨®lo dos libres- a partir de oto?o. Pero no dan la fecha concreta de su salida. Ni especifican si parar¨¢n durante la pr¨®xima Navidad.

Cuando llegue el nuevo a?o, el trabajo se trasladar¨¢ bajo tierra. Casi todo. Hay un tramo, por el que asoma un muro hist¨®rico, al que le quedan m¨¢s meses por delante. Durante la excavaci¨®n de uno de los aparcamientos, los obreros se toparon con varios restos arqueol¨®gicos del siglo XVII. El Ayuntamiento no aclara hasta cu¨¢ndo permanecer¨¢ ese tramo retrasado. Entre las calles de Hermosilla y Mar¨ªa de Molina, el a?o que viene no deber¨ªan quedar zanjas. La ampliaci¨®n de los aparcamientos sigue bajo tierra. Para la superficie, una portavoz municipal promete m¨¢s tranquilidad. Toca ampliar aceras, plantar ¨¢rboles, trazar el carril bici. Tramos peque?os de obras limitados por vallas. Pero mientras, los vecinos se preguntan cu¨¢ndo retirar¨¢n la ¨²ltima valla.