La ciudad del futuro
IBM, Cisco, HP, el MIT y universidades de medio mundo planean otros modelos de urbe - La edificaci¨®n de Songdo, en Corea del Sur, y de Masdar City, en Abu Dabi, ejemplos inmediatos - Todas se piensan verticales y sostenibles
Si el cine, desde Metr¨®polis a Blade Runner, fue el primero en imaginar el futuro, los arquitectos, ingenieros e investigadores se han encargado de a?adir pragmatismo al asunto. Nadie lo duda, la tecnolog¨ªa estar¨¢ en el centro de las ciudades del ma?ana. Pero habr¨¢ que esperar 30, 50 o m¨¢s a?os para pilotar coches voladores, habitar edificios flotantes o ver a androides deambular por la calle.
Los ¨²ltimos proyectos para dise?ar la urbe del siglo XXII, a cargo de IBM, Cisco y el MIT, tienen m¨¢s de realismo que de ciencia ficci¨®n. La mayor¨ªa apunta a dos grandes objetivos: conseguir ciudades ecoeficientes en consumo de agua, electricidad y otros recursos, y dotar de inteligencia a todo lo que nos rodea (edificios, coches, objetos...).
IBM ya prueba en una docena de lugares, desde Nueva York a Hangzhou (China), estas ideas. En Malta, la compa?¨ªa dise?a una red inteligente de abastecimiento de agua y electricidad. Instalar¨¢n 250.000 lectores integrados con programas de an¨¢lisis en tiempo real para detectar y prevenir fugas de agua y energ¨ªa. Estar¨¢ listo en 2012 y convertir¨¢ al pa¨ªs en el primero con un sistema capaz de ahorrar y administrar recursos de forma automatizada.
"La clave est¨¢ en unir la infraestructura f¨ªsica a la tecnol¨®gica para obtener informaci¨®n en tiempo real y actuar sobre ella, anticiparse", explica Elisa Mart¨ªn Garijo, directora de innovaci¨®n de IBM Espa?a y una de las responsables de la iniciativa de Malta. La empresa est¨¢ aplicando el mismo concepto para prevenir cr¨ªmenes en Nueva York y reducir el tr¨¢fico en Estocolmo. Es el inicio de la urbe del futuro.
Menos delincuencia en NY
Incluso con 3.000 polic¨ªas menos, la tasa de crimen en Nueva York se ha reducido un 20% desde 2002. El motivo apunta a una mezcla de aplicaciones predictivas, sensores de vigilancia ubicuos y automatizaci¨®n. En poco tiempo, una c¨¢mara podr¨¢ captar una imagen sospechosa, un ordenador la analizar¨¢ y transmitir¨¢ la se?al con coordenadas de posicionamiento al tel¨¦fono inteligente del polic¨ªa m¨¢s cercano. Todo en segundos. La probabilidad de evitar un crimen o salvar una vida se multiplica. As¨ª funcionar¨¢n las ciudades del futuro.
Al menos ¨¦sta es la visi¨®n de IBM, una de las tecnol¨®gicas que compiten con HP, Cisco, Microsoft y centros como el MIT y decenas de universidades en dise?ar las nuevas urbes.
La ciudad del futuro ser¨¢ un floreciente negocio. Construir infraestructuras desde cero o dotar de inteligencia a las ya existentes mover¨¢, seg¨²n IDC, 122.000 millones de d¨®lares en los dos pr¨®ximos a?os.
"El gran cambio ser¨¢ la re-informaci¨®n, c¨®mo podemos introducir datos en cualquier elemento que hoy vemos en la calle, desde un contenedor a una fachada", asegura el arquitecto Vicente Guallart, director del Instituto de Arquitectura Avanzada de Catalu?a (IAAC). Es la llamada "Internet de las cosas", conectar m¨¢quinas entre s¨ª para que se comuniquen de forma aut¨®noma. Junto con HP, el IAAC organiz¨® recientemente un concurso mundial para dise?ar ciudades autosuficientes. Recibieron m¨¢s de 700 propuestas de 116 pa¨ªses.
