El boliviano que perdi¨® el brazo vive con una pensi¨®n de 1.052 euros

De vez en cuando, Franns Melgar se cruza por Gandia (Valencia) con los due?os de la panader¨ªa donde una amasadora le seccion¨® el brazo izquierdo en mayo del a?o pasado. Los mismos que, como desvel¨® una inspecci¨®n, manten¨ªan la empresa en unas paup¨¦rrimas condiciones higi¨¦nicas y de seguridad. A los que acus¨® de abandonarle a su suerte tras el accidente por tenerle trabajando sin contrato. Y que tiraron a la basura el miembro amputado. "No me miran", comenta, "dirigen la cabeza hacia el suelo. Y yo tambi¨¦n, no quiero problemas", comenta este inmigrante boliviano de 33 a?os.

Desde octubre cobra una pensi¨®n de 1.052 euros, con la que paga el alquiler y los meses que a¨²n debe, de cuando estaba convaleciente y sin ingresos. "A¨²n me duele el brazo amputado, sobre todo los d¨ªas m¨¢s fr¨ªos; me han aumentado los calmantes. Adem¨¢s, tengo el az¨²car disparado", apunta. Mientras espera la sentencia del juicio contra sus jefes, su mayor preocupaci¨®n son los papeles de su mujer. "Estuvo cuidando a tres ni?os, luego a la abuela de la familia y ahora no le dan un contrato", relata.