S¨®lo nueve de los 48 aer¨®dromos espa?oles tienen beneficios

Tras tres a?os largos de espera, llegaron las cuentas de los aeropuertos al Congreso de los Diputados. "Gracias por el regalo de Reyes", ironiz¨® el portavoz de CiU, Pere Macias. Desde 2006 una resoluci¨®n parlamentaria obliga al Gobierno a presentar las cuentas individuales de cada aeropuerto, pero hasta ayer (justo al comienzo de la sesi¨®n de la Comisi¨®n de Fomento) no se hab¨ªan entregado. Y hubo sorpresa.

Siempre se hab¨ªa dicho que s¨®lo los grandes son rentables, pero con los datos conocidos ayer s¨®lo nueve tuvieron un resultado operativo positivo en 2009. Los mayores, Madrid y Barcelona, tuvieron n¨²meros rojos. Seg¨²n las cuentas provisionales, Alicante, Bilbao, Girona, Ibiza, Gran Canaria, M¨¢laga, Palma de Mallorca, Murcia-San Javier y Tenerife Sur acabaron el a?o con beneficios. Pero la propia Aena explica que algunos de ellos sufrir¨¢n impactos negativos el pr¨®ximo a?o cuando se le imputen las amortizaciones y los gastos financieros asociados a la deuda en que se ha incurrido para financiar las costosas inversiones realizadas en ellos.

Las apelaciones pol¨ªticas de que hab¨ªa que mantener la red para que los grandes subvencionasen el funcionamiento de los peque?os, cuyo beneficio social (por ejemplo en las islas) nunca ir¨ªa acompa?ado de un beneficio econ¨®mico, cay¨® por tierra y fue objeto de alguna que otra iron¨ªa por parte de los diputados.

Lo que no ha sido una sorpresa para los conocedores del sector de aeropuertos es que suelen ser muy rentables, aunque requieren una gran inversi¨®n de capital y por tanto generan mucha deuda. En terminos de Ebitda (beneficio antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones, que mide la capacidad de la actividad de generar beneficio), 20 aeropuertos de los 48 de Aena tienen cifras positivas (ver gr¨¢fico), y eso en un a?o p¨¦simo tanto para los ingresos puramente aeroportuarios como para los derivados de las tiendas y dem¨¢s.

El caso de Madrid es muy significativo. Barajas obtuvo un Ebitda de 138,94 millones, pero amortiz¨® inversiones por valor de 283,5 con unos gastos financieros de 156 millones. As¨ª que el resultado antes de impuestos es de 300 millones de p¨¦rdidas. El aeropuerto madrile?o tiene imputada una deuda de 6.097 millones de euros, equivalente a las inversiones realizadas en la ampliaci¨®n (dos nuevas pistas y la T-4).

Barcelona por su lado tiene una deuda de 1.813 millones (se han invertido unos 5.000 en los ¨²ltimos a?os, pero seg¨²n Aena buena parte se ha ido amortizando), que el a?o que viene se convertir¨¢n en 2.049 millones, al empezar a computar m¨¢s inversiones de la nueva terminal T-1.

Con ese escenario, el ministro de Fomento, Jos¨¦ Blanco, explic¨® que el aeropuerto de la capital catalana tendr¨¢ beneficio neto en 2018, si se reducen los costes de navegaci¨®n a¨¦rea. En caso contrario, las ganancias no llegar¨¢n hasta 2020. En el caso de Madrid, seg¨²n Blanco, el abaratamiento del control de tr¨¢fico a¨¦reo permitir¨ªa que Barajas entre en beneficios en 2022 en vez de 2025.

Tambi¨¦n se aportaron ayer las cifras globales de todos los aeropuertos de la red para 2009 (provisionales) que reflejan que en el a?o de la mayor ca¨ªda de la historia del tr¨¢fico a¨¦reo los ingresos ascendieron a 1.875 millones, de los que 559 corresponden a servicios comerciales y 1.272 a los aeroportuarios. Los gastos de personal sumaron 354,8 millones, y las amortizaciones, 670. El Ebitda ascendi¨® a 450 millones, pero el resultado operativo pas¨® a casi la misma cifra en p¨¦rdidas: 432 millones.

Los aeropuertos agotaron las casi cinco horas de la Comisi¨®n de Fomento, que dej¨® para otra ocasi¨®n las explicaciones de Blanco sobre la gesti¨®n de los transportes en el temporal. Pero el ministro aprovech¨® para anunciar que va a proponer que las compa?¨ªas est¨¦n obligadas a explicar por qu¨¦ cancelan un vuelo ya que, explic¨®, a veces lo hacen por motivos comerciales pero echan la culpa al mal tiempo y de rebote al gestor de la infraestructura.