El term¨®metro es el empleo

Desde el 4 de septiembre del a?o pasado, el presidente nacional del PP, Mariano Rajoy, no visitaba Valencia. Harto de los esc¨¢ndalos del caso G¨¹rtel que han salpicado a los populares valencianos, Rajoy ha preferido transitar por otros territorios donde las aguas bajaban m¨¢s pl¨¢cidas para sus aspiraciones pol¨ªticas, como Andaluc¨ªa, Castilla-La Mancha o Galicia.

Hoy Rajoy tiene previsto clausurar la convenci¨®n sobre empleo organizada por los populares valencianos en Feria Valencia y zambullirse en las Fallas. Sin embargo, la que durante a?os ha sido la regi¨®n mod¨¦lica de Rajoy, ahora dista mucho de serlo. Tanto, que el discurso del PP nacional colisiona con la gesti¨®n del gobierno que preside Francisco Camps en la Comunidad Valenciana. Si "el term¨®metro es el empleo" -como afirm¨® el propio Rajoy ante la Junta Directiva Nacional del PP el pasado mes enero para referirse a la situaci¨®n econ¨®mica de Espa?a- la Comunidad Valenciana tiene algo m¨¢s que unas d¨¦cimas de fiebre.

A continuaci¨®n se detallan algunas de las claves para entender el problema del paro en la Comunidad Valenciana.

- El objetivo se aleja. El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, prometi¨® en 2007, en su ¨²ltimo programa electoral, que alcanzar¨ªa el "pleno empleo en 2010" y asumi¨® el compromiso de alcanzar una tasa global de ocupaci¨®n del 70%. Camps entonces se cre¨ªa capacitado para alcanzar al final de la legislatura 2,5 millones de ocupados y crear 300.000 nuevos puestos de trabajo. La realidad es que la situaci¨®n de la Comunidad Valenciana es peor que la del conjunto de Espa?a. Con 576.000 valencianos desocupados, la tasa de paro es casi cuatro puntos superior a la espa?ola; 2009 se cerr¨® con 1,98 millones de ocupados y la tasa global de empleo est¨¢ en el 61%.

- Amplias competencias. El Gobierno valenciano asumi¨® hace 10 a?os la pr¨¢ctica totalidad de las competencias en pol¨ªticas activas de empleo. A trav¨¦s del Servicio Valenciano de Empleo (Servef), que sustituy¨® al Inem en la Comunidad Valenciana, el Consell desarrolla las pol¨ªticas de intermediaci¨®n en el mercado de trabajo, de orientaci¨®n laboral, formaci¨®n profesional ocupacional y continua y fomento del empleo. El vicepresidente y consejero de Econom¨ªa, Gerardo Camps, asegura que las pol¨ªticas de la Generalitat funcionan correctamente y s¨®lo se trata de intensificarlas. Cuando se le interpela por la gravedad de la situaci¨®n, Camps se queja de que el Gobierno central no impulsa la reforma legislativa necesaria para abaratar y fomentar la contrataci¨®n. El consejero ha prometido que a finales de a?o la tasa de paro de la Comunidad Valenciana ser¨¢ inferior a la espa?ola.

- El paro iguala g¨¦neros. La magnitud de la crisis, que se ha ha cebado especialmente con la industria y la construcci¨®n, ha hecho que en la Comunidad Valenciana la tasa de paro afecte casi por igual a hombres y mujeres. En el primer trimestre de 2008, cuando se empezaron a notar los efectos de la crisis econ¨®mica, la tasa de paro masculino era del 8,1% y la femenina era de 11,7%. La situaci¨®n se invirti¨® en el tercer trimestre del a?o pasado. El ejercicio de 2009 acab¨® en la Comunidad Valenciana con una tasa de paro masculina del 23,2% y una femenina del 21,7%. En Espa?a las tasas son del 18,6 en los hombres y del 19% en las mujeres. Tras el desplome de los sectores industriales valencianos, la destrucci¨®n de ocupaci¨®n en el sector servicios amenaza con volver a situar a las mujeres por delante.

