Pulso en la UE por la estrategia anticrisis

Apenas iniciada la vigencia del Tratado de Lisboa, con la entrada en funci¨®n de los nuevos cargos, ya ha empezado el pulso entre los federalistas que quieren m¨¢s Europa y los euroesc¨¦pticos para definir el modelo de crecimiento que debe adoptar la Uni¨®n para sacar la econom¨ªa europea del letargo. La toma de posiciones coincide con el inicio de la presidencia espa?ola. Con palabras muy parecidas, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, presidente de turno de la UE, Herman Van Rompuy, presidente permanente, y el l¨ªder de los liberales en el Parlamento Europeo, Guy Verhofstadt, han expresado la necesidad de m¨¢s poderes econ¨®micos para la Uni¨®n, con compromisos obligatorios y sanciones para los que no cumplan. Estas iniciativas ya han despertado la alarma en Alemania y Reino Unido, cuyas reticencias aumentar¨¢n si los conservadores llegan al poder esta primavera.

El ministro alem¨¢n de Econom¨ªa afirma que las sanciones no tienen sentido

La piedra de toque es la d¨¦bil recuperaci¨®n econ¨®mica en el horizonte, con un crecimiento previsto menor al 1% para este a?o y el fracaso de la llamada Agenda de Lisboa durante los ¨²ltimos 10 a?os. Esta estrategia, que persegu¨ªa el ambicioso objetivo de convertir la UE en la econom¨ªa m¨¢s din¨¢mica y competitiva del mundo en 2010, ha "fallado". ?sta es la palabra que emplea Verhofstadt en la carta que dirigi¨® al presidente de la Comisi¨®n, Jos¨¦ Manuel Dur?o Barroso, el viernes pasado, pidi¨¦ndole un cambio de rumbo. Barroso present¨® la estrategia UE-2020 el pasado noviembre con el mismo tono ret¨®rico que la anterior. Para el ex primer ministro belga, el fracaso se ha producido por "la falta de compromisos por parte de los Estados miembros y la ausencia de instrumentos obligatorios a nivel de la UE".

Para mejorar la competitividad y las condiciones de "los 80 millones de europeos que viven bajo el nivel de pobreza en la UE", el dirigente liberal belga considera que en la UE-2020, "la Comisi¨®n debe tener el poder de desempe?ar un papel m¨¢s central para dirigir la UE en el momento del crecimiento econ¨®mico". Verhofstadt considera que la ¨¦poca de las buenas palabras tiene que acabar y propone "un cambio radical en la metodolog¨ªa del trabajo". Plantea "nuevos fondos estructurales para los Estados que presenten planes cre¨ªbles y resultados", pero al mismo tiempo "sanciones financieras" a los Estados que no se gasten "correctamente el dinero europeo en los objetivos de la UE-2020".

La misiva del l¨ªder liberal belga fue enviada el mismo d¨ªa en que Zapatero y Van Rompuy propon¨ªan en Madrid un cambio en la gobernanza de la UE. El presidente del Gobierno espa?ol plante¨® la necesidad de "equipar a la nueva Comisi¨®n Europea con nuevos poderes, si Europa quiere competir y ser m¨¢s pr¨®spera". Zapatero apost¨® por "el Gobierno econ¨®mico de la UE" con m¨¢s coordinaci¨®n de las pol¨ªticas nacionales y sugiri¨® la posibilidad de aplicar medidas correctivas a los Estados que no cumplieran los objetivos econ¨®micos fijados.

Con un lenguaje m¨¢s diplom¨¢tico, el presidente permanente de la UE apuntaba en la misma direcci¨®n. "Necesitamos", dijo, "un modo de Gobierno m¨¢s estricto y un mejor control del proceso". Van Rompuy se reserva los detalles para el Consejo Europeo del 11 de febrero, cuando plantear¨¢ sus ideas para potenciar la recuperaci¨®n econ¨®mica y aumentar la competitividad. Tras el debate informal de febrero, los jefes de Estado debatir¨¢n el asunto de nuevo en marzo para alcanzar un acuerdo definitivo en junio.

El giro que quieren dar a la pol¨ªtica econ¨®mica europea Zapatero, Van Rompuy y Verhofstadt, apremiados por la creciente preocupaci¨®n de los ciudadanos, ya ha provocado las primeras reacciones. El ministro alem¨¢n de Econom¨ªa, Rainer Br¨¹derle, se manifest¨® el s¨¢bado en contra de dar poderes sancionadores al Ejecutivo comunitario en materia econ¨®mica. "La propuesta de sancionar a los pa¨ªses miembros si no cumplen con los objetivos no tiene sentido", se?al¨® Br¨¹derle en un comunicado. El ministro alem¨¢n segu¨ªa con la vieja idea de la Agenda de Lisboa, "basada en un enfoque cooperativo y sin sanciones y as¨ª deber¨ªa seguir siendo en el futuro". Sin embargo, respald¨® la propuesta de Zapatero "de coordinar de forma m¨¢s efectiva" la pol¨ªtica econ¨®mica.

Fuentes comunitarias indican, sin embargo, que donde se producir¨¢n las mayores reticencias ser¨¢ en el frente brit¨¢nico. La oposici¨®n frontal de Londres -sobre todo si el conservador David Cameron gana las pr¨®ximas elecciones- y de algunos pa¨ªses del norte de la UE a dar m¨¢s poderes a Bruselas est¨¢ asegurada.

Las cr¨ªticas que ahora empiezan a aflorar sobre los fallos de la Agenda de Lisboa van a palidecer cuando se conozcan los trabajos del grupo de reflexi¨®n que dirige el ex presidente Felipe Gonz¨¢lez, cuyas propuestas se presentar¨¢n en el Consejo de primavera.

Los ¨²ltimos comentarios de Gonz¨¢lez sobre la manera de funcionar de la UE han sido muy cr¨ªticos. La realidad es que los objetivos de la Agenda de Lisboa para 2010, marcados hace 10 a?os, no se han cumplido. En el caso de los recursos destinados a investigaci¨®n y desarrollo, incluso se ha perdido terreno. Se hab¨ªa previsto que el gasto en I+D alcanzase el 3% del PIB en 2010, sin embargo se mantiene anclado en el 1,8%, muy por debajo de Estados Unidos, Jap¨®n o Corea del Sur. S¨®lo Suecia y Finlandia superaron los objetivos europeos. Tampoco se ha logrado incluir al 70% de los europeos en el mercado de trabajo, un porcentaje que est¨¢ en el 65,5%, por no hablar del aumento del paro por encima del 10%.