El avi¨®n Barcelona-Madrid pierde 2 millones de viajeros

La ruta a¨¦rea que une Madrid y Barcelona era, al menos hasta el estallido de la crisis, el enlace con m¨¢s aviones diarios que exist¨ªa en el mundo entre dos aeropuertos (que no entre dos ciudades), el corredor natural de los negocios y bar¨®metro de la actividad econ¨®mica y comercial. Pero las compa?¨ªas a¨¦reas ya no se frotan tanto las manos con ella. Casi dos a?os de crisis se han dejado notar y a ella se le han sumado en paralelo casi dos a?os de tren de alta velocidad (AVE), que empez¨® a hincar el diente a esta golosa parte del negocio del transporte uniendo ambas capitales en febrero de 2008. En este tiempo las aerol¨ªneas han perdido casi dos millones de clientes, el 40% de los viajeros de esa ruta.

Si en 2007, cuando no hab¨ªa AVE ni crisis, 4,8 millones de personas volaron entre las dos primeras urbes espa?olas, el a?o pasado lo hicieron casi tres millones, seg¨²n los datos de AENA, el organismo que gestiona los aeropuertos. Si a los 2,9 millones de pasajeros registrados se a?aden los llamados "tr¨¢nsitos" -la gente que vuela a una u otra ciudad para enlazar con otro avi¨®n, sin salir del aeropuerto-, la cifra alcanza los 3,05 millones.

El avi¨®n, pues, ha perdido casi dos millones de pasajeros al a?o en esa ruta. El AVE Madrid-Barcelona lleg¨® en 2009 a casi 2,7 millones de pasajeros, que se a?aden a los dos millones que el tren alcanz¨® a lo largo de 2008 (la alta velocidad no comenz¨® a operar hasta el 21 de febrero de ese a?o, pero s¨ª lo hac¨ªan los trenes Alvia).

Y ahora, ?qu¨¦? "Creemos que el efecto del AVE ya ha culminado, nosotros tenemos previsto en principio mantener la ruta", explica un portavoz de Spanair, aerol¨ªnea que juega el partido del Madrid-Barcelona con 520.000 pasajeros en 2009, frente a los 781.887 de 2008. "Adem¨¢s del AVE y la competencia, hemos reducido tres frecuencias diarias de lunes a viernes, de 13 han pasado a 10", agrega la misma fuente.

Con las cifras de 2009, el AVE roza ya el 50% de la cuota de mercado, aunque bajando la lupa al mes de diciembre, con 233.565 en avi¨®n y 237.456 en AVE, se da una situaci¨®n de pr¨¢ctico empate. Si se a?aden los pasajeros de avi¨®n, los tr¨¢nsitos, sigue en situaci¨®n de leve ventaja el transporte a¨¦reo.

Iberia, la aerol¨ªnea que tradicionalmente ha dominado el mercado de este enlace con una apuesta comercial decidida como la del puente a¨¦reo (algo parecido a un metro que une constantemente Madrid y Barcelona sin necesidad de tener el billete cerrado), saca brillo a sus actuales cifras: a¨²n domina un 45% del mercado a¨¦reo (movi¨® a 1,4 millones de pasajeros de esta ruta) y el 25% de todo el corredor.

Vueling gana terreno

Se reparten el resto del mercado Air Europa y Vueling. Esta ¨²ltima aerol¨ªnea ha sido la m¨¢s beneficiada del a?o y ha dado un salto hacia adelante desde los 594.789 pasajeros que tuvo en 2008 a los 717.270 de 2009, en un mercado a¨¦reo que est¨¢ encogiendo. Como en el caso de Spanair, el presidente de la compa?¨ªa, Josep Piqu¨¦, tambi¨¦n considera que el AVE no da?ar¨¢ mucho m¨¢s a sus rivales del aire. El jueves pasado, en un acto en el C¨ªrculo de Econom¨ªa junto al presidente del gigante ferroviario franc¨¦s SNCF, Guillaume P¨¦py, se?al¨® que los billetes del tren "son caros" y celebr¨® que su compa?¨ªa est¨¦ "comiendo el queso" de esta ruta a otras compa?¨ªas del sector, aunque alert¨® de la posibilidad de que entre en este mercado un nuevo y feroz competidor.

Sin mencionarlo, se refer¨ªa a la l¨ªder del bajo coste en Europa, la irlandesa Ryanair, que ha realizado ya la prerreserva de espacios de aterrizaje y despegue (slots) para operar en Barcelona a partir de esta primavera. Sus competidoras temen que Ryanair lance una rompedora oferta para explotar este enlace.

El director de Renfe para Largo Recorrido y AVE, Abelardo Carillo, destaca que el tren "ha ganado mercado" pese a la existencia de competencia de las aerol¨ªneas de bajo coste, en alusi¨®n a Vueling. Adem¨¢s, ha anunciado la licitaci¨®n para la compra de 10 trenes de gran capacidad (con 500 plazas cada uno) para unir Espa?a y Francia, lo que ha considerado que ser¨¢ "una forma de abaratar los billetes".