El calvario de la profesora Galayo

"Comportamiento antisocial", "medida represaliante", "venganza o desquite", "violaci¨®n de derechos fundamentales", "revancha".... Estos son algunos de los calificativos de la sentencia del Juzgado de lo Social n¨²mero 1 de Las Palmas que condena al Obispado de Canarias a indemnizar con 210.295 euros a la ex profesora de religi¨®n Mar¨ªa del Carmen Galayo Mac¨ªas, Menchu, por da?os morales y materiales. La severa decisi¨®n del magistrado Francisco Jos¨¦ Trujillo Calvo llueve sobre mojado. Antes que ¨¦l, se han pronunciado sobre el caso Galayo otro juzgado de Las Palmas, el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC, en dos ocasiones), el Tribunal Supremo y el Tribunal Constitucional.

Se puede despedir a un profesor por la vida privada, pero no investigarla

El 'caso Galayo' ha sido analizado por el Tribunal Supremo y el Constitucional

"B¨²scate la vida porque ni el obispo ni yo te vamos a contratar". Menchu Galayo no olvidar¨¢ el tono con que el vicario de Ense?anza en la Di¨®cesis de Canarias, Hip¨®lito Cabrera, le dijo que nunca volver¨ªa a dar clases de religi¨®n. Ocurri¨® el 13 de octubre de 2000, cuando Galayo ya llevaba 11 cursos con contrato de Educaci¨®n para ense?ar Religi¨®n y Moral Cat¨®lica en centros de Infantil o Primaria de Las Palmas, a plena satisfacci¨®n de la autoridad eclesi¨¢stica. Pero aquel 13 de octubre se le torci¨® la vida. "El vicario me pregunt¨® qui¨¦n era un se?or que hab¨ªa aparecido conmigo en un programa de televisi¨®n sobre sectas. Le dije: 'Es Jaime Rubio Rosales, un compa?ero'. Hip¨®lito insisti¨®: '?Qu¨¦ hace ese se?or contigo?'. Quer¨ªa saber qu¨¦ me un¨ªa a Jaime. Le dije que afectividad. As¨ª: afectividad. Y me dijo all¨ª mismo que no me iban a contratar de nuevo".

Desde entonces, Menchu Galayo ha vivido un ins¨®lito calvario judicial, con derrotas y triunfos. ?Acusaci¨®n? "Mantener una relaci¨®n afectiva con otro hombre, distinto de su esposo, del que se ha separado, estando en pecado", seg¨²n los hechos contenidos en una sentencia de 2002, cuando ella ten¨ªa 55 a?os.

En pleito tan extravagante ha intervenido hasta el Tribunal Constitucional (TC), que en febrero de 2007 rechaz¨® que los acuerdos Espa?a-Vaticano sean inconstitucionales, pese a permitir este tipo de despidos. Fue el Tribunal Superior de Canarias quien hab¨ªa apelado al TC sobre la cuesti¨®n, antes de entrar en el fondo del caso Galayo. "La ense?anza religiosa puede implicar un conjunto de exigencias, como que sus docentes destaquen por su recta doctrina y por el testimonio de vida cristiana", sostuvo la pol¨¦mica sentencia del TC, redactada por su presidenta, Emilia Casas.

El Constitucional, no obstante, avis¨® entonces de que volver¨ªa sobre el asunto, ya a fondo, si el conflicto le llegaba en recurso de amparo. Y remiti¨® al TSJC la responsabilidad de resolverlo judicialmente. ?ste sentenci¨® que el obispado vulner¨® "el derecho fundamental a la intimidad" de la docente. "El vivir en pecado que se?ala el obispado puede justificar un despido, pero no que el obispado indague en la vida privada para averiguar qui¨¦n vive en pecado y qui¨¦n no. La Iglesia s¨®lo podr¨¢ penetrar en la esfera de la intimidad personal y familiar del profesor cuando se trate de conductas ¨ªntimas con trascendencia externa. La exigencia al profesor de religi¨®n como servidor de un ministerio y no mero empleado no otorga patente de corso a la Iglesia para, bajo el auspicio de criterios estrictamente religiosos, injerirse en su vida privada", concluy¨® el TSJC.

Antes de ser despedida, la profesora Galayo hab¨ªa recibido esta carta manuscrita del obispo de Canarias: "Nos ha llegado una informaci¨®n debidamente contrastada de una situaci¨®n irregular que de acuerdo con las normas de la Conferencia Episcopal, el C¨®digo de Derecho Can¨®nico y del S¨ªnodo, nos impide otorgarte la Declaraci¨®n de Idoneidad Eclesi¨¢stica. Soy consciente del que el tuyo no es caso ¨²nico. Pero te aseguro que en la medida que vayamos obteniendo informaci¨®n debidamente verificable seguiremos el mismo criterio [contra otros docentes]. Son normas que no hemos inventado nosotros y que debemos cumplir en el Evangelio y en la Iglesia. Sabr¨¢s comprenderlo y asumirlo siempre que sepas ser cristiana y no limitarte a buscar un empleo en lugar de a realizar un ministerio".

La di¨®cesis nunca cumpli¨® el reiterado mandato judicial de proponer un nuevo contrato a Galayo. "Con la negativa / omisi¨®n de propuesta [de contrato], se mantiene intacta e inalterable la violaci¨®n del derecho a la intimidad, sin que se haya cesado en la actuaci¨®n que en su d¨ªa la Sala [del TSJC] declar¨® nula", sentencia ahora el magistrado Trujillo. La di¨®cesis de Canarias puede hacer lo mismo ahora, pero antes deber¨¢ depositar en el juzgado la cuantiosa indemnizaci¨®n a Galayo. El c¨ªrculo del abuso se ha estrechado. La prueba es el ¨¢nimo con que la ex profesora Galayo ha recibido este nuevo fallo judicial. "Vivo esta Navidad y el a?o nuevo con tranquilidad, por primera vez en m¨¢s de diez a?os", confes¨® el ¨²ltimo d¨ªa de 2009 a EL PA?S.