Hosteleros contra pol¨ªticos
Rebeli¨®n de bares y restaurantes contra las limitaciones para fumar en lugar p¨²blico
No s¨®lo en Espa?a han puesto el grito en el cielo las asociaciones de hosteler¨ªa por las medidas que restringen fumar en locales p¨²blicos. Coincidiendo con la adopci¨®n de este tipo de medidas en todo el mundo en los ¨²ltimos a?os, las asociaciones de restauradores u hosteleros se han movilizado para impedir su entrada en vigor o, al menos, suavizar su dureza. Su estrategia ha consistido, casi en todas partes, en anticipar efectos muy negativos para el sector, para su facturaci¨®n y su empleo a resultas de esas normas.
En Espa?a, donde el Ministerio de Sanidad anunci¨® una ley m¨¢s restrictiva para 2010, la hosteler¨ªa no ha tardado en elevar sus quejas. "La prohibici¨®n de fumar se abatir¨¢ b¨¢sicamente sobre los bares, sobre todo los peque?os, que bajar¨¢n sus ventas un 10%", apunta Jos¨¦ Luis Guerra, adjunto al presidente de la Federaci¨®n Espa?ola de Hosteler¨ªa (FEHR). Guerra basa su pron¨®stico en lo sucedido en Irlanda, donde hay prohibici¨®n total de fumar en sitios p¨²blicos. Aqu¨ª ser¨¢ a¨²n peor, a?ade, porque hay menos habitantes por bar o restaurante.
No est¨¢ claro que las restricciones a fumar afecten a los ingresos de los restauradores
En Espa?a difiere la posici¨®n de bares y restaurantes con la de cadenas hoteleras
Los resultados de las protestas de los hosteleros son desiguales. En EE UU, donde las restricciones a fumar son m¨¢s severas, han logrado asegurarse ciertas excepciones que no evitan lo inevitable (la ampliaci¨®n de las restricciones), pero que, al menos, les permiten efectuar una transici¨®n ordenada hacia el escenario sin humo. Igual ocurri¨® en Europa, donde, mediante protestas y acciones ante los tribunales, han podido suavizar las normas m¨¢s duras y evitar el efecto emulaci¨®n de la ley irlandesa. En Alemania lograron que el Tribunal Constitucional anulara disposiciones de dos l?nder que imped¨ªan fumar en bares peque?os. Y en Croacia lograron que se retirara la prohibici¨®n total de fumar en bares seis meses despu¨¦s de aprobarse.
Los hosteleros aseguran no tener inter¨¦s en que sus clientes fumen. "Nos gustan m¨¢s los locales sin humo", explica Guerra. "El tabaco no es negocio y nos da m¨¢s trabajo: limpiar superficies, ceniceros, se queman cosas..., pero la transici¨®n debe hacerse de forma gradual y sin perjudicar a los propietarios". En la FEHR argumentan, adem¨¢s, que el actual momento de crisis no es el mejor, ya que el sector est¨¢ muy debilitado. "Calculamos que ha sufrido desde que empez¨® la crisis, en abril de 2007, una ca¨ªda del negocio en torno al 15%", asegura Antonio de Mar¨ªa, presidente de Horeca, la patronal hostelera de C¨¢diz.
Sanidad no comparte su argumentaci¨®n y afirma que la prohibici¨®n impulsar¨¢ la facturaci¨®n de esos locales, al hacerlos m¨¢s atractivos para el no fumador. ?Qui¨¦n tiene raz¨®n? ?Qu¨¦ ha ocurrido en otros pa¨ªses? Los expertos se?alan que es dif¨ªcil comparar porque cada pa¨ªs tiene modelos diferentes. Ahora mismo, al margen de Irlanda (prohibici¨®n total) y Reino Unido (casi total), en la mayor parte de Europa hay excepciones que permiten cierto nivel de humo: espacios separados en locales grandes y posibilidad de que el propietario opte por el smoking o el no smoking en los peque?os. A cambio, se impone que en los espacios para fumadores haya buena ventilaci¨®n.
