"Un poquito tarde"

A Llu¨ªs Companys lo fusilaron el 15 de octubre 1940. El martes pasado, 69 a?os despu¨¦s, el Gobierno espa?ol entreg¨® a su nieta, Mar¨ªa Luisa Gally, un documento de reparaci¨®n de la figura del ¨²nico presidente elegido democr¨¢ticamente asesinado por el fascismo en Europa. Fue en un homenaje sencillo, emotivo, celebrado en la residencia del embajador de Espa?a en M¨¦xico, con la presencia del ministro de Justicia, Francisco Caama?o, y del consejero de Relaciones Institucionales de la Generalitat, Joan Saura.

Despu¨¦s de las autoridades, habl¨® la nieta. Unas pocas palabras, las justas para recordar a tantos otros perseguidos, detenidos, torturados y asesinados por la dictadura de Franco, para advertir de que la familia seguir¨¢ intentando la anulaci¨®n del juicio y para decir que la reparaci¨®n llega "un poquito tarde".

Sentada en su despacho de directora del instituto Luis Vives, Mar¨ªa Luisa Gally recuerda todos los a?os perdidos: "Mi madre sufri¨® mucho. Mi madre lo pas¨® muy mal. Se entera aqu¨ª de que su padre hab¨ªa sido detenido. No puede ir a Espa?a. No lo ve. No habla con ¨¦l. No sabe nada. Y hasta much¨ªsimos a?os despu¨¦s no puede tener en su poder todas las cosas de su padre. Pero no solamente fue la muerte de su padre, sino que se perdi¨® su hermano, que estaba hospitalizado en Francia por problemas mentales. Y en el momento en que trasladaron a los enfermos porque llegaban las tropas alemanas, ¨¦l se perdi¨®. De hecho, mi abuelo Llu¨ªs muere sin saber nunca qu¨¦ hab¨ªa pasado con su hijo, que tambi¨¦n se llamaba Llu¨ªs. Se le encuentra despu¨¦s, recogido por unos campesinos franceses que se apiadaron de ¨¦l. Desde aqu¨ª le mand¨¢bamos lo que pod¨ªamos con muchos esfuerzos... Todo eso marca una historia familiar. Nosotros crecimos entre la ayuda que hab¨ªa que mandar al t¨ªo Llu¨ªs y el peso de la figura de mi abuelo... Y por eso dije que la reparaci¨®n llega un poquito tarde. Porque mi madre padeci¨® enormemente. No vuelve a ver ni a su padre ni a su hermano... Ella no vuelve a poner un pie en Espa?a. Porque dec¨ªa que antes que pedirle un pasaporte a Franco se mor¨ªa. Que ni hablar... Mi madre enferma muy gravemente en 1972 y ya no es muy consciente de la muerte de Franco, desgraciadamente. Mi madre y mi padre mueren en el exilio...".

Al final de su discurso, el ministro Caama?o dijo: "Las ¨²ltimas palabras del president ante el pelot¨®n fueron: '?per Catalunya!' Hoy Catalu?a y toda Espa?a reconocen su valor y proclaman que su ejemplo forma parte del patrimonio de dignidad democr¨¢tica sobre el que se asienta nuestra convivencia en paz y libertad". A Mar¨ªa Luisa Gally tambi¨¦n le gustar¨ªa que todos los libros de historia que durante tanto tiempo mintieron digan que su abuelo muri¨® como vivi¨®, de forma honorable. Aunque ya sea, desgraciadamente, "un poquito tarde".