El arquitecto ruso Victor Kirillow logr¨® una menci¨®n de honor por su concepto Sky City, una megaestructura vertical que alberga en su interior cientos de peque?as viviendas a las que se accede en veh¨ªculos voladores. "El crecimiento horizontal es ineficiente, por el ingente gasto de recursos. Algunos prototipos demuestran que la opci¨®n de crecer en vertical es posible", dice Guallart.
Uno de los dos proyectos ganadores, de los americanos Rychiee Espinosa y Seth McDowell, propone un modelo a¨²n m¨¢s arriesgado: crear espacios urbanos sobre el agua, utilizando ¨¦sta para generar energ¨ªa limpia con la que propulsar el transporte p¨²blico.
Los expertos sostienen que las casas solares y las poblaciones de emisiones cero ser¨¢n la norma dentro de unos a?os.
El proyecto de Masdar City es uno de los m¨¢s ambiciosos en este sentido. Una metr¨®poli de 600 hect¨¢reas en mitad del desierto, a menos de 20 kil¨®metros de Abu Dabi (Emiratos ?rabes Unidos), que albergar¨¢ a 50.000 habitantes, pero no tendr¨¢ ni un solo coche ni emitir¨¢ CO2. Toda la energ¨ªa consumida ser¨¢ renovable, solar o e¨®lica. "El transporte circular¨¢ mediante un sistema magn¨¦tico. Ser¨¢ un referente que demuestre la viabilidad de estas ciudades", dice Guallart. El proyecto estar¨¢ listo, aseguran, en 2016.
En Espa?a, M¨¢laga ser¨¢ el primer lugar donde se pruebe a gran escala la viabilidad de sistemas energ¨¦ticos inteligentes. Endesa, junto con empresas como IBM, Telvent y Neo Metrics, invertir¨¢ 31 millones de euros durante cuatro a?os en desplegar contadores inteligentes y sistemas de an¨¢lisis para reducir un 20% las emisiones de CO2.
Adem¨¢s de edificios ecol¨®gicos, sistemas inteligentes y espacios sostenibles, habr¨¢ nuevos habitantes: robots urbanos. La Universidad Polit¨¦cnica de Catalu?a (UPC) acaba de finalizar con ¨¦xito su participaci¨®n en el proyecto europeo Urus para crear una red de robots interconectados, totalmente aut¨®nomos, capaces de desempe?ar tareas sencillas, como limpieza de ¨¢reas p¨²blicas.
"Dentro de 10 a?os o menos veremos androides en sitios cerrados, como museos, para orientar a los visitantes. Habr¨¢ que esperar tal vez 50 a?os para verlos en plena calle, en zonas abiertas, haciendo de vigilantes o gu¨ªas tur¨ªsticos", se?ala Alberto Sanfeliu, profesor de Ciencia Computacional de la UPC.
Con un presupuesto de 2,6 millones de euros y participaci¨®n, entre otros, de la Universidad de Surrey (Reino Unido), la Universidad de Zaragoza y Telef¨®nica I+D, los investigadores han creado ochos robots, dos de ellos humanoides, capaces de deambular a su aire sin ninguna ayuda. "A medida que van caminando, construyen y almacenan los mapas de su entorno", explica Sanfeliu. "El mayor obst¨¢culo es cultural, de aceptaci¨®n por parte de las personas, y legislativo. Muchas capitales todav¨ªa no permiten el funcionamiento de m¨¢quinas aut¨®nomas".
El SENSEable City Lab del MIT ha desarrollado Aida, un busto rob¨®tico hablante adherido al salpicadero de los coches. En conexi¨®n con los sensores del autom¨®vil y los desplegados por el terreno, sabe d¨®nde estamos y qu¨¦ ruta seguimos, y es capaz de sugerir alternativas y lugares para visitar.
