Egipto declara la guerra al Louvre

Egipto ha declarado la guerra institucional al Museo del Louvre y ha "rescindido" todo tipo de colaboraci¨®n con ¨¦l hasta que el Estado franc¨¦s no devuelva cinco fragmentos de frescos funerarios, procedentes de la tumba tebana del noble Tetiky (XVIII dinast¨ªa, esto es, 1.500 a?os antes de Cristo), excavada en la necr¨®polis tebana, en la orilla oeste de Luxor. Seg¨²n el jefe del Consejo de Antig¨¹edades Egipcias, Zahi Hawass, los cinco frescos fueron robados en los a?os ochenta y adquiridos despu¨¦s por los responsables del Louvre, contraviniendo las convenciones que regulan el tr¨¢fico de este tipo de obras de arte.

Los frescos, efectivamente, fueron comprados en 2003, en la famosa casa de subastas Drouot, en Par¨ªs, por el Estado franc¨¦s que, seg¨²n un portavoz del Louvre, "obr¨® de buena fe". La convenci¨®n que regula este trato de obras de arte antiguas fue elaborada por la Unesco en 1970, ratificada por Francia en 1997, y estipula que las obras objeto de una transacci¨®n posterior a 1970 deben ser restituidas a su lugar de origen. Los responsables del Louvre aseguran que cre¨ªan que los frescos funerarios hab¨ªan salido de Egipto antes de esa fecha, pero unas fotograf¨ªas demostraron posteriormente lo contrario.

Las pinturas reclamadas proceden del sepulcro de Tetiky

Son obras sustra¨ªdas en los a?os ochenta y compradas en 2003

El centro ha cometido un "acto irresponsable", clama Zahi Hawass

El ultim¨¢tum egipcio acarrea varias medidas fulminantes: adem¨¢s de la suspensi¨®n de varias conferencias conjuntas, se anulan autom¨¢ticamente varias excavaciones que especialistas franceses llevaban a cabo en la zona monumental de Saqqara, cerca de El Cairo. Por medio de una carta remitida en agosto al museo parisiense, Hawass manifestaba que el hecho de comprar obras de arte robadas "es un acto irresponsable". "?C¨®mo un museo puede hacer esto? Es una forma de animar a los saqueadores de tumbas. Si compras antig¨¹edades robadas, al d¨ªa siguiente vendr¨¢n a robar otra vez", a?ad¨ªa.

En principio, las autoridades francesas parecen favorables a la devoluci¨®n inmediata de la pieza. As¨ª lo asegur¨® ayer el ministro de Cultura, Fr¨¦d¨¦ric Mitterrand, que ha convocado para ma?ana una reuni¨®n de especialistas estatales que decidir¨¢n sobre el asunto. Si estos expertos ratifican que las piezas salieron de Egipto contraviniendo la ley "se devolver¨¢n r¨¢pidamente, sin ning¨²n retraso", seg¨²n adelant¨® el ministro.

La violenta y sorpresiva medida egipcia se produce dos semanas despu¨¦s de que el ministro de Cultura egipcio desde hace 20 a?os, Farouk Hosni, saliera derrotado como candidato a presidir la Unesco tras una re?ida y disputada votaci¨®n celebrada en la sede de esta instituci¨®n, en Par¨ªs. Hosni, que part¨ªa como favorito, qued¨® segundo, despu¨¦s de la b¨²lgara Irina Bokova, tras una dura lucha diplom¨¢tica internacional en la que participaron muchos pa¨ªses. El egipcio cont¨®, durante los d¨ªas que duraron las votaciones, con el determinante rechazo de la prensa francesa y de varios intelectuales, que recordaron las expresiones antisemitas emitidas en la asamblea egipcia por el ministro de Cultura. Adem¨¢s de esto, Egipto acusa a Francia y a su diplomacia de no haber dado todo el apoyo prometido a su candidato y, a la postre, de causar su ca¨ªda.

Algunos miembros del Ministerio de Cultura manifestaron ayer a la agencia France Press que desde que Hosni sali¨® derrotado notan cierta animadversi¨®n por parte de sus colegas egipcios.

Desde Egipto, sin embargo, se recuerda que la petici¨®n de devoluci¨®n de las piezas se hab¨ªa hecho desde hac¨ªa meses y se niega la relaci¨®n entre la decisi¨®n de romper las relaciones con el Louvre y la derrota de Hosni en la Unesco. De hecho, en marzo, la arque¨®loga francesa Christiane Ziegler ya recibi¨® la prohibici¨®n de trabajar en Saqqara, donde esta especialista ya hab¨ªa excavado anteriormente.

La presi¨®n sobre el Louvre y sobre Francia la aplica Hawass tras haberla empleado infructuosamente con Alemania, al negarse ¨¦sta a prestar el pol¨¦mico busto de Nefertiti para una exposici¨®n en Egipto, y Reino Unido, que se neg¨® a ceder la Piedra de Rosetta.