El bicho raro del sur

Los rascacielos como demonios, las cabezas repeinadas y los trajes de chaqueta son para Houston. En Austin, la apacible capital del Estado de Tejas, se llevan las bicis, las chanclas y los cortes de pelo asim¨¦tricos. Esta ciudad no se toma a s¨ª misma demasiado en serio. Tolerante y con calidad de vida (tiene 719.000 habitantes), a Austin (www.austintexas.org) se la conoce como la capital de la m¨²sica en vivo. Est¨¢ orgullosa de ser el bicho raro del sur de Estados Unidos: da la impresi¨®n de que todo el mundo tiene alg¨²n talento especial y que las multinacionales tienen vetada la entrada en sus calles. Su lema, "keep Austin weird" (deja que Austin siga siendo rara), es m¨¢s que un credo.

9.00 Charlas al sol

A lo lejos, el sol se refleja en el modesto skyline. Pasan bicis y estudiantes con sus mochilas. Claro, esto es Guadalupe Street, o sea, donde se ubica la Universidad de Tejas (1), de 1882 y una de las universidades p¨²blicas m¨¢s grandes de Estados Unidos, con 50.000 estudiantes cada a?o. Aparecen j¨®venes como sacados de un videoclip de The Strokes. El bullicio sirve de gu¨ªa hasta el campus, que en realidad es un parque tem¨¢tico, con sus siete museos y 17 bibliotecas. Los edificios a veces tienen un aire de pueblo mexicano (con soportales de madera) y otras veces parecen propios de una metr¨®poli. En esa categor¨ªa de espectacular entra la torre, con su reloj y su carrill¨®n, que se ilumina de blanco por las noches. En las escalinatas, uno puede contemplar la esencia de Austin: gente con aspecto neoyorquino, el Capitolio al fondo, charlas en las esquinas, sol.

10.30 Los papeles del Watergate

En el campus est¨¢ el Harry Ransom Center (2) (esquina entre la calle 21 y Guadalupe Street; www.hrc.utexas.edu), una interesante instituci¨®n que acoge un ejemplar original de la Biblia de Gutenberg y la primera fotograf¨ªa del mundo (Punto de vista desde la ventana de Gras, de Nic¨¦phore Ni¨¦pce), y lo m¨¢s sorprendente: documentos, cintas, cartas y notas que utilizaron los periodistas Woordward y Bernstein para destapar el caso Watergate entre 1972 y 1976. La historia se volver¨¢ a tocar en la Lyndon Baines Johnson Library and Museum (3), una de las 11 bibliotecas presidenciales del pa¨ªs. El complejo aloja documentos del Estado y objetos de diferentes presidentes nacionales. Lo mejor es la reproducci¨®n, casi a tama?o real, del Despacho Oval, exactamente como estaba en la ¨¦poca de Lyndon Johnson, presidente de EE UU entre 1963 y 1969.

13.15 Burritos y salsa barbacoa

Vaya, se ha hecho tarde para comer, que esto es Estados Unidos. En Taco Shack (4) (Guadalupe Street, 2825) se puede probar buena comida tex mex. Burritos, frijoles, carne picante, salsa barbacoa... Comuni¨®n gastron¨®mica entre Estados Unidos y M¨¦xico. Y al final, una copa de tequila. Entre parques y chicos estudiando sobre el c¨¦sped, no se va de la vista la maciza piedra del Capitolio (5), que se termin¨® de construir en 1853. Con m¨¢s de un mill¨®n de visitas al a?o, el Capitolio (el centro de visitantes se encuentra en el 112 East de la calle 11) es una de las principales atracciones de la urbe. Y los lugare?os lo dicen sacando pecho: el suyo supera en cuatro metros la altura del de Washington. Resulta complicado imaginarse a George W. Bush aqu¨ª, en una ciudad tan liberal, cuando fue presidente de Tejas (un estado donde hasta 2003 exist¨ªa una ley en contra del sexo homosexual, incluso si se practicaba en privado, y donde hoy sigue vigente la pena de muerte). Pero Austin no es conservadora: su comunidad gay y l¨¦sbica es bastante reivindicativa y organiza desfiles y un festival de cine (www.agliff.org), cuya edici¨®n n¨²mero 22 se celebra esta semana (finaliza ma?ana).