Algo similar ocurre en EE UU, pa¨ªs pionero en el smoking ban (Minnesota, 1975). Ah¨ª hay prohibici¨®n de fumar en 38 Estados (el ¨²ltimo, Michigan, en diciembre), con excepciones como bares de puros, clubes privados, casinos. Tambi¨¦n hay Estados que eximen a bares y restaurantes de la prohibici¨®n total bajo ciertas condiciones. De hecho, en junio s¨®lo el 41% de los estadounidenses viv¨ªa en zonas sujetas a la prohibici¨®n.El problema para determinar los efectos del smoking ban sobre la hosteler¨ªa es la falta de transparencia. Autoridades pol¨ªticas y sanitarias, por un lado, y hosteleros, por otro, emiten informes contrapuestos. Muchos de los estudios de la industria, encargados a consultoras, arrojan resultados sospechosamente en l¨ªnea con el inter¨¦s de sus clientes. Y con frecuencia los propios hosteleros no se ponen de acuerdo entre s¨ª. En Espa?a, por ejemplo, no parece haber sinton¨ªa entre bares y restaurantes, por un lado, y cadenas hoteleras. "?stas son partidarias de la prohibici¨®n total", dice Manuel Fern¨¢ndez Vicario, presidente de la Uni¨®n de Asociaciones de Estanqueros, "quiz¨¢ por no estar dispuestas a hacer fuertes inversiones en habilitar espacios".
Tampoco es f¨¢cil precisar, una vez confirmada una bajada del negocio, si se debe al smoking ban o a otras causas. Los expertos afirman que la ca¨ªda del consumo de tabaco que se aprecia a nivel global es en parte efecto de las medidas antitabaco, pero tambi¨¦n de la crisis. ?sta, de hecho, est¨¢ da?ando m¨¢s al mercado tabaquero que las restricciones. "En 2006, el a?o en que entr¨® en vigor la ley espa?ola", explica Fern¨¢ndez Vicario, "las ventas de tabaco bajaron un 1%. Sin embargo, hasta noviembre de 2009 bajaron el 9,8%".
A juzgar por los datos facilitados por las asociaciones irlandesas y brit¨¢nicas, Irlanda y el Reino Unido parecen haber sido los m¨¢s afectados por las restricciones. Las patronales de pubs de Irlanda han informado de que se han cerrado varios centenares de pubs (el 12%) a los dos a?os de la aprobaci¨®n de la ley (2004). Para huir de la prohibici¨®n, muchos pubs han adecuado espacios exteriores. En el Reino Unido se habla de una p¨¦rdida del 14% de la clientela y del 10% de la facturaci¨®n en los meses siguientes a la aprobaci¨®n de la ley (2006). En este pa¨ªs, la British Beer and Pub Association (BBPA) anunci¨® que sus ventas de 2007 hab¨ªan sido las m¨¢s bajas desde 1930. Y las principales empresas propietarias de pubs sufrieron una fuerte ca¨ªda de ingresos y de su valor en Bolsa entre 2007 y 2008. Fue el caso de Mitchells & Butlers, Punch Taverns, Enterprise Inns o Greene King. Otros estudios muestran, sin embargo, resultados neutros. The Publican hizo una encuesta entre 303 pubs en la que se demostraba que la media de gasto de los clientes se hab¨ªa mantenido.
Igual cabe decir de EE UU, donde la guerra de informes, encuestas y estad¨ªsticas es total. No hay asociaci¨®n o patronal que no haya encargado y publicado sus propios informes, revelando en general ca¨ªdas dram¨¢ticas de actividad, que contrastan con los de las autoridades, que muestran lo contrario. Un estudio sobre el impacto de la prohibici¨®n en Nueva York, preparado por una consultora (REA), conclu¨ªa que la aprobaci¨®n de la ley (en 2003) provoc¨® la p¨¦rdida de 2.000 empleos. Claro que esto es apenas nada para una zona en la que viven casi 20 millones de personas. En Australia, un estudio de la patronal ClubsNSW se?ala que las ventas han bajado un 11% tras la aprobaci¨®n de las normas restrictivas. Sin embargo, otro estudio, ¨¦ste encargado por el Gobierno del Estado, conclu¨ªa incluso que la afluencia a bares y restaurantes hab¨ªa subido.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.