Una celebridad
El lunes por la noche, en su casa escondida de Castelldefels, Leo Messi supo oficialmente que era el ganador del Ballon d'Or de France Football 2009. Una gran noticia que esperaba con cierta impaciencia y mucha ilusi¨®n, as¨ª lo prueba su sonrisa, t¨ªmida pero sincera y expresiva; sus ojos brillantes, cuando el director de la revista lo anunci¨® en presencia de su novia Antonela, de su hermano Rodrigo, de sus sobrinos. En este momento, se pudo medir su emoci¨®n y hasta qu¨¦ punto la noticia le llenaba de felicidad, de una alegr¨ªa profunda. La familia brind¨® con vino y la sensaci¨®n es que Messi era consciente de que pasaba a formar parte de una lista de celebridades del f¨²tbol.
Leo es un galardonado fant¨¢stico que ha aplastado a sus rivales: gan¨® con una ventaja impresionante, nunca observada desde que existe el premio. Un r¨¦cord dif¨ªcil de batir; lo merece. Su a?o ha sido tremendo. Nunca fall¨® en las grandes citas con el Bar?a, cuya temporada ha sido tambi¨¦n excepcional. Lo sab¨ªamos desde hace tiempo y este premio lo confirma si lo necesitaba: Messi es un grand¨ªsimo jugador, m¨¢gico, uno de los que marcar¨¢n la historia del f¨²tbol. Un gigante como lo fue su compatriota Maradona, con quien comparte muchos puntos en com¨²n, principalmente la genialidad con el bal¨®n. No solamente es un jugador desequilibrante que marca diferencias con gestos de extraterrestre sino que tampoco olvida que el f¨²tbol es un deporte colectivo. Participa y lucha durante 90 minutos, sin calcular. Por eso, en Leo se reconoce la esencia del balompi¨¦ y se convierte en un ejemplo.
No es casual que fueran los azulgrana quienes pod¨ªan ganar el trofeo. El ¨¦xito de Leo recompensa al equipo de Guardiola y su juego exquisito. Xavi (tercero) Iniesta (cuarto), Eto'o (quinto) e Ibrahimovic (s¨¦ptimo) se destacan del resto en la relaci¨®n. ?For?a Bar?a! grita el mundo. ?Viva el f¨²tbol!, al fin y al cabo. Xavi hubiera sido un magn¨ªfico premiado al igual que Iniesta. Son los que organizan, pasan, y sin esta pareja -Leo no lo ignora- el delantero no ser¨ªa tan eficaz. Pero no son atacantes y ya se sabe que el Ballon d'Or se ofrece a los goleadores. En 57 a?os, s¨®lo un portero (Yachine) y tres defensas (Beckenbauer, Sammer y Cannavaro) lo han obtenido. Puede parecer injusto. Pero as¨ª es el Ballon d'Or, como la vida, a veces injusta; nunca si la pelota se queda en casa de Leo.
Vincent Machenaud es redactor de France Football, revista que entrega el Bal¨®n de Oro.
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