"En el BNG hay cierta sensaci¨®n de provisionalidad"
Desde ayer, una nueva corriente act¨²a dentro del BNG. La cabeza visible de M¨¢isBNG, el portavoz parlamentario Carlos Aymerich (Vigo, 1967), la define ¨²nicamente como "nacionalista y de izquierdas". La funci¨®n de contrapeso a la UPG y la necesidad de que el Bloque abandone cierta sensanci¨®n de provisionalidad sobrevuelan el discurso de Aymerich.
Pregunta. ?La sociedad percibe falta de liderazgo en el BNG?
Respuesta. No creo. El portavoz nacional que tenemos re¨²ne cualidades, tiene experiencia. Pero existe cierta sensaci¨®n de provisionalidad. Eso no es bueno. M¨¢isBNG pretendemos ayudar al conjunto del Bloque a superarla.
P. Que M¨¢isBNG se defina de izquierdas, ?ha causado tensiones internas?
"Nos alegramos de que el PSdeG corrija su posici¨®n sobre el gallego"
"Feij¨®o retrasa su decisi¨®n sobre las cajas para coincidir con el PP de Madrid"
R. Siempre hemos dicho que el Bloque tiene un proyecto com¨²n, nacionalista y de izquierdas, y nos reconocemos en ¨¦l. Pero no basta: habr¨¢ que dejar claro qu¨¦ se pretende en un momento de fracaso estrepitoso del neoliberalismo. Y los que compartimos valores de lucha por la igualdad, rebeld¨ªa frente a la injusticia, la defensa de la soberan¨ªa nacional o el antiimperialismo, tenemos que actualizar eso en la Galicia de hoy, distinta a la de 1982.
P. ?Dar¨¢ la batalla para ser candidato a la Xunta?
R. Esa no es la cuesti¨®n ahora. Lo que debe preocuparnos es fortalecer el Bloque, que llegue m¨¢s unido, con una percepci¨®n social m¨¢s clara, con m¨¢s simpat¨ªa. Que las municipales sean un punto de inflexi¨®n y el inicio de una trayectoria ascendente.
P. ?Qu¨¦ papel tendr¨¢ Anxo Quintana?
R. Participa en el proyecto, pero no estar¨¢ en primera l¨ªnea.
P. Tras el bronco inicio de legislatura, ?el Parlamento ha recuperado la cordialidad?
R. Se ha vuelto a la normalidad en el trabajo, lo que no significa que no haya debates, antagonismos, contraposici¨®n de alternativas. Eso debe ser un Parlamento democr¨¢tico.
P. ?Se diferencia este clima del del pasado mandato?
R. Que no haya mayor¨ªas absolutas facilita el debate. Igual que sucede en los medios p¨²blicos, donde hab¨ªa elementos mejorables en el bipartito pero ahora vemos lo que supone la mayor¨ªa absoluta del PP en manipulaci¨®n informativa, en cierre de espacios a la oposici¨®n e incluso acoso. En la C¨¢mara, lo que intenta el Gobierno es que los debates no salgan a la calle. Nosotros, como BNG, debemos sacarlos y traer al Parlamento lo que pasa en la calle.
P. El bipartito tampoco reform¨® los medios p¨²blicos.
R. Por supuesto. El BNG forz¨® que estuviese en el pacto de Gobierno, insistimos durante la legislatura, pero a la otra parte no le interesaba cambiar el modelo. Hoy pagamos las consecuencias.
P. En las ¨²ltimas semanas aumentan las coincidencias con el PSdeG: defensa del gallego, cr¨ªtica de la CRTVG... ?La oposici¨®n facilita el entendimiento?
R. Con el PSdeG tenemos acuerdos municipales, no estatales ni en Galicia. Hay coincidencias y nos alegramos, sobre todo cuando ellos corrigen posiciones: acerca de top¨®nimos, pol¨ªtica ling¨¹¨ªstica. Es lo que apoya la mayor¨ªa de este pa¨ªs. Porque hay que recordar que la mayor¨ªa no vot¨® por el PP el pasado 1 de marzo.
P. Los socialistas van aclarando su posici¨®n sobre el gallego.
R. Ser¨ªa muy positivo para el pa¨ªs que la identificaci¨®n hist¨®rica entre defensa de la lengua y progresismo se mantenga. Que el PSdeG se instale ah¨ª ser¨ªa positivo, al margen de consideraciones partidarias. Hay pruebas de fuego: ?pactar¨¢n el decreto del gallego con el PP?
P. ?Y las diferencias?
R. Las hay, y grandes. El PSdeG se abstuvo en una proposici¨®n del BNG para que la Xunta impugnase el FROB, que invade competencias auton¨®micas, ante el constitucional. En las cajas, no se pronuncian: ?su postura es la de Blanco o la de Ord¨®?ez?
P. ?Por qu¨¦ triunf¨® el discurso de la imposici¨®n del gallego?
R. De fondo, se da una pugna entre la Galicia que queremos, una regi¨®n m¨¢s sin recursos o una Galicia que decide libremente su modelo econ¨®mico y social. Y la energ¨ªa es nuestra lengua e identidad. La mentira puede servir para ganar elecciones, pero no da para m¨¢s. No resiste el contraste con la realidad. Si hay una lengua con problemas, es el gallego.
P. ?Se han cometido errores en la defensa del idioma?
R. El 18 de octubre hubo una marcha hist¨®rica y, si hubo errores, son mayores los aciertos.
P. ?Qu¨¦ se juega Galicia en el futuro de las cajas?
R. Contar con un instrumento estrat¨¦gico de financiaci¨®n de nuestra econom¨ªa. Nos jugamos asistir a otra deslocalizaci¨®n como la energ¨¦tica, la empresarial o la de la gente joven preparada que emigra. El riesgo es muy grande y ah¨ª coinciden, a nivel estatal, PSOE y PP.
P. ?Qu¨¦ escenario prefiere el Bloque para las cajas?
R. Hay tres objetivos irrenunciables: el centro de decisi¨®n debe estar en Galicia, un nuevo marco regulador debe asegurar el car¨¢cter p¨²blico y democratizar las entidades, y se deben blindar las competencias. Para lograrlos hay varias posibilidades.
P. ?Cu¨¢l les gusta m¨¢s?
R. Si optamos entre que sean absorbidas por cajas de fuera o que se fusionen, la fusi¨®n. Si la opci¨®n es entre un sistema institucional de protecci¨®n entre cajas gallegas y for¨¢neas, apostamos porque se d¨¦ dentro del pa¨ªs.
P. ?Y su pron¨®stico?
R. Lo que pretende Feij¨®o es ir atrasando la decisi¨®n bajo las ropas de la prudencia. Intenta ganar tiempo para una pol¨ªtica de hechos consumados y presentar como inevitable lo que siempre quiso y que el PP de Madrid afirma sin ambages: un gran grupo financiero af¨ªn a partir de la Caja Madrid de Rodrigo Rato.
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