Aprender a entender

Vivir sin entender la ciencia es complicado en nuestros d¨ªas -cambio clim¨¢tico, fuentes de energ¨ªa, c¨¦lulas madre, selecci¨®n gen¨¦tica de los hijos, inteligencia artificial-, pero ser¨¢ casi imposible cuando los ni?os que ahora est¨¢n en la escuela se hagan adultos. No es que vayan a tener dif¨ªcil encontrar trabajo: es que ni siquiera van a poder opinar sobre las grandes cuestiones de su tiempo.

No sabemos cu¨¢les ser¨¢n esas grandes cuestiones. Ni siquiera podemos predecir cu¨¢les van a ocupar los titulares la semana que viene, no digamos dentro de 20 a?os. Abigarrar los programas de estudios con todas las masas de detalles especializados que hoy creemos importantes no es la soluci¨®n. Como no lo es someter a los chavales a un tratado de historia de la ciencia. Eso son reencarnaciones de la lista de los reyes godos, y entender la ciencia no es eso, sino asimilar una forma de pensar. La mejor forma de pensar que tenemos. Y que tendremos.

Desde tiempos de Galileo y Newton la ciencia ha producido un cuerpo de conocimiento inmenso, pero eso es s¨®lo una peque?a fracci¨®n del que producir¨¢ en el futuro. La ciencia es una empresa activa y continua, y est¨¢ continuamente mejorando sus modelos y teor¨ªas, y poni¨¦ndolos a prueba contra la realidad con experimentos cada vez m¨¢s exigentes, inteligentes y refinados. El conocimiento cient¨ªfico progresa y se expande continuamente. Nunca va a haber una foto fija que lo congele, ni siquiera en el programa de estudios m¨¢s exhaustivo.

La ¨²nica forma de mantenerse al d¨ªa con ese progreso acelerado es ser parte de ¨¦l: asimilar en qu¨¦ consisten las explicaciones racionales del mundo, c¨®mo las descubrieron los mejores cient¨ªficos del pasado, c¨®mo las est¨¢n explorando los investigadores del presente, y en qu¨¦ consiste eso, y por qu¨¦ se hace, y c¨®mo ello transforma nuestras sociedades con m¨¢s profundidad que cien guerras y mil fechas hist¨®ricas.

La gravitaci¨®n de Newton debe estar en los programas, desde luego, pero con la condici¨®n de que los ni?os la entiendan. Mientras eso no ocurra, ampliar el programa con una clase sobre la relatividad de Einstein ser¨¢ in¨²til. Y la clase de Newton tambi¨¦n.