Rev¨¦s para Merkel
El ascenso del partido de Oskar Lafontaine marca las elecciones regionales alemanas
Aunque ha sido el partido m¨¢s votado en las elecciones celebradas el pasado domingo en los l?nder de Sarre, Turingia y Sajonia, la Uni¨®n Dem¨®crata Cristiana (CDU) de la canciller Angela Merkel ha salido pol¨ªticamente erosionada de estos comicios que se han celebrado a un mes de las elecciones generales.
Sin proyectar mec¨¢nicamente los resultados regionales sobre el escenario federal, es indudable que la sorpresa de la jornada electoral la ha dado Die Linke, La Izquierda, una coalici¨®n liderada por Oskar Lafontaine, e integrada b¨¢sicamente por disidentes del SPD y poscomunistas. Con los datos en la mano, La Izquierda puede arrebatar a la CDU, en coalici¨®n con el SPD y los Verdes, los Gobiernos de Sarre y Turingia.
El ascenso de La Izquierda puede, sin embargo, crearle una situaci¨®n complicada a nivel federal al SPD. El sector m¨¢s moderado de los socialdem¨®cratas s¨®lo aceptaba colaborar con la izquierda radical en el este del pa¨ªs, donde se mantiene un fuerte voto poscomunista, pero era remiso a hacerlo en el oeste. Los resultados en el peque?o e industrial land de Sarre, donde Lafontaine ya fue presidente con el SPD en los a?os ochenta, pondr¨¢n a prueba la capacidad de negociaci¨®n de la izquierda. Sin embargo, los socialdem¨®cratas son conscientes de que los conservadores aprovechar¨¢n cualquier coalici¨®n de izquierdas para esgrimir en la campa?a el fantasma de una alianza social-comunista.
El candidato del SPD a la canciller¨ªa y ministro de Asuntos Exteriores, Frank Steinmeier, dada su escasa popularidad frente a Angela Merkel, recibi¨® el domingo como un bal¨®n de ox¨ªgeno el retroceso de la CDU. Los resultados regionales le pueden dar el impulso psicol¨®gico necesario para lanzar su programa de reformas en el tramo final de la campa?a. Pero las encuestas no le auguran un futuro halag¨¹e?o.
El ascenso de los liberales del FDP en los tres Estados permiti¨® a su l¨ªder, Guido Westerwelle, abogar por una coalici¨®n de centro-derecha, la f¨®rmula deseada por Angela Merkel para despu¨¦s de las elecciones del 27 de septiembre. Y es que el escenario pol¨ªtico, con cuatro fuerzas en juego, m¨¢s el comod¨ªn de los Verdes, parece propicio a nuevas coaliciones que pongan fin a la Gran Coalici¨®n, CDU-SPD, que, sin embargo, ha dado tan buenos resultados a Alemania.
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