El regreso de 'Bilbao, Bilbao'
El Teatro Arriaga produce, un cuarto de siglo m¨¢s tarde, la revisi¨®n del hist¨®rico musical ideado por el grupo Karraka y 'La Otxoa'
Reci¨¦n salido de las peores inundaciones de su historia reciente, con su tejido industrial en una crisis mucho m¨¢s profunda que la actual, el Bilbao de 1984, gris, sucio, en diaria convulsi¨®n pol¨ªtica, ofrec¨ªa sin embargo una chispa vital ¨²nica, de intensidad sobresaliente. En ese ¨¢mbito, surgi¨® de la mano del grupo de teatro Karraka y el transformista Jos¨¦ Antonio Nielfa, La Otxoa, el musical Bilbao, Bilbao, carga de profundidad contra los t¨®picos y creencias del bilbainismo y los vascos. 25 a?os despu¨¦s, dirigido por el mismo Ram¨®n Barea y protagonizado por buena parte de lo participantes en la primera edici¨®n, la obra regresa ma?ana al escenario del Teatro Arriaga, con una producci¨®n propia.
"Va a mantener la est¨¦tica de recortable del primer musical, pero embellecida"
"No se puede ser indulgente con el actual Bilbao de servicios", sostiene Barea
"Va a mantener la est¨¦tica de recortable del primer Bilbao, Bilbao, pero embellecida. A la gente que lo vio le vamos a devolver lo m¨¢s parecido a sus recuerdos", explica Ram¨®n Barea. Aquella funci¨®n que pusieron en marcha los de Karraka surg¨ªa desde la provisionalidad absoluta, con voluntad y mimbres profesionales, pero levantada con muchas dosis de amateurismo, como recuerdan los participantes. "La escenograf¨ªa se mont¨® en un mes, con la colaboraci¨®n de todos, y el vestuario hecho de retales y con mucho del guardarrop¨ªa de La Otxoa".
Esta artista que hab¨ªa revolucionado el Bilbao de la transici¨®n, se hab¨ªa convertido en un icono nocturno desde sus actuaciones en su bar La Chufa, en Barrenkalle. La participaci¨®n de La Otxoa, junto con aquella compa?¨ªa irreverente que proced¨ªa de C¨®micos de la Legua, parec¨ªa inevitable. Y el c¨®ctel result¨®. Bilbao, Bilbao, con m¨²sica de Fran Lasuen, se estren¨® en el teatro Alb¨¦niz y, desde el primer d¨ªa, las colas para adquirir las entradas daban la vuelta a la manzana.
Lo que hab¨ªa surgido como un vodevil para animar a los comparseros y voluntarios que hab¨ªan dejado el resto limpiando la Villa un a?o antes, se convirti¨® en la estrella de la programaci¨®n teatral de la Aste Nagusia de 1984. Y el ¨¦xito se repiti¨® en la gira posterior por diferentes ciudades espa?olas. "Hab¨ªa un poso serio de investigaci¨®n de lo que era el cabar¨¦ y el musical popular, el que se presentaba en los teatros Oasis o El Plata de Zaragoza, sin olvidar al teatro chino de Manolita Chen", ha recordado en alg¨²n momento Barea.
Toda la parte nueva de Bilbao, Bilbao mantiene la s¨¢tira de aquella versi¨®n, pero volcada hacia la ciudad que ha cambiado su industria por modernos iconos arquitect¨®nicos. "Entonces cerraban las f¨¢bricas, ahora hay un Bilbao de servicios con el que no se puede ser indulgente. No nos podemos quitar la iron¨ªa karrakera, a pesar de que ya no existimos como colectivo", comenta Barea.
El musical mantiene a La Otxoa al frente, la coreograf¨ªa de Bego?a Krego o la m¨²sica de Fran Lasuen. No est¨¢n Alex Angulo o C¨¦sar Saratxu, pero se ha incorporado el alav¨¦s Gorka Aguinagalde, que tambi¨¦n tiene lo suyo.
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