Sin gasolineras
La idea bebe del trabajo desarrollado por William J. Mitchell, uno de los visionarios m¨¢s prestigiosos en nuevos conceptos de movilidad en las urbes del ma?ana. Seg¨²n Mitchell y sus investigadores, dentro de unos a?os veremos en las ciudades estaciones de recarga auto-gestionadas con peque?as motos y coches el¨¦ctricos listos para conducir y ser aparcados en cualquier esquina, algo similar a los programas de alquiler de bicicletas.
"Estamos trabajando en bater¨ªas de litio para que estos coches puedan recorrer una distancia como de Santander a Madrid sin necesidad de repostar", dice Martin Garijo, de IBM. En la ciudad del futuro no hay gasolineras.
Songdo, la ciudad de 2015
Ocupa seis kil¨®metros cuadrados y ha sido construida desde cero ganando terreno al mar. Se llama Songdo International Business District y ser¨¢ la primera ciudad inteligente en Corea del Sur y una de las primeras del mundo.
As¨ª lo asegura Cisco, la compa?¨ªa tecnol¨®gica contratada por los promotores del proyecto para inundar cada edificio, objeto y esquina de sensores, fibra ¨®ptica y l¨ªneas de comunicaci¨®n. Una sala central de operaciones ser¨¢ el cerebro de una urbe por la que "correr¨¢ la informaci¨®n", dice la compa?¨ªa.
Se trata de una "ciudad ubicua", donde todos los sistemas tecnol¨®gicos de tr¨¢fico, edificios, hospitales... estar¨¢n conectados entre s¨ª. Situada a las afueras de Incheon, a 60 kil¨®metros al oeste de Se¨²l, Songdo ser¨¢ oficialmente una realidad en 2015. Tendr¨¢ rascacielos inteligentes, viviendas ecol¨®gicas y un enorme parque inspirado en el Central Park de Manhattan. El 40% de los edificios ser¨¢n certificados como verdes. La ciudad emitir¨¢ un tercio menos de CO2 en comparaci¨®n con otras grandes localidades.
Frente al modelo de IBM, de dotar de inteligencia a las infraestructuras ya existentes, Cisco apuesta por construirlas de cero.
La compa?¨ªa piensa replicar la experiencia de Songdo para ayudar a construir 20 nuevas metr¨®polis del futuro, muchas en pa¨ªses emergentes. Quiz¨¢ el mundo so?ado en Blade Runner, en lugar de en el futurista Los ?ngeles, lo veremos alg¨²n d¨ªa en un punto perdido de Asia.
Farolas que alumbran seg¨²n la gente
En una smart city, hasta las farolas de la calle ser¨¢n inteligentes. Es la hip¨®tesis con la que juegan Endesa y un consorcio de 12 empresas y varios organismos, entre ellos la Universidad Polit¨¦cnica de Catalu?a (UPC), que trabajan en conseguir una red de alumbrado aut¨®noma, ecoeficiente y capaz de informar de su entorno.
Adem¨¢s de autorregular el encendido y la intensidad de la luz en funci¨®n de la hora del d¨ªa o el n¨²mero de peatones -lo que reduce el gasto energ¨¦tico-, las farolas informar¨¢n de la humedad, temperatura y contaminaci¨®n exterior, e incluso del ruido y las vibraciones.
El proyecto Siiur est¨¢ en prueba desde octubre en el distrito 22@ de Barcelona. De momento, se han desplegado 12 farolas interconectadas mediante sensores. ?stas se comunican con un armario a pie de calle que, a trav¨¦s de Internet, env¨ªa se?ales a la estaci¨®n central. "El objetivo es integrar infraestructuras urbanas, tecnolog¨ªas y telecomunicaciones para crear un smart grid", dice Pedro D¨ªaz, directivo de Endesa.
Dentro de unos a?os, cualquier objeto equipado con un sensor (contenedores, veh¨ªculos, edificios...) podr¨¢ conectarse a este tipo de redes y enviar informaci¨®n al instante. La ciudad en tiempo real.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.