Cearsolo ir¨¢ a la c¨¢rcel sin juicio al pactar la pena con el fiscal
El ex director financiero del Guggenheim ser¨¢ condenado a tres a?os y medio de prisi¨®n por el desfalco al museo
Roberto Cearsolo, el ex director de Administraci¨®n y Finanzas del Museo Guggenheim, ir¨¢ a la c¨¢rcel por el desfalco cometido en las cuentas de las sociedades Tenedora e Inmobiliaria de la pinacoteca entre 1998 y 2005. El abogado de Cearsolo ha pactado con la fiscal¨ªa y la acusaci¨®n particular una pena de tres a?os y medio de prisi¨®n, con lo que no habr¨¢ juicio oral. La instrucci¨®n se desarroll¨® el a?o pasado, en el que se tom¨® declaraci¨®n al imputado. Tras el acuerdo, s¨®lo queda que el juez lo ratifique en una sentencia.
A pesar de que Cearsolo no tiene antecedentes penales, una pena tan abultada comporta el ingreso directo en la c¨¢rcel. Es probable que cuando cumpla un tercio de la condena (14 meses), se le pueda aplicar el tercer grado (el r¨¦gimen de semilibertad que permite el contacto con el exterior) y progresar despu¨¦s hacia la libertad condicional.
Rob¨® 557.000 euros falsificando cheques y con transferencias por Internet
Cearsolo confes¨® al descubrirse el fraude y ha devuelto 438.000 euros
La apropiaci¨®n entre 1998 y 2005 de 557.000 euros de los fondos a las sociedades Tenedora (encargada de las compras de arte) e Inmobiliaria (gestiona la propiedad del edificio de Gehry) fue ratificado por el propio Cearsolo una vez que fueron descubiertas las irregularidades por la persona que le sustituy¨® cuando cogi¨® una baja laboral y buscaba datos para el Tribunal Vasco de Cuentas P¨²blicas (TVCP). El escrito pactado entre la fiscal¨ªa, la acusaci¨®n particular y Cearsolo reconoce como hechos probados que el acusado se aprovech¨® de su condici¨®n de director financiero para obtener una clave de acceso y detraer dinero de las cuentas de las dos sociedades por medio de transferencias a trav¨¦s de Internet.
Adem¨¢s, emiti¨® diversos cheques y talones, para lo cual imit¨® la firma de Juan Ignacio Vidarte, el director del Guggenheim, quien era la ¨²nica persona autorizada para ello. Las cantidades por las que se efectuaban las transferencias y se emit¨ªan los cheques y talones eran de diverso importe, siendo las de mayor cuant¨ªa las dos transferencias realizadas en marzo y abril de 2005 (por valor de 72.000 euros y 38.000 euros respectivamente). Para que el desfalco no fuera descubierto, Roberto Cearsolo se encarg¨® de falsificar los libros de cuentas de ambas sociedades y arranc¨® varias hojas.
Seg¨²n el escrito de acusaci¨®n aceptado por el imputado, las transferencias de dinero a la cuenta de Cearsolo y el uso fraudulento de cheques constituyen un delito continuado de apropiaci¨®n y otro continuado de falsedad en documento mercantil. Por ambos, se solicita una pena de 21 meses de prisi¨®n, inhabilitaci¨®n de sufragio y una multa de seis euros al d¨ªa durante cinco meses y seis d¨ªas. Cuando el ex director financiero del Guggenheim alter¨® la contabilidad en los libros de cuentas cometi¨® otro delito continuado de falsedad de documento mercantil, por el que se pide otra pena de 21 meses de c¨¢rcel y una multa de seis euros al d¨ªa durante nueve meses. En total, una condena de 42 meses de c¨¢rcel.
Como agravante se destaca el abuso de confianza y como atenuantes, la confesi¨®n del desfalco y la restituci¨®n de parte del dinero. De los 557.000 euros robados, Cearsolo ha repuesto 438.000, con lo que a¨²n le queda de devolver 119.000. Las sociedades Tenedora e Inmobiliaria tratar¨¢n de recuperar esa cantidad por medio de un procedimiento civil.
