"La cabeza no debe estar llena, sino bien amueblada"

Dan las dos y cuarto cuando la primera candidata a rectora de la Universitat de Val¨¨ncia, fundada hace 510 a?os, en tiempos del papa valenciano Alejandro VI (de la saga de los Borja) y de Fernando el Cat¨®lico, llega al claustro de La Nau, la sede hist¨®rica de la instituci¨®n, en el coraz¨®n de la ciudad. Mar¨ªa Antonia Garc¨ªa Benau, catedr¨¢tica de Econom¨ªa Financiera y Contabilidad, se presenta un poco tarde en el sal¨®n privado preparado para el almuerzo. Una estancia de madera, poco iluminada y llena de libros que recuerda al Nombre de la rosa. Ah¨ª fuera ha empezado a crecer el esp¨ªritu fallero (ya hay mascletades), y el tr¨¢fico en el centro se ir¨¢ complicando hasta que el 19 de marzo sea casi imposible sortear la marea de personas.

Es la primera candidata a rectora en una universidad que tiene 510 a?os

Ya en la mesa, Garc¨ªa Benau atacar¨¢ las almendras y se comer¨¢ el pan antes de que le pongan delante el plato de crema de tomate con verduras al wok. Se la ve feliz y cansada. "Cuando llegu¨¦ a casa anoche ten¨ªa 800 correos electr¨®nicos, la mayor¨ªa de felicitaci¨®n, y los contest¨¦ todos", cuenta.

La profesora disputar¨¢ el martes el rectorado al catedr¨¢tico de Medicina Esteban Morcillo despu¨¦s de superar contra pron¨®stico la primera vuelta, a la que se presentaban otros dos candidatos varones. Para entender la expectaci¨®n que despierta la elecci¨®n universitaria (Garc¨ªa Benau explica que esta ma?ana la han reconocido en el banco) hace falta saber que, adem¨¢s de tener casi 60.000 miembros y un presupuesto de 370 millones de euros, la instituci¨®n ha devenido en un s¨ªmbolo m¨¢s bien involuntario. Un reducto de la izquierda vapuleada y el valencianismo, esforzado en defender durante 30 a?os ciertos valores, como la unidad del catal¨¢n, lo que le ha costado decenas de pleitos judiciales (que ha ganado) contra el Gobierno de la Generalitat valenciana.

Garc¨ªa Benau ha llegado a la segunda vuelta porque, sin renegar de lo anterior, supo ver los cambios de fondo que ha vivido la instituci¨®n. Y porque logr¨® arrastrar a los estudiantes con una campa?a fresca y un uso intensivo de las redes sociales. La catedr¨¢tica termin¨® la carrera en 1979. "Entonces la universidad era muy diferente. Hace 25 a?os ten¨ªas que tener la cabeza muy llena y hoy tienes que tenerla bien amueblada para acudir a los sitios donde est¨¢ la informaci¨®n. La universidad debe abrir puertas y ense?ar a manejarse en todas ellas. Y si te hace falta saber m¨¢s, haces clic y lo tienes".

La puerta se abre, llega el bacalao -"excelente", dir¨¢-, y Garc¨ªa Benau pide m¨¢s pan ("en otra vida deb¨ª ser hornera"). La profesora siempre ha estado cerca de los alumnos. Era vicedecana de estudiantes cuando arranc¨® la beca Erasmus y el programa parec¨ªa raro. "El primer a?o se fueron cuatro y yo les llamaba continuamente a ver c¨®mo estaban". Ahora, con m¨¢s perspectiva, afirma: "A los estudiantes hay que ayudarles, pero no cuidarlos de forma paternalista. Yo creo en un estudiante adulto, cr¨ªtico y que toma decisiones".

"A m¨ª me han mirado con lupa para llegar aqu¨ª y al resto de candidatos, no", dice frente al caf¨¦. "Soy de una generaci¨®n en la que eso ha formado parte continuamente de mi vida. A las mujeres que ahora estudian no les pasar¨¢. Dentro de 10 a?os una candidata a rectora no ser¨¢ noticia".