El Palau impone el despido disciplinario a Gemma Montull

El nuevo equipo gestor del Palau de la M¨²sica, encabezado por Mariona Carulla, ha empezado ya a deshacerse de los antiguos cargos de confianza del ex presidente F¨¨lix Millet. La fundaci¨®n decidi¨® ayer imponer el despido de Gemma Montull, ex directora financiera de la entidad e hija de la mano derecha de Millet, Jordi Montull, seg¨²n fuentes cercanas al Palau. La antigua directiva, a la que se ha impuesto un despido disciplinario, tambi¨¦n es una de las personas querelladas por la fiscal¨ªa.

Los gestores del Palau hace semanas que trataban de echar a Montull, pero desde un comienzo rehusaron hacerlo con un despido improcedente. Ello hubiera supuesto una indemnizaci¨®n millonaria, a lo cual no estaban dispuestos.

Los vecinos reclaman al fiscal que ordene parar las obras del hotel del Palau

La junta de la asociaci¨®n Orfe¨® Catal¨¤ exigi¨® en su junta extraordinaria de anoche la dimisi¨®n de la hija del ex presidente Clara Millet, el ex director administrativo Jordi Montull y la ex directora general Rosa Garicano. Si no se van, ser¨¢ la asamblea de la entidad la que los destituya. Garicano se neg¨® a dejar su cargo.A la reuni¨®n de la junta del Orfe¨® celebrada ayer s¨®lo asisti¨® Garicano de los afectados por la renovaci¨®n que quieren emprender los nuevos gestores del Palau. Varios asistentes a la reuni¨®n explicaron que Garicano quiso defender ante el resto de la junta su "honorabilidad" al considerar que sus responsabilidades terminaban en la gesti¨®n del Palau y no en los asuntos financieros. Adem¨¢s, Garicano record¨® que no est¨¢ despedida, sino que su contrato est¨¢ suspendido temporalmente.

Estas mismas fuentes explicaron que la direcci¨®n del Orfe¨® todav¨ªa no tiene una respuesta de Montull, y Clara Millet se muestra predispuesta a abandonar la instituci¨®n. En todo caso, otras fuentes cercanas al Palau explicaron que la renovaci¨®n es un hecho, puesto que para la nueva etapa no se podr¨¢ contar con muchos de los actuales cargos de confianza.

La junta extraordinaria de ayer tambi¨¦n acord¨® emprender "acciones penales y civiles" contra Millet y Montull, ambos querellados por la fiscal¨ªa. El equipo que dirige Mariona Carulla considera que el an¨¢lisis que ha realizado hasta ahora la auditor¨ªa -que terminar¨¢ entre el 20 y el 25 de octubre- arroja pruebas m¨¢s que suficientes para llevar a ambos ex directivos a los tribunales. Ello no impide que luego el Palau decida emprender acciones legales por posibles nuevos delitos que se?ale la auditor¨ªa.Tambi¨¦n se decidi¨® demandar a ambos por "da?os morales", en compensaci¨®n por el perjuicio causado a la imagen de la entidad.

Durante la reuni¨®n se trat¨® tambi¨¦n del tema del futuro y se coincidi¨® en que durante todos estos a?os ha habido un exceso de atenci¨®n a la piedra en detrimento del proyecto cultural y musical del Palau. En este sentido, se abri¨® el debate sobre la necesidad de contar con un proyecto art¨ªstico coherente, lo que, de todas maneras, a¨²n no est¨¢ claro si se har¨¢ a trav¨¦s de una direcci¨®n art¨ªstica unipersonal o una comisi¨®n, o si se optar¨¢, finalmente, por organizar un concurso internacional. El debate se aplaz¨® a la siguiente reuni¨®n de la junta, que se centrar¨¢ espec¨ªficamente en este tema.

La auditor¨ªa, por otra parte, contin¨²a y siguen abiertos muchos frentes en el Palau. Los vecinos del Casc Antic y la Plataforma de Defensa de la Barcelona Vella pidieron ayer al fiscal que tome cartas en el asunto y paralice el proceso urban¨ªstico del proyecto del hotel del Palau que impuls¨® F¨¨lix Millet y que cont¨® con el pl¨¢cet de la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona. Los vecinos consideran que en la operaci¨®n relativa a los tres edificios recalificados para hacer posible el hotel, justo al lado del Palau, hay indicios de actuaciones posiblemente delictivas y por eso piden al fiscal que, a su vez, solicite al juez que pare el proceso urban¨ªstico. Entienden los demandantes de la suspensi¨®n que, si existe materia penal, el proceso administrativo debe paralizarse. Una petici¨®n que dif¨ªcilmente llegara a nada ya que el juez del caso, Juli Solaz, ni siquiera ha llamado a declarar a F¨¨lix Millet.