Una derrota, una gran inc¨®gnita

Son tiempos de cambio en el tenis, d¨ªas de catarsis y terremotos para que todo siga igual. El torneo de Cincinnati, ¨²ltima parada antes del Abierto de Estados Unidos, que arrancar¨¢ el d¨ªa 31, ha visto romperse tres rachas que parec¨ªan inamovibles, que hablaban de tenistas subyugados a la voluntad de los contrarios, y eso, al final, s¨®lo ha servido para coronar de nuevo a Roger Federer -gan¨® ayer por 6-1 y 7-5 a Novak Djokovic- y para confirmar que Rafael Nadal, a buen nivel pese a su derrota en las semifinales ante el serbio (6-1 y 6-4), llega a Nueva York rodeado de inc¨®gnitas e impulsado por una nueva perspectiva que quiz¨¢s le convierta en un peligro. Eso, al menos, piensan sus rivales.

"Estoy m¨¢s preparado de lo que esperaba, pero no al ciento por ciento"

Habla Djokovic, uno de los afectados por la rotura de tres rachas perfectas -la de sus cinco derrotas seguidas ante Nadal y la de sus dos victorias consecutivas frente a Federer, que, a su vez, hab¨ªa clausurado una hemorragia de cuatro partidos perdidos contra Andy Murray en semifinales-: "La gente habla de Rafa como de un jugador que est¨¢ teniendo dificultades para volver a su forma de antes. Hay otra perspectiva: su motivaci¨®n es m¨¢s grande que al principio del a?o. Est¨¢ ante algo nuevo. Nunca, desde que es profesional, tuvo que aparecer as¨ª, de repente. Es nuevo para ¨¦l. Un reto".

Nadal, es p¨²blico y notorio, es un amante de los retos. Tambi¨¦n, de las estad¨ªsticas. De ah¨ª que observe con leg¨ªtima preocupaci¨®n su cuerpo y la llegada del Abierto de Estados Unidos. El espa?ol ha jugado en Cincinnati cuatro partidos al mejor de tres mangas que se resumen en 109 minutos de media sobre la pista. El a?o pasado disput¨® seis a cinco mangas en el ¨²ltimo grande del a?o, lo que le tuvo jugando 159 minutos de media. Son 50 minutos m¨¢s de media por partido, con el matiz de que en algunos jugara mucho m¨¢s que en otros. Para un tenista que s¨®lo ha disputado siete encuentros individuales tras dos meses y medio de par¨®n por lesi¨®n, sin embargo, ese dato es una preocupaci¨®n constante. Viva. Demostrada en los entrenamientos y ante la prensa.

?Qu¨¦ tal llega al Abierto de Estados Unidos? "Veremos c¨®mo estoy f¨ªsicamente para jugar partidos a cinco sets", contesta el espa?ol, un hombre atrapado por una permanente contradicci¨®n: siempre fue un tenista de ritmo, necesitado de m¨²ltiples partidos y de entrenamientos intensos para encontrar su mejor versi¨®n, y ahora se ve obligado a reducir el tiempo de sus pr¨¢cticas, a renunciar al dobles y a fiarlo todo a la preparaci¨®n f¨ªsica de fondo que hizo en la piscina de su casa mientras estaba lesionado. "Ganando tres partidos en Cincinnati y dos en Montreal, jugando siete en total..., creo que son suficientes con vistas a Nueva York", dijo el n¨²mero tres mundial; "estoy m¨¢s preparado para el Abierto de Estados Unidos de lo que esperaba antes de llegar a la gira norteamericana, perocreo que no estaba listo al ciento por ciento para jugar a este nivel [al de Djokovic]. Necesito jugar m¨¢s de una vez a este nivel para estar preparado para competir as¨ª de nuevo".

Llega el Abierto de Estados Unidos. Llega Toni Nadal, t¨ªo y entrenador del mallorqu¨ªn, ma?ana a Nueva York. Y ah¨ª llega tambi¨¦n Nadal, con m¨¢s certezas de las que esperaba y a¨²n con un racimo de inc¨®gnitas.