Medicina de anticipaci¨®n

Corr¨ªa el a?o 1934 cuando 46 m¨¦dicos cirujanos de Vizcaya apostaron por desafiar las normas imperantes entonces en la medicina e involucrarse en una aventura mucho m¨¢s democr¨¢tica. Con su apuesta, aquellos profesionales pusieron el germen de lo que hoy conocemos como el Igualatorio M¨¦dico Quir¨²rgico (IMQ), tal y como recuerda su presidente, Pedro Ensunza, un gran conocedor de la historia de esta entidad.

"Eran otros tiempos, en los que proliferaban mutualidades quir¨²rgicas y cajas de socorro, que atend¨ªan s¨®lo a sus empleados" y a¨²n no exist¨ªa una sanidad p¨²blica con acceso universal. "Las personas que necesitaban ser atendidas m¨¦dicamente ten¨ªan que recurrir a instituciones ben¨¦ficas o a la medicina privada", relata Ensunza, m¨¦dico especialista en Oncolog¨ªa.

Las primeras cuotas fueron de 2,5 pesetas por persona o 5 por familia

IMQ cuenta hoy con 303.000 asegurados y factura 108,9 millones

El Igualatorio se marc¨® el reto, y lo logr¨®, de atender a trabajadores cuyos salarios no superaban las mil pesetas al mes. Cuotas de 2,5 pesetas por individuo o de cinco si correspond¨ªa a una entidad familiar les daba acceso a la prestaci¨®n del servicio quir¨²rgico. Aquella maniobra represent¨® "una especie de popularizaci¨®n de la medicina, que permiti¨® el acceso a una asistencia quir¨²rgica de calidad a capas muy importantes de la poblaci¨®n".

El doctor Enrique Ocharan, "promotor y alma m¨¢ter del Igualatorio", se ocup¨® de peinar todo el mundo para encontrar la mejor f¨®rmula de gesti¨®n de la incipiente instituci¨®n m¨¦dica. "Compar¨® el funcionamiento de much¨ªsimas mutualidades quir¨²rgicas que operaban entonces y se decant¨® por un modelo basado en el pago de una cuota mensual, gracias a la cual, los mutualistas ten¨ªan derecho a acceder a una serie de prestaciones. La mutualidad, por su parte, corr¨ªa con los gastos generados por el cirujano, as¨ª como por los originados por la cl¨ªnica", algo que despert¨® las antipat¨ªas de algunos especialistas sanitarios y aviv¨® la primera convulsi¨®n que azot¨® a la entidad. Y es que el origen del IMQ iba en contra de los intereses de los propios m¨¦dicos.

"Las cien pesetas que cada facultativo aport¨® de su bolsillo como capital inicial para poner en marcha el proyecto animaron el progreso del Igualatorio, pero no proporcionaron ganancias a sus inversores hasta que concluy¨® el ejercicio". La historia posterior reproducir¨ªa otras escenas de crispaci¨®n, pero no de aquella magnitud.

El Igualatorio cuenta en la actualidad con 303.000 asegurados. En 2008 ingres¨® 180,9 millones de euros, y tiene m¨¢s de 2.600 facultativos que abarcan la totalidad de los campos asistenciales repartidos por cerca de 20 centros. Su principal reto de futuro es el centro hospitalario que va a levantar en la pen¨ªnsula de Zorrotzaurre, que concentrar¨¢ las cl¨ªnicas que tiene repartidas por todo el Pa¨ªs Vasco.