Bernanke, todo o nada
La oposici¨®n republicana complica la reelecci¨®n del presidente del banco central estadounidense
Una persona no hace el sistema. Pero cuando se trata del presidente de la Reserva Federal, la cosa cambia. Ben Bernanke super¨® con baja nota el primer obst¨¢culo en el Capitolio, y eso preocupa a Wall Street. En el tr¨¢mite perdi¨® el apoyo de los republicanos, los mismos que le colocaron al frente del banco central m¨¢s poderoso del mundo cuando George Bush era presidente de Estados Unidos. El Senado tiene la llave para que pueda seguir cuatro a?os m¨¢s.
Su nominaci¨®n debe ser refrendada por el pleno a la vuelta del receso navide?o, a partir del 19 de enero. Son muchos los senadores que tienen reservas con el trabajo de Bernanke al frente de la Reserva Federal (Fed), hasta el punto de verle como el causante en parte del problema que desemboc¨® en la peor crisis desde la Gran Depresi¨®n, al no anticipar la que se ven¨ªa encima con el colapso hipotecario en 2007.
Un tercio de los senadores rechaza votarlo y otro tercio no lo ha decidido
Sus detractores le reprochan falta de previsi¨®n en la crisis hipotecaria
"No hizo virtualmente nada hasta que fue tarde", opina el l¨ªder de los republicanos en el comit¨¦, Richard Shelby. "Me opuse hace cuatro a?os a su nombramiento porque sab¨ªa que dar¨ªa continuidad al legado de Alan Greenspan", a?adi¨® su compa?ero de filas Jim Bunning, quien cree que es el momento de "poner fin a los fracasos" cometidos por la Fed en los ¨²ltimos 14 a?os.
Bunning se mofa de la revista Time por considerar a Bernanke como el personaje del a?o. "Es como premiar al capit¨¢n del Titanic. Espero que lo haga mejor que otros que ocuparon esa portada", dice citando a Adolf Hitler y Richard Nixon. Para el dem¨®crata Jeff Merkley, la Fed "paviment¨® el camino hacia esta oscura recesi¨®n" al jugar un papel instrumental en la burbuja inmobiliaria, con su pol¨ªtica de dinero barato, y pide "otro l¨ªder" que gu¨ªe la fase de recuperaci¨®n.
El mandato de Bernanke vence el 1 de febrero. Las encuestas muestran que uno de cada tres senadores se opone a su permanencia. Y a un mes de que expire ese plazo, m¨¢s de un tercio no sabe a¨²n como votar¨¢. Entre los que piensan inclinarse por el no est¨¢ el ex candidato presidencial John McCain. Y extrapolando el resultado del primer voto en comisi¨®n (16 a favor y siete en contra), podr¨ªa recibir 25 noes en pleno, en su mayor¨ªa conservadores.
Los errores de Ben Bernanke no los discute nadie, como admite Robert Corker. ?Pero hab¨ªa una alternativa mejor? "No", responde el republicano Judd Gregg. "La Fed estar¨¢ mejor servida por alguien que aprendi¨® de las experiencias pasadas", precisa el dem¨®crata Robert Men¨¦ndez. Tim Johnson insiste en que "no hay duda de que debe hacerlo mucho mejor en adelante".
"Es cierto que Bernanke capitane¨® el barco en un momento cr¨ªtico", reconoce la republicana Judd Gregg. Pero dijo haber perdido la confianza en su equipo. "Se equivoc¨® demasiadas veces", a?adi¨® Mike Johanns. Y no fue s¨®lo un error de anticipaci¨®n, sino tambi¨¦n de actuaci¨®n. Para el dem¨®crata Sherrod Brown, en su respuesta la Fed descuid¨® el empleo, un pilar de su mandato.
Esta falta de apoyo pol¨ªtico preocupa a los inversores. Si los noes se mantienen al nivel actual, Wall Street podr¨¢ lidiar con el resultado sin problemas. Pero si 35 de sus 100 miembros votan en contra, "ser¨¢ serio", como se?alan desde JP Morgan Chase. Ben Bernanke, opinan los observadores de la Fed, se convirti¨® en la "cabeza de turco" de la frustraci¨®n generada por la crisis entre una ¨¦lite pol¨ªtica que se juega sus asientos en noviembre.
El momento no puede ser m¨¢s inoportuno. El repunte econ¨®mico est¨¢ en marcha, aunque con un 10% de paro no es todo lo prometedor que se desear¨ªa. Y Bernanke deber¨¢ lidiar adem¨¢s con la estructura que salga de la reforma financiera, en la que se propone cortar alas a la Fed. El gran peligro es que este debate acabe minando la independencia del banco central estadounidense, mientras el Congreso y la Casa Blanca se disputan qui¨¦n lo controlar¨¢.
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