Weili Dai: "Pronto veremos 'smartphones' de bajo coste"

Hace un par de a?os s¨®lo un pu?ado de tecn¨®filos sab¨ªan qu¨¦ era un gigahercio (GHz). Al resto de los mortales les daba igual. Hoy no hay duda: si un m¨®vil de gama alta utiliza un chip inferior a un GHz, hasta un adolescente pone mala cara. As¨ª de r¨¢pido cambia el sector.

"Ahora todos nos preocupamos por el procesador, queremos acceso instant¨¢neo a noticias, v¨ªdeo, pel¨ªculas... y con alta calidad de imagen. Por eso los chips deben ser muy r¨¢pidos", explica Weili Dai, cofundadora de Marvell, fabricante norteamericano que intenta subirse a la ola del always on, el consumidor permanentemente conectado.

A sus 48 a?os, Dai es la ¨²nica mujer directiva en su sector y tal vez una de las m¨¢s cautas en Silicon Valley. Esquiva de puntillas muchos asuntos, prefiere no hacer ruido ni desvelar grandes secretos. Una filosof¨ªa con la que, de momento, ha dado en el clavo.

Con sede en Santa Clara (California), Marvell ha pasado de start-up a gigante con 4.700 empleados en poco m¨¢s de una d¨¦cada. Sus procesadores alimentan m¨®viles (iPhone 3G y BlackBerry Bold 9700), lectores electr¨®nicos (Plastic Logic), televisores y port¨¢tiles. En el a?o 2009, produjo m¨¢s de 1.000 millones de chips en factor¨ªas de Asia. Y rivales como Qualcomm, Texas Instruments e Intel empiezan a mirarles de reojo, inquietos al descubrir a un extra?o en su jard¨ªn.

"Una buena plataforma m¨®vil debe soportar un procesador de aplicaciones muy r¨¢pido -un GHz es la base-, v¨ªdeo en alta definici¨®n y gr¨¢ficos 3D. Todo en uno", asegura. Ah¨ª es donde Marvell apuesta por diferenciarse: integrar cuantas m¨¢s funciones mejor en un solo chip. S¨®lo as¨ª es posible liberar espacio para el dise?o, consumir menos bater¨ªa y reducir el coste final.

De momento, el precio de los m¨®viles inteligentes no baja de 400 euros; pero la compa?¨ªa trasladar¨¢ esta idea de integraci¨®n a celulares baratos repletos de funcionalidades. "Dentro de unos meses veremos smartphones de bajo coste, ya estamos colaborando con varios fabricantes de terminales. Y no ser¨¢n s¨®lo para pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo, sino para todo el mundo", promete Dai. El precio rondar¨¢ los 99 d¨®lares (unos 73 euros).

Modelos baratos en China

Marvell no estar¨¢ sola. Mediatek, proveedor taiwan¨¦s de procesadores, trabaja en dise?ar modelos baratos para el mercado chino con los sistemas operativos de Google y Microsoft. Qualcomm empuja su plataforma Brew de bajo coste y procesadores de 300 MHz. Y las operadoras tambi¨¦n se unen: Vodafone comercializar¨¢ celulares entre 10 y 15 euros en ?frica, semiinteligentes. "Sin competencia no hay innovaci¨®n", sonr¨ªe Dai.

Ella conoce muy bien las dificultades de lanzar un producto en pa¨ªses en desarrollo. Marvell es uno de los proveedores de componentes del One Laptop per Child (OLPC) de Nicholas Negroponte. Y relativiza sobre el ¨¦xito o fracaso del proyecto. "No se puede medir en t¨¦rminos convencionales. El concepto actual de e-reader y el netbook se origin¨® a ra¨ªz del OLPC. Y la pasi¨®n de Negroponte por ayudar a los ni?os justifica el esfuerzo. Ha sido una gran aportaci¨®n".

Cuando se le pregunta por la convergencia entre smartphones, tabletas, lectores electr¨®nicos y netbooks, duda. "Cada uno tiene su prop¨®sito. El e-reader es la apuesta por un mundo sin papel, y los tablets se centran en v¨ªdeo, color, navegaci¨®n... al final, el coste decidir¨¢ qui¨¦n triunfa". De ah¨ª la importancia del procesador. "Cuanto m¨¢s peque?o sea y menor bater¨ªa consuma, m¨¢s barato ser¨¢ el equipo".

Adem¨¢s de en movilidad, Dai conf¨ªa en hacerse un hueco en la pr¨®xima generaci¨®n de televisores conectados a Internet con capacidad de almacenamiento. "Imagina alternar en tiempo real y en la misma pantalla v¨ªdeo en alta definici¨®n, gr¨¢ficos en 3D y navegaci¨®n por la Red a gran velocidad, todo desde el sof¨¢. Eso s¨®lo es posible si tienes componentes muy avanzados", explica. Toshiba y Samsung, dos de sus grandes clientes, comenzar¨¢n a experimentar con ello este a?o.

Dai no se atreve a dar datos sobre sus planes en China. Hasta ahora, la compa?¨ªa ha conseguido incluir sus procesadores en los primeros m¨®viles basados en Android lanzados por China Mobile, el mayor operador del mundo, con 500 millones de suscriptores. "Es un contrato importante", reconoce. Aunque surge una duda. ?Podr¨ªa la tensi¨®n entre Google y China afectar al negocio de Marvell? Al escuchar la pregunta, Dai abren los ojos como platos, agita nerviosa las manos y, antes de desaparecer, se despide con una sonrisa: "Lo siento, de pol¨ªtica tampoco hablo".