Higua¨ªn y CR, una sociedad imparable

Las torres de iluminaci¨®n del estadio Alfonso P¨¦rez propagan la luz de forma desigual. Las porter¨ªas no brillan tanto como la franja imaginaria que recorre el medio campo de ¨¢rea a ¨¢rea. Cristiano se sinti¨® en el foco mientras acomodaba el bal¨®n, en el sitio en el que Rafa lo hab¨ªa tocado con la mano un minuto antes. Se par¨® a unos cent¨ªmetros de la raya del ¨¢rea, cuadr¨® los hombros, y apunt¨® con el pecho al segundo palo, donde Ustari hac¨ªa gestos acomodando la barrera, intentado tapar todos los ¨¢ngulos. El ¨¢rbitro sopl¨® el silbato y Albiol empuj¨® la barrera para abrir hueco. No fue necesario. Cristiano le peg¨® con el alma y el bal¨®n pas¨® silbando sobre la cabeza de Mario antes de sobrevolar a Ustari como una gaviota. El portero argentino intent¨® manotear esa sombra blanca. Fue in¨²til. El hombre estaba donde ten¨ªa que estar. Pegado a su palo. El palo largo. Justo por donde pas¨® la pelota. El bal¨®n del primer gol de una noche dram¨¢tica para Ustari.

Fue el sexto gol de falta de Cristiano este curso y el n¨²mero 23 de su carrera de este modo entre Liga y Champions. En Getafe tuvo el valor de ser el que abri¨® el marcador y amedrent¨® al equipo local antes de que se cumplieran 10 minutos. El Getafe no se recuper¨® del sopapo. Mientras le dur¨® el desconcierto le cayeron tres goles m¨¢s. Cristiano e Higua¨ªn han compuesto una pareja mort¨ªfera. En la Liga suman 39 goles -22 el argentino, 17 el portugu¨¦s- en 28 partidos y s¨®lo han coincidido en la mitad. Ayer, Higua¨ªn desbord¨® a Rafa, que toc¨® la pelota para evitar que el delantero se le metiera en el ¨¢rea, en la acci¨®n del primer gol. Mientras Higua¨ªn revolv¨ªa el agua, Cristiano pescaba. Luego lo celebraron juntos: han metido m¨¢s de la mitad de los 78 goles del Madrid en la Liga. Ayer marcaron dos tantos cada uno y siguieron afianzando su sociedad.