Consejo de ministros a la intemperie

El Gobierno de Hait¨ª celebr¨® ayer consejo de ministros. A la intemperie, sobre un banco de cemento y algunas sillas de pl¨¢stico. Llorando sus propias p¨¦rdidas y las del pa¨ªs entero, los exhaustos y abrumados funcionarios se reunieron a las puertas de una comisar¨ªa, intentando organizar la respuesta a la cat¨¢strofe.

En realidad, quien dirige las operaciones de ayuda es la ONU, mientras el Ej¨¦rcito estadounidense ha asumido el control del tr¨¢fico a¨¦reo. Pero, de acuerdo con los usos de la diplomacia, los dirigentes haitianos son consultados y aprueban cada paso.

El primer ministro, Jean-Max Bellerive, presidi¨® el consejo de ministros. Anoche decret¨® el estado de emergencia, que suspende varias garant¨ªas constitucionales, y un periodo de duelo nacional de un mes. El presidente, Ren¨¦ Pr¨¦val, dio las gracias a su Gabinete mientras entraba en la comisar¨ªa de polic¨ªa, que se ha convertido en su casa y sede del Ejecutivo despu¨¦s de que el palacio presidencial se derrumbara. Los embajadores extranjeros y los jefes de la ONU y otros organismos internacionales se sumaron ayer a una reuni¨®n para intentar coordinar la avalancha de ayuda.

"Dicen que el Gobierno no se mueve con rapidez, pero hacemos lo que podemos", declar¨® la ministra de Informaci¨®n, Marie-Laurence Lassegue. "Todos los ministerios se han derrumbado. Todo en Hait¨ª est¨¢ destruido. No hay ni una sola persona en este pa¨ªs que no tenga un familiar o un amigo muerto. El ministro de Finanzas perdi¨® a sus dos hijas de 12 a?os. El ministro de Turismo, a sus padres...".

Los asesores entran y salen. Un experto explica que hay que restablecer el sistema bancario. El ministro de Educaci¨®n, Joel de Jean-Pierre, se pregunta c¨®mo los haitianos proseguir¨¢n sus estudios con la mitad de las escuelas del pa¨ªs y sus tres principales universidades destruidas.