16.00 200 garitos

?Y no hab¨ªa tanta m¨²sica? Austin (se oir¨¢ por la noche) tiene una escena musical espectacular, con innumerables bandas locales que tocan en los m¨¢s de 200 garitos. Y se celebran los festivales South By South West (en marzo; www.sxsw.com) y Austin City Limits (del 2 al 4 de octubre; www.aclfestival.com). De momento, a¨²n de d¨ªa, se tendr¨¢ que conformar con Waterloo Records (6) (North Lamar Boulevard, 600; www.waterloorecords.com), una tienda de discos como est¨¢ mandado, en un decorado sin decorar, con el aspecto entre cool y ro?oso. Puede que haga calor, as¨ª que la mejor idea es correr a Zilker Park (7) y sus Barton Springs, gigantes manantiales que se rellenan ellos solos con agua del subsuelo. Hay que venir a dejarse ver, hacer picnic y darse un ba?o.

17.45 SoCo, feudo de modernos

De vuelta a la ciudad, no hay que olvidar el barrio de SoCo (8), o, lo que es lo mismo, South Congress Avenue Bridge, donde existen tiendas ecl¨¦cticas, boutiques, antig¨¹edades, galer¨ªas de arte... Todo muy trendy y muy fuera de la norma. Los dise?adores j¨®venes y los modernos abrazan esta iniciativa como un argumento m¨¢s de su singularidad y charlan animadamente de proyectos nov¨ªsimos a la puerta de los locales. Y comentan lo que sea a cualquiera. Como se?al¨® una vez el director de cine Quentin Tarantino, Austin "es uno de esos pueblos cool donde todo el mundo es majo".

19.15 Las citas

No pod¨ªa faltar un espect¨¢culo natural en esta ciudad rodeada de parques y tan ecol¨®gica. El Congress Avenue Bats puede asustar: la gente se re¨²ne a la hora del ocaso, preferiblemente entre marzo y octubre, junto al r¨ªo para ver c¨®mo un mill¨®n y medio de murci¨¦lagos salen de debajo del puente Ann Richards Avenue (9). Luego nos iremos observando las numerosas pinturas que adornan las paredes de la urbe. Nos topamos con la catedral de Santa Mar¨ªa (10), neog¨®tica; la Mansi¨®n del Gobernador (11) (www.txfgm.org; www.texasgovernorsmansion.org), que se asemeja a un templete griego, y el Driskill Hotel (12) (604 Brazos Street; www.driskillhotel.com), de estilo victoriano, donde varios presidentes han esperado los resultados de las elecciones estatales. Tambi¨¦n Bush. Muy cerca hay una cola de personas: Alamo Drafthouse (13) (1120 South Lamar; www.drafthouse.com) brilla el cartel. ?sta es la m¨ªtica sala de cine donde se celebra el Fantastic Fest (del 24 de septiembre al 1 de octubre; www.fantasticfest.com). Se ha convertido en un centro de peregrinaci¨®n para los aficionados a la ciencia-ficci¨®n y el terror.

21.30 Concierto en el Cerdo Ciego

Para cenar: 34th Street Cafe (14) (West 34th Street, 1005) y su comida de ra¨ªces americanas, pero con un toque chic. Lleg¨® la hora de la m¨²sica en vivo. Cada bar tiene su concierto. No es exageraci¨®n. Red River Street (15), con locales como Beerland (en el n¨²mero 711), Red Eyed Fly (en el 715) y Mohawk (en el 912) es la zona underground. La calle Sixth Street (16) es, simplemente, la locura. Un bar muy barato es Blind Pig (en el n¨²mero 317). Hay buen rollo. Y mucho ruido. A la gente le da por subirse a la barra. Y a las dos y pico de la madrugada, cuando cierra todo, los j¨®venes ocupan la calzada y los coches no hacen m¨¢s que pitar.

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