Las apropiaciones del ex director financiero del Guggenheim se vieron favorecidas por la falta de control de las cuentas del museo. Desde 1998, los consejos de administraci¨®n de las dos sociedades, participadas al 50% por el Gobierno vasco y la Diputaci¨®n de Vizcaya, acordaron no realizar auditor¨ªas a propuesta del propio Cearsolo. As¨ª, ¨¦ste se qued¨® al mando de todo y con las manos libres para hacer lo que hizo.
El esc¨¢ndalo caus¨® tal conmoci¨®n que el Parlamento cre¨® una comisi¨®n de investigaci¨®n para aclarar lo sucedido. Adem¨¢s del desfalco, esta comisi¨®n investig¨® las p¨¦rdidas millonarias por operaciones de cambio de divisas. Entre 2002 y 2005, las dos sociedades adquirieron d¨®lares con vistas a un futuro inmediato en el que atender las compras de obras a artistas que facturan en esa moneda. Pero el euro no se despreci¨® respecto al d¨®lar, sino que ocurri¨® justo al contrario. Y al mando de esa operaci¨®n de cambio de divisas se encontraban dos personas: Roberto Cearsolo y Juan Ignacio Vidarte.
Las conclusiones de la comisi¨®n, refrendadas por el pleno el pasado mes de diciembre, resultaron demoledoras para Vidarte, al que se cit¨® como principal responsable de la opacidad, falta de transparencia y control en la gesti¨®n econ¨®mica-financiera. Entre sus recomendaciones, el Parlamento solicit¨® que se aplicara a las sociedades Tenedora e Inmobiliaria los mismos mecanismos de control y de seguimiento econ¨®mico-financiero que el Gobierno y las diputaciones ejercen sobre el resto de sociedades p¨²blicas.
A pesar del varapalo institucional a Vidarte, la Diputaci¨®n de Vizcaya ha respaldado totalmente su gesti¨®n y no le atribuye ning¨²n tipo de responsabilidad en el caso ni en la ruinosa compra de d¨®lares, contra la opini¨®n del Gobierno, El actual viceconsejero de Cultura, Antonio Rivera, fue el presidente de la comisi¨®n de investigaci¨®n y el redactor del informe con las conclusiones y recomendaciones. Entre otras cosas, en aquel se apuntaba que el director del museo no realiz¨® acciones de tutela y responsabilidad y que acept¨®, a propuesta de Cearsolo, levantar el control de las auditor¨ªas anuales. "Desconoci¨® por dejaci¨®n el funcionamiento diario del departamento de Finanzas. Vidarte permiti¨® que no existiera un control al hacerlo depender todo de Cearsolo".

El desfalco
- Sin auditor¨ªas. A partir de 1998 se dejan de hacer auditor¨ªas en las sociedades Tenedora e Inmobiliaria por iniciativa de Cearsolo, lo que le permite campar a sus anchas hasta 2005.
- Cheques falsos. Sin vigilancia, Cearsolo emprende una carrera desenfrenada de transferencias bancarias por Internet desde las cuentas de las sociedades a las suyas, para lo que se hace con una clave inform¨¢tica. Adem¨¢s, emite cheques y talones falsificando la firma de Juan Ignacio Vidarte. En total, se apropia de casi 557.000 euros.
- Salta la alarma. Una ruinosa operaci¨®n de compra de divisas descubierta por el Tribunal Vasco de Cuentas P¨²blicas dispara las alarmas. El Parlamento requiere una investigaci¨®n a fondo. Cearsolo coge la baja laboral en abril del a?o pasado al constatar que va a ser descubierto y su sustituto temporal descubre el desfalco cuando buscaba datos para el tribunal.
Confesi¨®n.Cearsolo confiesa y devuelve 438.000 euros. El Parlamento crea una comisi¨®n de investigaci¨®n y carga contra Vidarte. La fiscal¨ªa, la acusaci¨®n particular y el abogado de Cearsolo pactan la pena de c¨¢rcel
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