- Pinchazo juvenil. Entre 2004 y 2009 el 60,8% de los j¨®venes de 16 a 30 a?os que lleg¨® al mercado laboral hab¨ªa abandonado los estudios en Primaria, seg¨²n un estudio del Instituto Valenciano de Investigaciones Econ¨®micas. En las ¨²ltimas elecciones auton¨®micas el PP prometi¨® destinar esta legislatura m¨¢s de 50 millones de euros para apoyar la primera contrataci¨®n de 10.000 j¨®venes sin experiencia laboral y puso en marcha el programa beca salario para j¨®venes de 16 a 20 a?os que ten¨ªa que beneficiar a otros 10.000 j¨®venes y estar dotado con 12 millones de euros. Las medidas han dado un magro resultado. El a?o pasado termin¨® con una tasa de paro de casi el 60% entre los menores de 20 a?os. El porcentaje era casi la mitad en los menores de 25 a?os (34%) y del 20% en los adultos que superaban el cuarto de siglo.

- Desplome industrial. Aunque la econom¨ªa valenciana ha ralentizado su ca¨ªda, los indicadores muestran que sectores industriales como azulejo, cuero y calzado, madera, textil y confecci¨®n, as¨ª como la construcci¨®n residencial y el comercio, todav¨ªa no remontan. Lo constata el ¨²ltimo informe de coyuntura de la Confederaci¨®n Empresarial Valenciana (CEV) de este mes de marzo. Esta patronal se remite a otros informes econ¨®micos en los que se indica que no se prev¨¦ que la econom¨ªa valenciana "salga de la recesi¨®n durante el 2010". "La falta de impulso en la actividad econ¨®mica impedir¨¢ la creaci¨®n neta de empleo durante este a?o", sentencia este informe de la patronal. El a?o pasado, el sector industrial lleg¨® a perder un 20,7 de los empleos que hab¨ªa en 2008. En la construcci¨®n la p¨¦rdida de empleos fue del 17,6%. Esta situaci¨®n explica tambi¨¦n por qu¨¦ la provincia de Castell¨®n (muy dependiente del sector azulejero) sufri¨® incrementos de paro mayores que los de Valencia y Alicante.

- Baja calidad de empleo. Si la crisis se ha cebado con el n¨²mero de empleos, no es menos cierto que tambi¨¦n lo ha hecho con su calidad. Seg¨²n los datos de UGT del Pa¨ªs Valenciano, la tasa de temporalidad disminuy¨® del 32,1% de 2008 al 28,4% del a?o pasado. La raz¨®n, sin embargo, no hay que buscarla en una mejora de los contratos, sino en la destrucci¨®n de empleo temporal. Pese a ello, la temporalidad de los empleos en la Comunidad Valenciana est¨¢ tres puntos por encima de la media espa?ola y, como esta, a gran distancia de la media de la Uni¨®n Europea. Seg¨²n la secretaria de Empleo de UGT del Pa¨ªs Valenciano, Elvira R¨®denas, m¨¢s del 81% de los contratos eventuales por circunstancias de producci¨®n -la modalidad m¨¢s utilizada en la Comunidad Valenciana- tuvieron el a?o pasado una duraci¨®n igual o inferior a los tres meses.

- Prestaciones mejorables. Los sindicatos tambi¨¦n cuestionan la cobertura que se concede a las personas desempleadas y la concepci¨®n que se tiene de la inmigraci¨®n. Durante el a?o pasado tres de cada 10 personas registradas en el Servef no ten¨ªan ning¨²n tipo de prestaci¨®n, ni de cobertura social. UGT y CC OO cuestionan que el Consell no haga un esfuerzo suplementario como s¨ª hacen otros gobiernos auton¨®micos. Para el consejero Gerardo Camps, la soluci¨®n no est¨¢ en aumentar las prestaciones al desempleo sino en incentivar las contrataciones a trav¨¦s de las empresas. Pese al alud de inmigrantes que se integraron en la construcci¨®n y en los servicios, menos del 17% de los parados que reciben prestaciones son inmigrantes. Un 35% de los cuales proceden de la Uni¨®n Eurpea y el resto de pa¨ªses extracomunitarios.

