Donantes que no lo son
Los expertos extreman la vigilancia para evitar fraudes en las donaciones de vivos - Cada a?o se rechaza el 2%
Se trata de evitar que al donar el propio ri?¨®n nadie obtenga dinero u otro tipo de beneficios, una picaresca que el paro ha acrecentado. Para ello, los centros acreditados para practicar trasplantes de donantes vivos cuentan con un f¨¦rreo sistema de evaluaci¨®n en el que intervienen nefr¨®logos, psic¨®logos e incluso juristas. Todos han recibido alguna vez espont¨¢neos que acuden a ofrecerse para vender su ¨®rgano. Tras informarles de que en Espa?a no est¨¢ permitido, salen de las consultas igual que han entrado. Tambi¨¦n se rechazan entre un 1% y un 2% de los donantes vivos porque los expertos detectan situaciones extra?as. Por ejemplo, que el donante pueda haber recibido presiones por parte de familiares o esperar contraprestaciones no demasiado claras.
Un paciente pregunt¨®: "?De qu¨¦ edad tengo que traer al voluntario?"
La donaci¨®n de vivos en Espa?a se ha doblado en tan s¨®lo un a?o, pasando de poco m¨¢s del 3 % a un 7%. El objetivo de la Organizaci¨®n Nacional de Trasplantes (ONT) es alcanzar el 15%, la media europea, para as¨ª poder suplir la falta de ¨®rganos m¨¢s jovenes por el descenso de accidentes de tr¨¢fico. En paralelo, han aumentado las personas con serias dificultades econ¨®micas que ofrecen vender su ri?¨®n en Internet, o que se acercan a las consultas de los hospitales para ofrecerse como donantes fingiendo estar relacionados con el receptor (y presunto comprador). "A¨²n son pocos y los nefr¨®logos los detectan a la primera. Pero lo que est¨¢ claro es que Internet y el aumento de la demanda ha cambiado el contexto desde que realizamos el primer trasplante", reconoce Rafael Matesanz, presidente de la ONT.
Lluis Guirado, nefr¨®logo de la Fundaci¨®n Puigvert, relata: "Vino un marroqu¨ª con un chico de 18 a?os que dec¨ªa que era su amigo y le quer¨ªa donar. No lo v¨ª claro y le dije que no pod¨ªamos aceptar un donante tan joven. Contest¨®: ?Entonces de qu¨¦ edad tengo que traerlo?", explica Guirado.
Tambi¨¦n ha vivido historias parecidas Antonio Osuna, coordinador de trasplantes de Granada: "Vino un anciano enfermo con su asistenta. No col¨®". Y Federico Oppenhaimer, nefr¨®logo del hospital Cl¨ªnic de Barcelona recuerda a un empresario que trajo como "donantes voluntarios" a cinco de sus trabajadores. "Cuando le dije que primero deb¨ªa ver si en su familia hab¨ªa alguien compatible no volvi¨® m¨¢s".
En ocasiones, superan la primera entrevista, pero antes de decidir operar se realizan pruebas de compatibilidad y otras exploraciones para ver si el donante, con un ri?¨®n menos, gozar¨¢ de buena salud. Adem¨¢s, cada caso pasa por un psic¨®logo, un comit¨¦ de bio¨¦tica y, en ¨²ltima instancia, un juez. "Por dudas no m¨¦dicas, acostumbramos a rechazar dos o tres casos al a?o", afirma Oppenhaimer. Ante el dilema, prefieren ser conservadores. "En el 2008 los donantes no relacionados (entre amigos) s¨®lo fueron tres, lo que demuestra que el filtro es exhaustivo", afirma Matesanz.
Montserrat Fern¨¢ndez, psic¨®loga de la Fundaci¨®n Puigvert, recuerda otro caso que tampoco super¨® la evaluaci¨®n: "Era un marido que iba a dejar a su mujer enferma y quer¨ªa darle el ri?¨®n para no sentirse culpable y tambi¨¦n porque la hab¨ªa maltratado durante el matrimonio".
Tambi¨¦n hay hijos o sobrinos que, por presi¨®n de la familia, se ven obligados a ofrecerse. En la primera visita no se atreven a decirlo. En la intimidad, acaban diciendo la verdad. En estos casos se dice al receptor y a los familiares que no son compatibles. Tambi¨¦n ocurren situaciones en las que el receptor promete una herencia m¨¢s generosa al hijo que se preste. "Resulta dif¨ªcil juzgar la situaci¨®n", concluye Matesanz.
El factor amoroso
Simion Avram, un rumano de 28 a?os que lleva cinco viviendo en Espa?a, tiene como candidato de donante a su padre, que a principios de este a?o vino desde su pueblo en Transilvania a Espa?a. Contin¨²a esperando porque la Embajada rumana a¨²n no les ha facilitado el int¨¦rprete autorizado para traducir la informaci¨®n sobre los riesgos que corre como donante. Si no est¨¢n seguros los m¨¦dicos de que los asume con pleno conocimiento, no dan luz verde al proceso.
El idioma es uno de los obst¨¢culos para las donaciones de vivos por parte de extranjeros. Y se miran con lupa porque muchos de los espont¨¢neos que pretenden vender sus ¨®rganos son personas en una situaci¨®n econ¨®mica precaria y que no perciben el delito porque en sus pa¨ªses existe un comercio de ¨®rganos ilegal y enquistado en el sistema. A¨²n as¨ª, los expertos coinciden en la necesidad de no dejarse llevar por los prejuicios. "La gran mayor¨ªa de veces la donaci¨®n se produce por amor", afirma Montserrat Fern¨¢ndez, psic¨®loga de la Fundaci¨®n Puigvert. Por ejemplo, en el caso de Jose Mar¨ªa Mestres, de 70 a?os, y Cati Rodr¨ªguez, peruana de 45. "Investigamos y supimos que su relaci¨®n ven¨ªa ya de antes de que ¨¦l enfermase y que se quer¨ªan mucho", explica Fern¨¢ndez.
En Granada se encuentra uno de los pocos casos de amigas trasplantadas. Una amiga decidi¨® darle un ri?¨®n a otra antes de entrar en di¨¢lisis. "Siempre he pensado que si nos ayud¨¢semos el mundo ser¨ªa mejor", dice. Recuerda tambi¨¦n que sus vecinos creyeron -falsamente- que eran amantes.
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