El ex novio de Laura Alonso confiesa el crimen al saber que registrar¨ªan su casa

Javier Cruz Gonz¨¢lez, vecino de To¨¦n (Ourense) de 32 a?os, confes¨® ayer haber matado a su ex novia, Laura Alonso. Fue despu¨¦s de que la Guardia Civil lo amenazase con registrar el domicilio familiar, que ayer se encontraba rodeado por las c¨¢maras de los numerosos medios de comunicaci¨®n destacados en el pueblo. Al cierre de esta edici¨®n, se estaba a la espera de que el supuesto asesino pasase a disposici¨®n de la jueza de violencia de g¨¦nero de Ourense, encargada del caso. Fuentes de la investigaci¨®n descartaron que vaya a haber m¨¢s detenciones, ya que se supone que Cruz actu¨® sin c¨®mplices.

Laura Alonso ser¨¢ enterrada esta tarde. La joven de Xestosa-To¨¦n descansar¨¢ en el cementerio de su pueblo, a escasos metros del lugar en el que el s¨¢bado apareci¨® su cad¨¢ver tras seis d¨ªas de intensa b¨²squeda que moviliz¨® a cientos de vecinos y a numerosas fuerzas de seguridad.

"Me la entierran como un ladr¨®n", dijo la madre al saber que no habr¨ªa velatorio

La familia de la joven, todav¨ªa muy impactada por el golpe, recibi¨® ayer los restos mortales y la autorizaci¨®n judicial para realizar el entierro esta tarde. Ser¨¢ a las 19 horas en la iglesia parroquial. "Por fin nos avis¨® la funeraria de que les entregaban el cuerpo", comentaba a mediod¨ªa el t¨ªo abuelo de la joven y portavoz familiar, Manuel Olleros.

La jueza que instruye el caso recibi¨® el informe preliminar del forense y dio por completada la autopsia que fue practicada el domingo por especialistas del Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga). Se han extra¨ªdo restos de ADN hallados en el cad¨¢ver, que han sido enviados al laboratorio de Madrid para el estudio complementario. Tambi¨¦n se ha solicitado un estudio bioqu¨ªmico para detectar la existencia de posibles sustancias t¨®xicas en el organismo de la joven.

Los datos m¨¢s relevantes estar¨¢n listos en un par de d¨ªas, seg¨²n reconoce el forense, Julio Feliz, quien ni confirma ni desmiente ("hay secreto de sumario") la tesis de que la prenda que apareci¨® en el cuello de la joven hubiera sido utilizada como arma mortal.

Mientras la familia de Laura recib¨ªa los restos de la joven, su ex novio, Javier Cruz Gonz¨¢lez, continuaba como ¨²nico detenido en las dependencias de la comandancia orensana. Seg¨²n le constaba a la Guardia Civil, el hombre, de 32 a?os y vecino de To¨¦n, con el que la chica hab¨ªa mantenido una compleja relaci¨®n sentimental, pas¨® con ella las horas previas a su muerte a pesar de que hab¨ªan roto.

La polic¨ªa judicial esper¨® a acumular m¨¢s pruebas, tanto las derivadas de la autopsia como del an¨¢lisis del entorno del monte de To¨¦n en el que se encontr¨® el cuerpo de la joven, antes de iniciar el interrogatorio.Hasta ayer, en los dos interrogatorios previos a su detenci¨®n Javier Cruz hab¨ªa mantenido la tesis de su inocencia y contaba con la coartada de su padre, que aseguraba que durmi¨® en la casa familiar la noche del domingo. Fue a media tarde, m¨¢s de 24 horas despu¨¦s de su detenci¨®n, cuando Cruz confes¨® finalmente.

Pese a que hasta que no declarase ante la jueza no necesitaba abogado, ha trascendido que Javier Cruz contrat¨® los servicios de un bufete orensano antes de haber sido detenido, el mismo d¨ªa en que los agentes de la Guardia Civil le tomaron declaraci¨®n por primera vez. "Contratar¨¢n a los mejores, ah¨ª hay dinero", sostienen los familiares de Laura, que han designado igualmente a una letrada para que asista a los interrogatorios judiciales.

Mientras, To¨¦n mantiene sus tres d¨ªas de luto y una gran tensi¨®n por razones de vecindad de v¨ªctima y detenido (el padre del sospechoso es concejal del PP y el abuelo de Laura fue candidato por el PSOE) la familia de Laura Alonso atraviesa los peores momentos de la tragedia. Sus padres se mostraban ayer especialmente abatidos, por no haber recibido autorizaci¨®n de Sanidade para celebrar el velatorio, debido al avanzado estado de descomposici¨®n en que se encuentran los restos de la joven asesinada.

Una semana despu¨¦s de la desaparici¨®n de la muchacha y tras la conmoci¨®n del encuentro del cad¨¢ver y la posterior detenci¨®n de un vecino, la madre se vino ayer abajo. "Me la entierran como a un ladr¨®n", lloraba cuando supo que no podr¨ªa velar "como hace todo el mundo" a su hija.