Las ONG de la comunicaci¨®n
Las radios comunitarias, sin publicidad ni ¨¢nimo de lucro, se unen desde A Coru?a para legalizar su existencia
"No somos piratas, somos las ONG de la comunicaci¨®n". Y un imprescindible canal para garantizar la libertad de expresi¨®n y permitir que tengan voz en las ondas las comunidades o los colectivos minoritarios a los que nunca se les ve o escucha en las radios o televisiones convencionales, las comerciales. Los denominados medios comunitarios, sin ¨¢nimo de lucro ni publicidad, son esencialmente radios llamadas libres y est¨¢n en guerra contra el proyecto de ley del audiovisual que inicia ahora su tramitaci¨®n en las Cortes.
Son un centenar en Espa?a en peligro de desaparici¨®n y m¨¢s de un tercio ya se han agrupado en una red, con sede en A Coru?a, para emprender unidos la batalla contra los pol¨ªticos para conseguir su supervivencia.
Una nueva ley pone en peligro la continuidad de estos medios
La coru?esa Cuac FM tiene un dial fijo y recibe el respaldo del ayuntamiento
La existencia de medios de comunicaci¨®n que no tengan un fin comercial responde a un derecho recogido en la Declaraci¨®n de los Derechos Humanos, en diversas normativas europeas y en la Constituci¨®n espa?ola. Pero, a pesar de todo ese aparente respaldo, est¨¢n "indefensos", seg¨²n destaca Tom¨¢s Legido desde la coru?esa Cuac FM, una de las seis radios libres de Galicia y la m¨¢s activa de todas ellas.
Uno de sus fundadores, Mariano Fern¨¢ndez, es el coordinador de la red espa?ola de medios comunitarios, que ha alzado la voz contra una nueva ley del audiovisual, que considera el espacio radioel¨¦ctrico y los medios como un mercado, no como un servicio accesible a toda la poblaci¨®n para garantizar la pluralidad informativa y la libertad de expresi¨®n.
"El proyecto del Gobierno no nos cierra las puertas, pero tampoco garantiza nuestra existencia y nos dejan como una mera posibilidad a merced de las autonom¨ªas", explica Legido. "Y resulta alarmante dada la horrible tendencia de las administraciones" a reducir garant¨ªas y derechos en el campo de la comunicaci¨®n y la informaci¨®n, a?ade. Que la futura ley pretenda prohibir cualquier "tipo de comunicaci¨®n audiovisual comercial" cuando dependen de los patrocinios para pagarse los equipos, o que limite sus gastos anuales a un m¨¢ximo de 100.000 euros es para las comunitarias motivo de batalla por la supervivencia.
Vigo, con Radio Piratona ya veintea?era, Lugo, Santiago, Ferrol y Corme (Radio Roncudo) son localidades con emisoras comunitarias. En la de A Coru?a, algo m¨¢s de un centenar de voluntarios se turnan semanalmente para asegurar las ocho horas diarias de programaci¨®n (de las cuatro de la tarde hasta medianoche) con espacios de expresi¨®n de lo m¨¢s ecl¨¦ctico y variado. Asociaciones culturales locales o algunas organizaciones no gubernamentales difunden sus actividades y mensajes a trav¨¦s de Cuac FM. Un grupo de octogenarios se explaya cada semana con un programa que aborda toda la actualidad del mar, ya sea en el ¨¢mbito local o el internacional. Inmigrantes de Am¨¦rica Latina se encargan de emitir lo m¨¢s genuino y novedoso de la salsa, una m¨²sica que en las emisoras comerciales no suelen gozar de un lugar preferente, como ocurre con el hip hop o el heavy, que tambi¨¦n logran hueco especializado en Cuac FM.
Es una emisora "consolidada y respetada" del dial coru?¨¦s. Y es afortunada al contar con una frecuencia fija (103.4 de la FM), un estudio cedido en el campus de Elvi?a y el apoyo de los poderes locales, como la universidad o el ayuntamiento. Otras radios no lo tienen tan f¨¢cil. Muchas son las emisoras libres que andan vagando por el dial en busca de una frecuencia. En un peque?o municipio de Granada, el alcalde cerr¨® la emisora comunitaria porque era cr¨ªtica con su gesti¨®n y le impuso una sanci¨®n de 100.000 euros por emitir, "a pesar de ser un derecho legal", seg¨²n sus defensores.
S¨®lo una radio comunitaria, en Valencia "y por despiste", logr¨® del Gobierno aut¨®nomo permiso legal para emitir. "Pero no somos piratas, no somos como las 3.000 sin licencia que emiten con fines comerciales y de lucrarse", aclara Tom¨¢s Legido. Hace hincapi¨¦, adem¨¢s, en que muchas de las radios comunitarias son a la postre una "cantera" de profesionales o de formatos de programas novedosos que acaban adoptando radios comerciales.
Suelen cumplir adem¨¢s una funci¨®n social que resulta dif¨ªcil de encontrar en otras emisoras, como la batalla abierta por Cuac FM, con gran respuesta en redes sociales de Internet, para que A Coru?a deje de ser una de las pocas ciudades universitarias que carece inexplicablemente de un albergue juvenil para ofrecer a visitantes pernoctaciones a precio reducido.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.