Las haza?as de los enanos

Descabezados. Sin vocaci¨®n de Gobierno. Aburguesados incluso. Dormidos en los laureles de sus viejas glorias. Pero ellos tambi¨¦n han tenido los mejores resultados de la historia. Ni en los a?os dorados en que Joschka Fischer era el pol¨ªtico de moda en toda Europa, hab¨ªan alcanzado este 10,7%. Lo consiguen, sin embargo, en el momento en que menos sirve. Cuando m¨¢s intensa es la competencia para ocupar la plaza del simp¨¢tico comod¨ªn que saca sustanciosos rentas por sus buenos servicios como socio menor de Gobierno. Dos partidos m¨¢s les superan recogiendo votos: los liberales del FDP, cuya cosecha les abre las puertas de varios ministerios; y La Izquierda, que aprovecha su posici¨®n exterior a casi todos los consensos.

Los Verdes han subido realmente sin que se sepa muy bien por qu¨¦. Por inercia sociol¨®gica y pol¨ªtica. Por aluvi¨®n de votos en un momento centr¨ªfugo, en que los grandes partidos pierden fuelle, y especialmente la socialdemocracia. Como el SPD, los Verdes sufren del s¨ªndrome del ¨¦xito. Sus ideas y sus propuestas se han difundido en distinto grado por todo el arco pol¨ªtico. Tras pasar por el Gobierno y dejar su huella, en esta campa?a han sido la fuerza ausente, acentuada por la reducci¨®n del radio de sus alianzas. No quer¨ªan aliarse con los democristianos y los liberales en una f¨®rmula Jamaica (negro, amarillo y verde); ni quer¨ªan saber nada de La Izquierda. So?aban en la vieja f¨®rmula roja y verde, que les dio el Gobierno y la gloria desde 1998 hasta 2005, pero ahora se han quedado muy lejos.

Algo similar le ocurre a La Izquierda, cuyo ¨¦xito indiscutible de anoche no tiene traducci¨®n alguna a efectos de Gobierno. Gregor Gysi ha calificado de "sacudida" el efecto producido por su fuerza sobre la vida pol¨ªtica alemana. M¨¢s radicales, menos aburguesados y en cualquier caso los ¨²nicos airados que quedan en el arco pol¨ªtico alem¨¢n, los izquierdistas han sido los m¨¢s directos beneficiarios del desgaste socialdem¨®crata y, por tanto, de la Gran Coalici¨®n. Ahora tendr¨¢n la oportunidad de aprovechar la fuerza que han obtenido en estas elecciones, su tambi¨¦n hist¨®rico 11,9%, para empe?arse en un proceso centr¨ªpeto que vuelva a proporcionar a la izquierda la posibilidad de Gobierno.

Oskar Lafontaine declar¨®, justo al conocer los resultados, que "La Izquierda se ha afianzado". La Izquierda quiere avanzar en el Oeste y las elecciones de ayer van a ayudarla. Es una marcha imparable. Ahora s¨®lo gobierna en Berl¨ªn, pero est¨¢ en conversaciones de gobierno en Turingia, en el Este, y en el Sarre, donde podr¨ªa sentarse por primera vez en un gobierno occidental.

Estas elecciones, con una consolidaci¨®n del esquema de peque?os partidos en el segmento de la izquierda, confirman que para estas formaciones el camino del poder no pasa ya por su participaci¨®n independiente en coaliciones transversales sino en la recuperaci¨®n de la unidad que ahora mismo ofrece la derecha entera.