- Colectivos espec¨ªficos. La destrucci¨®n de empleo ha cobrado tintes especiales en colectivos que ya tienen dificultades especiales de partida, como el colectivo de discapacitados, que vio caer en un 8% las contrataciones durante el a?o pasado respecto a 2008. Se?ala Josep Tom¨¢s, secretario de Empleo de CC OO del Pa¨ªs Valenciano, que el Plan Valenciano por el Crecimiento y el Empleo (Pavace II) incluye medidas para "atender a colectivos espec¨ªficos y a personas con riesgo de exclusi¨®n social, pero no acaban de llevarse a efecto por falta de financiaci¨®n". La consejera de Bienestar Social, Ang¨¦lica Such, esgrimi¨® ayer los esfuerzos hechos en formaci¨®n y reserva de plazas en la Administraci¨®n, aunque ello implique, hoy por hoy, poco consuelo para estos colectivos.

- El plan de choque del PP. El presidente popular, Mariano Rajoy, formul¨® hace unas pocas semanas sus "alternativas frente a la crisis". El problema es que algunas de las principales propuestas del PP nacional chocan con la gesti¨®n de Francisco Camps en la Comunidad Valenciana. Rajoy exige al Gobierno central una austeridad que el Consell tan s¨®lo ha abordado forzado por un elevad¨ªsimo endeudamiento (14,1% del PIB) y una ley que evite la morosidad de las Administraciones y las obligue a pagar en un plazo de 60 d¨ªas. La Generalitat llega a pagar a sus proveedores hasta con 380 d¨ªas de retraso. El Gobierno central lo hace con 139 d¨ªas.

- Menos impuestos. Los populares argumentan que la reducci¨®n de la presi¨®n fiscal -una de las m¨¢s bajas de la Uni¨®n Europea- contribuir¨ªa a dinamizar la econom¨ªa y crear empleo. El Gobierno valenciano ha hecho de la pol¨ªtica de bajar los impuestos una se?a de identidad. Ayer, el vicepresidente y consejero de Industria, Vicente Rambla, argument¨® que con 14 deducciones la Generalitat ha dejado de ingresar 1.600 millones de euros. Dinero que, se?al¨®, ha quedado en las familias para su consumo. La contradicci¨®n est¨¢ en que, mientras ha reducido la presi¨®n fiscal en los impuestos propios y en los impuestos cedidos, solicita cada vez mayor financiaci¨®n para atender su necesidad de gasto. Todo ello en un contexto de nuevo sistema de financiaci¨®n auton¨®mico, que ha dejado a la Comunidad Valenciana entre las regiones que tienen peor financiaci¨®n per c¨¢pita. Ello explica que el consejero de Econom¨ªa, Gerardo Camps, se muestre prudente a la hora de oponoerse a la decisi¨®n del Gobierno de aumentar el IVA en dos puntos a partir de julio. Si hay dinero extra para la Comunidad Valenciana no lo rechazar¨¢.

- Sin consenso pol¨ªtico. El PP nacional ha rechazado la posibilidad de alcanzar un pacto global con el Gobierno para afrontar la crisis econ¨®mica, aunque ha aceptado sentarse a negociar con la delegaci¨®n designada por el Ejecutivo que preside Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. En la Comunidad Valenciana esta posibilidad ni siquiera se ha llegado a plantear. El presidente de la Generalitat y del PP regional, Francisco Camps, ha rechazado las reiteradas ofertas de la oposici¨®n, fundamentalmente de los socialistas valencianos, para realizar un pleno monogr¨¢fico en las Cortes Valencianas en el que discutir medidas contra la crisis econ¨®mica en la Comunidad Valenciana. Los populares, que no quieren ni oir hablar de la cuesti¨®n, se niegan tambi¨¦n a realizar una ronda de contactos previos con los grupos de la oposici¨®n y se escudan en dos argumentos: la falta de legitimidad que tiene el PSPV por querellarse contra Camps a ra¨ªz de los esc¨¢ndalos del caso G¨¹rtel y la pretensi¨®n de la oposici¨®n de utilizar un pleno de estas caracter¨ªsticas para atacar al jefe del Consell.

- Alternativa y gobierno. La convenci¨®n sobre empleo, organizada por el PP durante todo el fin de semana en Feria Valencia, ha aportado pocas novedades program¨¢ticas. Francisco Camps reconoci¨® ayer ante su auditorio que las recetas econ¨®micas y las decisiones "son importantes, pero lo es m¨¢s la convicci¨®n para liderar un proyecto" y abog¨® por "un cambio de atm¨®sfera para que cualquier propuesta sea cre¨ªble". Propuestas que debe liderar Rajoy como alternativa al presidente del Gobierno, pero que contrastan con la gesti¨®n hecha en la Comunidad Valenciana.