Civilizado y perfectamente prescindible

Seamos positivos: como m¨ªnimo nos ahorramos el aplaus¨®metro. La contenci¨®n y la austeridad catalanas siempre quedan elegantes y el debate de ayer en el Parlament fue de guante blanco. Alg¨²n pellizquito para insistir poco despu¨¦s, literalmente, en el mucho respeto que sienten los unos por los otros. ?Bien! Se atuvieron al manual de urbanidad y nos ahorramos el griter¨ªo y la bilis que corre por el Congreso de los Diputados, pero la larga sesi¨®n roz¨® la irrelevancia.

El presidente Montilla repiti¨® el mantra de los pactos y CiU respondi¨® que no con una gran sonrisa, que recuerda el buen rollito de su cartel electoral. Unas posiciones comprensibles pocos meses antes de las elecciones, pero que abonan la sensaci¨®n ciudadana de la poca utilidad de la pol¨ªtica y ampl¨ªan la distancia.

El d¨¦ficit es una consecuencia de la crisis y no la causa, y es imposible ofrecer m¨¢s servicios con menos impuestos

Medidas concretas hubo pocas. El presidente de la Generalitat anunci¨® una cumbre, un espacio de concertaci¨®n entre partidos y agentes sociales para "pensar, decidir y poner en pr¨¢ctica en Catalu?a" pol¨ªticas que posteriormente pueden ser trasladadas a Espa?a. A estas alturas de la crisis, el diagn¨®stico est¨¢ hecho y deber¨ªan estar tambi¨¦n claras las medidas posibles para combatir la situaci¨®n. Entre los consensos, que Catalu?a ejerza el "liderazgo natural" que le corresponde como motor econ¨®mico. ?Olvida el PSC que el ministro de Trabajo es un miembro de su partido?

El presidente anunci¨® tambi¨¦n una loable simplificaci¨®n y racionalizaci¨®n del sector p¨²blico, para lo que se consultar¨¢ a organismos independientes. Otro diagn¨®stico que no necesita an¨¢lisis externos a la propia Administraci¨®n, sino valent¨ªa. La debilidad de la propuesta es que los objetivos de austeridad pierden credibilidad con la pr¨¢ctica de algunos departamentos. Especialmente el de la Vicepresidencia, que con menos viajes vac¨ªos de contenido, ejerciendo la transparencia y publicando la memoria de sus actividades, sin familiares en puestos golosos y sin helic¨®pteros, dar¨ªa credibilidad al Gobierno en su conjunto y a aquellos departamentos que trabajan con seriedad.

Solo la estricta racionalizaci¨®n del gasto p¨²blico puede conseguir el apoyo de los ciudadanos, que cada vez ser¨¢n m¨¢s exigentes con el destino de sus impuestos.

Los tiempos electorales acostumbran a ser poco sinceros con los ciudadanos. Mientras algunos defend¨ªan el cat¨¢logo de prestaciones p¨²blicas, Joan Puigcerc¨®s como m¨ªnimo llamaba a la responsabilidad individual.

Puigcerc¨®s no disimul¨® el malestar con el papel potencial de CiU en Madrid y acus¨® a Duran Lleida de merdejar en el Congreso, para insinuar tambi¨¦n que algunos partidos son sensibles a las demandas de los grupos de presi¨®n. Grupos m¨¢s presionables que benefician a las grandes superficies y las constructoras.

En el Parlament, en parte se hizo lo que se pudo. Los instrumentos para salir de esta crisis no le pertenecen. Se pod¨ªa, eso s¨ª, hablar con claridad a los ciudadanos, lo que se hizo s¨®lo en parte. Montilla defendi¨® que el "d¨¦ficit es una consecuencia de la crisis y no la causa", y se?al¨® con el ¨ªndice a CiU recordando que es imposible vender menos impuestos y m¨¢s servicios. El aumento de impuestos llegar¨¢ demasiado pronto, pero ?alguien se atreve a imaginar qu¨¦ hubiera pasado en los mercados si Elena Salgado no se hubiera avanzado a su nerviosismo y sus exigencias anunciando una subida de impuestos para reducir el d¨¦ficit p¨²blico y recuperar la disciplina?

Sergio Arzeni, director del centro para la actividad emprendedora, peque?as y medianas empresas, y desarrollo local de la OCDE, se?alaba el lunes en la cumbre de gobiernos locales de la Uni¨®n Europea, en Barcelona, que "los pa¨ªses m¨¢s igualitarios son los que pagan m¨¢s impuestos". A?ad¨ªa que lo que debemos decidir es si "la cohesi¨®n social es un valor o no lo es".

Un pa¨ªs no se convierte en Finlandia en una semana. La competitividad es un tema a medio y largo plazo. Depende b¨¢sicamente de la educaci¨®n y la iniciativa empresarial, de la capacidad de innovar y de emprender proyectos, y de la cohesi¨®n social. Ayer, en el Parlament s¨®lo se surfe¨® la ola.