Un 81% de los j¨®venes es partidario de salir toda la noche los fines de semana

Una parte de los j¨®venes madrile?os necesita desmadrarse y le compensa los riesgos: intoxicaciones et¨ªlicas, accidentes de tr¨¢fico, enfermedades sexuales o embarazos; todo sea por obtener un momento de goce durante la semana. De los 1.200 j¨®venes encuestados por la Fundaci¨®n de Ayuda contra la Drogadicci¨®n (FAD), un 81% es partidario de salir toda la noche, un 60% de pasarse de copas y un 35% est¨¢ dispuesto a no usar preservativo. Dedican a la marcha la mayor parte del tiempo libre.

El estudio, Ocio (y riesgos) de los j¨®venes madrile?os, encargado por la Obra Social de Caja Madrid y en el que ha colaborado el Instituto de Adicciones del Ayuntamiento de Madrid, es un intento de calibrar los peligros a los que se exponen los j¨®venes en el ocio nocturno y la conciencia que tienen de ellos. Ofrece una s¨ªntesis de conjunto de las respuestas de los j¨®venes encuestados, entre 16 y 24 a?os. No desglosa por completo los resultados por edades ni por sexo.

Casi la mitad de los encuestados fue en coche con un conductor bebido

"Nosotros pensamos que [salir de noche] es una forma de evadirnos", se lee en un extracto del informe sacado de conversaciones con j¨®venes. "Tienes toda la semana clase y lo que apetece es pillarse un puntillo, emborracharse". "Es una rutina", sentencia otra voz. Casi el 70% de los encuestados se emborrach¨® al menos una vez en 2009. Un 45% fue en coche con un conductor bebido o drogado. Un 31% se pele¨®. Y un 26% no us¨® preservativo en relaciones con chicos o chicas que no eran su pareja.

Eusebio Mej¨ªas, psiquiatra y jefe de investigaci¨®n de la FAD, juzg¨® ayer en la presentaci¨®n del estudio que el equilibrio entre la prudencia y el sentido del riesgo se rompe en medio de la juerga: "La ambig¨¹edad entre prudencia y aventura se resuelve en las circunstancias concretas de la noche, y es de suponer que los chicos se decantan por el riesgo".

La conciencia de lo que puede ocurrir no parece muy definida en la mente de los j¨®venes. Un 56% deja clara su falta miedo ante estas pr¨¢cticas: "No importa arriesgarse; al final, no pasa nada". Otro 28%, en este caso varones, sostiene que los peligros de las relaciones sexuales "son s¨®lo para las chicas" (el documento facilitado ayer omite el dato femenino). Un 34% de los encuestados (hombres y mujeres) rechaza el uso del preservativo porque le "corta el rollo".

El estudio analiza la idea que tienen los padres del ocio de sus hijos, extra¨ªda de las opiniones vertidas en 11 grupos de discusi¨®n. La mayor¨ªa se alarma por lo que sucede en las noches de fiesta juvenil, pero se resigna a aceptar las consecuencias de la independencia de sus hijos.

Los j¨®venes madrile?os distinguen entre el ocio, ligado al placer nocturno, y el tiempo libre, que identifican con "actividades" con las que se debe cumplir, responsabilidades. Ah¨ª encuadran la lectura (un 22% lee con frecuencia), viajar (un 16% lo hace a menudo) o visitar museos (un 6,8% los visita).

"Es el resultado de una sociedad de bienestar en la que falta autonom¨ªa y hay una necesidad acuciante de agarrarse al presente. Se busca la fractura con la vida cotidiana, algo que permita a los chicos cubrir sus expectativas sociales. Todo por no quedar fuera del grupo y convertirse en un friki", asegura Mej¨ªas.