Los pilotos alertan del peligro que causan las gaviotas en Hondarribia

El impacto de cientos de aves contra un avi¨®n mientras aterrizaba en el aeropuerto de Hondarribia el pasado d¨ªa 10 de noviembre puso en "serio peligro" la vida de los 29 pasajeros y la tripulaci¨®n. Afortunadamente, no hubo que lamentar da?os personales, pero la aeronave qued¨® "inutilizada". Sobre la pista quedaron 46 gaviotas muertas. Los pilotos elevaron ayer una queja formal por este accidente y exigieron a los responsables del aer¨®dromo que adopte "medidas inmediatas" para que no se vuelva a repetir algo tan "grave".

El suceso se produjo de noche cuando un avi¨®n procedente de Barcelona realizaba la maniobra para tomar tierra en la pista. Los pilotos se vieron sorprendidos por cientos de gaviotas que se encontraban en el umbral de la pista y empezaron a impactar violentamente contra el avi¨®n. "El aterrizaje se complic¨® extremadamente y s¨®lo la pericia de la tripulaci¨®n impidi¨® que se produjera una cat¨¢strofe", seg¨²n explic¨® el Colegio oficial de Pilotos de Aviaci¨®n Civil (COPAC) en un comunicado. El hecho de que el avi¨®n fuera turboh¨¦lice redujo la gravedad del suceso.

"Las aves ponen en riesgo la seguridad de los vuelos", afirman los pilotos

Los pilotos aseguraron que no es la primera vez que sucede algo similar y es conocido el riesgo de choque con aves en Hondarribia, por lo que denunciaron que los responsables del aeropuerto "ni han informado a las tripulaciones por los canales establecidos de la posible presencia de aves ni han adoptado medidas para mitigar dicho riesgo para la seguridad de las operaciones aeroportuarias".

El colegio de pilotos record¨® que Hondarribia cuenta con halcones para ahuyentar a las gaviotas, pero este servicio finaliza con el ocaso. Por esta raz¨®n, reclamaron que las pistas activas y de rodaje "deben ser revisadas regularmente para detectar y dispersar a las aves y fauna". Los pilotos ya se han puesto en contacto con el director del aeropuerto, con AENA y con la Agencia Estatal de Seguridad A¨¦rea (AESA) para poner comunicarles la gravedad del suceso y solicitar la inmediata adopci¨®n de medidas preventivas.

Por otro lado, la diputada foral de Movilidad, Arantza Tapia, defendi¨® que el acuerdo hispanofranc¨¦s de 1992, que limita el n¨²mero de vuelos en Hondarribia, es innecesario y "no tiene mucho sentido" en una Europa en la que hay un "espacio a¨¦reo com¨²n". Calific¨® el convenio de "restrictivo", y consider¨® que el aer¨®dromo tiene capacidad para hacer "m¨¢s vuelos" y que hoy por hoy existen "posibilidades abiertas" para su desarrollo.