"Nos falta un poco de toque"
El responsable de la sala de m¨¢quinas del proyecto deportivo m¨¢s fastuoso de la historia es un muchacho que pasa inadvertido por el casco antiguo de Madrid. Son pocos los viandantes que reparan en Xabi Alonso (Tolosa, Guip¨²zcoa; 1981) y menos aun los que consideran que una foto con ¨¦l ser¨¢ motivo de ostentaci¨®n. Atento con los curiosos, Xabi se encuentra fenomenal consigo mismo. Tan poco afectado. Tan resuelto a ir a su aire, a comerse un buen chulet¨®n en Juli¨¢n de Tolosa, con la inconfundible pasi¨®n de los carn¨ªvoros, como ¨¦l dice, "a la taberna del pueblo". Ma?ana visita al Sevilla con el Madrid.
Pregunta. Como medio centro, debe resolver los problemas funcionales del Madrid, que ha generado grandes expectativas y al que se le exige lo m¨¢ximo inmediatamente. ?C¨®mo lo vive?
"Que en el Bernab¨¦u te sigan 80.000 pares de ojos es bonito. En las buenas y en las malas"
"El equipo se partir¨¢ y lo aceptamos. Achicar hacia arriba ser¨ªa un suicidio"
"Quiz¨¢ est¨¦ buscando a los delanteros demasiado r¨¢pido. Podr¨ªa elegir mejor"
"Extremos puros no tenemos muchos. Los de arriba tienen que abrirse m¨¢s"
Respuesta. El m¨ªo es un puesto que requiere mucha responsabilidad porque nuestro potencial en ataque es muy grande y hay que saber usarlo bien. Para eso tenemos que facilitar las cosas a los de arriba. Y en la defensa tienes que proteger para que los cuatro de atr¨¢s no est¨¦n vendidos. Requiere concentraci¨®n y constancia los 90 minutos. No te puedes rajar en ning¨²n momento.
P. ?Se siente especialmente responsabilizado cuando critican al equipo porque no juega bien?
R. Por mi car¨¢cter y mi forma de ser, me tomo muy a pecho lo que hacemos. La expectaci¨®n que generamos y mi posici¨®n me obliga a sentir esta responsabilidad.
P. ?Le preocupa el clima de inconformismo de la hinchada?
R. No, porque sab¨ªa que ser¨ªa as¨ª. No me pilla desprevenido. Para lo bueno o para lo malo, se sacar¨¢n conclusiones precipitadas. Independientemente de lo que se pueda decir, intento ver la realidad con claridad. S¨¦ que hemos conseguido buenos resultados y que tenemos que mejorar. En el vestuario lo sabemos todos.
P. En los torneos de ajedrez, los jueces piden silencio para que los participantes puedan pensar cada movimiento. ?C¨®mo hace usted para no dejarse distraer por 70.000 hinchas cabreados cuando tiene que conducir al equipo?
R. A m¨ª me gusta el ajedrez. Pero es diferente. Cada uno vive en su h¨¢bitat. Los ajedrecistas conviven con su concentraci¨®n, leyendo y anticipando jugadas. Nosotros tenemos que pensar y ejecutar en d¨¦cimas de segundo asumiendo que no siempre tomaremos las decisiones correctas. Que en el Bernab¨¦u te sigan 80.000 pares de ojos para cualquier cosa es bonito. En los d¨ªas malos, como en los buenos, al final disfrutas de eso. La intrascendencia, eso de que nunca pase nada, no alimenta tu deseo de avanzar.
P. ?C¨®mo quiere que juegue su equipo?
R. Quiero que la gente tenga el sentido colectivo de leer los tiempos de cada partido, saber cu¨¢ndo hay que jugar r¨¢pido y cu¨¢ndo tener m¨¢s paciencia, cu¨¢ndo hay que elaborar buscando las bandas, buscando m¨¢s verticalidad, junt¨¢ndonos bien... Estamos en ese proceso. Nos falta la constancia de jugar 90 minutos. Pero hay fases en las que el equipo s¨ª que est¨¢ jugando bien.
