Ret¨ªrate a un monasterio

Pocas veces se hab¨ªa o¨ªdo hablar tan mal de los pol¨ªticos en la v¨ªa p¨²blica y en los bares de la Comunidad, que son unos cuantos (15.298, seg¨²n el anuario publicado por La Caixa en 2008). Hay bastante unanimidad en los comentarios. La gente de derechas est¨¢ que trina con sus l¨ªderes (o con algunos) y sus l¨ªderes est¨¢n mosqueados entre s¨ª, por m¨¢s que pregonen unidad en sus congresos. El PP tiene m¨¢s caras que un icosaedro. Por su parte, los votantes de izquierda est¨¢n despistados con los suyos, que tambi¨¦n tienen muchas caras. Y entre todas ellas, vaya usted a saber cu¨¢les eligen para las candidaturas a la Comunidad y al Ayuntamiento. En estas cosas y en otras muchas, la izquierda madrile?a es imprevisible, pero sin tino. Por eso pierde las elecciones.

Sobre los inquietos y l¨®gicos comentarios callejeros sobrevuela la corrupci¨®n, verdadera causante del paro y de la situaci¨®n incierta de la ciudadan¨ªa. Hay apat¨ªa, desencanto, desconfianza, impotencia e incertidumbre ante el hoy, el ma?ana y el pasado ma?ana, que tiene la pinta de ser un futuro imperfecto de subjuntivo.

Por si ello fuera poco, ayer se estren¨® en el estadio Vicente Calder¨®n el nuevo himno de la selecci¨®n espa?ola de f¨²tbol. Firmado por C¨¦sar Cadaval, del d¨²o Los Morancos, el engendro cantata es para ponerse a levitar de pasmo: "Banderas al viento de los espa?oles. / Que se entere el mundo que Espa?a es as¨ª. / ?Cantemos, gritemos, / que son los mejores / nuestros jugadores, / que ya est¨¢n aqu¨ª! Roja pasi¨®n espa?ola / la reina de nuestras almas / que hace que todos cantemos / ?Viva Espa?a! ?Viva Espa?a!". Por favor, que siga el o¨¦, o¨¦, o¨¦.

Entre la corrupci¨®n y el himno conseguir¨¢n que muchas personas juiciosas y abochornadas se retiren a sus jardines interiores, al budismo, a un monasterio o al alguna colonia hippy de esas que quedan por ah¨ª.