"Los pa¨ªses ricos acapararon las vacunas del H1N1"

Para definir la vocaci¨®n por la medicina de Jos¨¦ ?ngel C¨®rdova, ministro de Salud de M¨¦xico, basta decir que, tres a?os despu¨¦s de ser nombrado, mantiene su consulta. "Atiendo a mis pacientes los s¨¢bados. Es importante para mantenerme con los pies en el piso", dice. C¨®rdova, de 56 a?os, ya era el m¨¢ximo responsable de sanidad de su pa¨ªs cuando, en abril de 2009, se detect¨® el virus H1N1.

Pregunta. ?C¨®mo est¨¢ la gripe en M¨¦xico?

Respuesta. Est¨¢ bastante estable desde la segunda quincena de diciembre. Pero hemos tenido todav¨ªa defunciones que lamentar. Estaba todo preparado para tener un repunte en invierno, que por fortuna no se ha dado. Esperamos levantar la alerta en mes y medio.

"Vacunamos en los pueblos, en el metro, en centros comerciales"

"Las cr¨ªticas retrospectivas son absurdas, es muy f¨¢cil hablar ahora"

P. ?No le parece que se sobreactu¨® ante la pandemia?

R. Las cr¨ªticas retrospectivas me parecen absurdas. Lo dif¨ªcil era vivirlo en el momento en que se inician los problemas. Est¨¢bamos esperando una pandemia por el H5N1, que tiene una letalidad del 60%, y al ser este virus de origen animal y tener un potencial pand¨¦mico, ten¨ªamos que actuar igual. Lo que se hizo sirvi¨® para contener la gran cantidad de casos que pudiera haber habido, y las muertes. Lo que permite prevenir muertes est¨¢ siempre bien hecho. En retrospectiva, es muy f¨¢cil decir que no se debiera haber hecho algo.

P. ?No exager¨® al pedir a la poblaci¨®n de M¨¦xico DF que no saliera de casa o al cerrar los colegios?

R. No. El temor es que hubiera sido una pandemia devastadora. El virus ten¨ªa el mismo potencial pat¨®geno que el que vivimos en 1918, donde en M¨¦xico hubo medio mill¨®n de muertos, y no pod¨ªamos esperar a ver c¨®mo lo soportaba la poblaci¨®n y atascar los hospitales. Al contenerse la pandemia con esas medidas tan estrictas, nos dio un respiro muy r¨¢pido. Y en dos o tres semanas hab¨ªamos contenido el crecimiento. La respuesta fue la correcta. Aunque la enfermedad haya sido leve, la respuesta ten¨ªa que haber sido igual.

P. Ustedes pasaron el primer pico de gripe sin vacunas. ?C¨®mo est¨¢n ahora?

R. El 15 de enero el presidente Calder¨®n dio el arranque para la vacunaci¨®n de todas las personas con factores de riesgo, unos 30 millones. ?l mismo se vacun¨® con su esposa.

P. ?Por qu¨¦ tan tarde?

R. Porque no ten¨ªamos vacunas. Los pa¨ªses ricos se apoderaron de todas. Cuando las solicitamos, las empresas nos dijeron: "Pues s¨ª, pero est¨¢n en segunda l¨ªnea. Primero van Estados Unidos, Canad¨¢, Reino Unido, Francia, Espa?a, y ustedes van despu¨¦s". Afortunadamente, como all¨ª estaban siendo infrautilizadas, algunos pa¨ªses, como Canad¨¢, nos van a prestar cinco millones de dosis, que vamos a devolver en marzo.

P. ?Y no hay rechazo a vacunarse como en Europa?

R. Se gener¨® algo por el estilo a trav¨¦s de Internet, que hemos podido contrarrestar bien. Hicimos una encuesta que dijo que el 86% de las personas ten¨ªa confianza en la vacuna. Lo que ha sido muy ¨²til ha sido acercarle la vacuna a las personas. Como ya no lo ven como una enfermedad tan grave, no quer¨ªan perder el tiempo en ir a vacunarse. Estamos yendo a las comunidades, estamos vacunando en el metro, en los centros comerciales, y estamos teniendo muy buena respuesta. Hay filas de gente que se quiere vacunar. En tres semanas hemos puesto tres millones de vacunas. La semana pasada hicimos la campa?a para vacunar a las cuidadoras de las guarder¨ªas y a los ni?os de las guarder¨ªas, y la semana antepasada lo hicimos para los grupos vulnerables y los ind¨ªgenas.

P. ?No ha habido problemas con los sanadores tradicionales?

R. Precisamente en Oaxaca hicimos un evento, y fueron los presidentes de los pueblos ind¨ªgenas. Como yo empec¨¦ a vacunar, el l¨ªder pidi¨® que le vacunara. Cuando ¨¦l lo hizo, se vacun¨® todo el pueblo. Eso gener¨® una confianza en la ciudadan¨ªa impresionante. Es una cuesti¨®n de estrategia.

P. ?Cu¨¢nto va a costar la vacunaci¨®n? ?Compensa?

R. Los 30 millones de vacunas nos representaron 135 millones de euros. Tenemos una unidad de an¨¢lisis econ¨®mico que calcula el coste-beneficio. Por eso no se vacunaron todos, s¨®lamente a los diab¨¦ticos, a los obesos, que son los que se mueren, los que se hospitalizan, y eso sale muy caro. Haci¨¦ndolo as¨ª, s¨ª era costo-ben¨¦fico. Hacerlo con los 106 millones de habitantes no lo ser¨ªa.