P. Contra el Marsella se ve¨ªa la preocupaci¨®n en sus caras. ?Por qu¨¦ tienen dificultades a la hora de manejar la pelota?
R. Los rivales, en las primeras partes, han estado muy frescos f¨ªsicamente y han hecho planteamientos dirigidos a impedirnos jugar. Nosotros tenemos que calmarnos, tener m¨¢s paciencia y saber que los partidos no se ganan desde el primer minuto. Hay que elaborarlos y esperar el momento. En los ¨²ltimos partidos, ese momento est¨¢ llegando en las segundas partes. Nos gustar¨ªa que llegase, antes pero no siempre las cosas salen como uno quiere.
P. ?Qu¨¦ movimientos les pide Pellegrini para generar espacios?
R. Los movimientos sin bal¨®n vienen dados por los jugadores que tienes en el ataque. Ves que son muy resolutivos. A veces tiendes a buscar el pase vertical cuando lo m¨¢s indicado es dar dos o tres horizontales hasta hallar el espacio. Soy consciente de que a lo peor estoy buscando a los delanteros demasiado r¨¢pido cuando lo correcto es contemporizar para buscar m¨¢s tarde el espacio. En eso, en saber elegir, yo considero que puedo hacerlo mejor.
P. ?Ese pase vertical, simplificador, es espont¨¢neo o lo han previsto as¨ª?
R. Hay que marcar pautas y tambi¨¦n dar libertad a los jugadores para arriesgarse en el ¨²ltimo pase. A veces, con un pase vertical, te ahorras el riesgo que puede conllevar mantener mucho la pelota. Con el bal¨®n estamos buscando el equilibrio entre la agresividad y la tranquilidad. Pero, en general, nos falta un poco de toque.
P. ?C¨®mo quiere Pellegrini que el equipo se pare en el campo cuando pierde el bal¨®n?
R. Tenemos jugadores muy ofensivos y ellos, a veces, se arriesgan. Entonces se parte un poco el equipo. Son situaciones que aceptamos y con las que vamos a tener que convivir. Nos vamos a tener que replegar porque en inferioridad no puedes ir a apretar. Si la l¨ªnea de cuatro se pone muy arriba, cuando el rival tiene el bal¨®n controlado, eso ser¨ªa venderte y un suicidio. No puedes achicar para adelante. Tienes que replegarte y esperar para jugar con el espacio. As¨ª evitas que te creen demasiadas ocasiones. Si el objetivo era recibir pocos goles, lo estamos haciendo muy bien.
P. ?Qui¨¦n mueve la l¨ªnea?
R. Los centrales. Los medios podemos protegerles o cubrirles. Pero los que saben hasta d¨®nde tienen que llegar son ellos. Hay mucha comunicaci¨®n entre nosotros porque estos movimientos los tendremos que hacer los tres o cuatro de atr¨¢s con uno o dos medios.
P. ?C¨®mo ve a Lass?
R. Jugando con dos medios, aporta cosas muy buenas. Ha cogido mucha soltura con el bal¨®n, de dar pases largos, de llegar a la l¨ªnea de tiro... Es un medio centro con facilidad para ir para arriba. Es un jugador muy importante.
P. El Sevilla hace mucho da?o canalizando el juego por fuera. ?C¨®mo se neutraliza eso?
R. Con muchas ayudas a los laterales. Los laterales ir¨¢n a desdoblar en el ataque y, si perdemos la posesi¨®n, los medios no podremos perder el ojo a los extremos contrarios que lleven el bal¨®n. El Sevilla tiende a eso y tiene rematadores muy buenos. Sobre todo, Luis Fabiano.
P. El Madrid sufre cuando le aprietan arriba. ?No cree que ser¨ªa m¨¢s f¨¢cil salir de la presi¨®n con extremos o con m¨¢s subidas de los laterales?
R. Extremos puros no tenemos muchos. Hay que aprovechar esos espacios y para eso los de arriba tienen que abrirse. Tenemos que mejorar en ese aspecto. Cristiano [Ronaldo], Karim [Benzema], el Pipa [Higua¨ªn] y Kak¨¢ pueden hacerlo.
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