"Es como un barco a la deriva"
?Qu¨¦ ha pasado para que un astillero que ocupaba p¨¢ginas de los peri¨®dicos con grandes proyectos est¨¦ al borde del concurso de acreedores? "Pablo Comesa?a lo hac¨ªa todo. Era la persona indispensable. Viv¨ªa en el astillero", recuerda un antiguo colaborador. "No hubo, o por lo menos no tenemos conocimiento de una gesti¨®n irregular", apunta Garc¨ªa Costas. S¨ª habla, en cambio, de una excesiva concentraci¨®n de tareas en la misma persona y de presupuestos mal dise?ados, de errores t¨¦cnicos que habr¨ªan podido llevar al astillero a presupuestar a la baja los barcos. Tanto, que algunos pedidos se han demostrado como un mal negocio.
"La direcci¨®n no nos merece credibilidad. El principal culpable de que se hunda un barco es siempre el capit¨¢n, pero tampoco se pueden obviar otras responsabilidades de los jefes, de la oficina t¨¦cnica o de la parte financiera. ?D¨®nde estaban todos los que le echan la culpa a la gerencia?", reflexiona Rosalino L¨®pez, otro acreedor. Tesol, junto con otras muchas auxiliares aseguran que se ve¨ªa venir. Su presidente tiene una cosa muy clara: "Fall¨® la coordinaci¨®n. No hab¨ªa seguimiento de los encargos. Se perdieron miles de horas de trabajo, y eso es el c¨¢ncer de cualquier astillero". Es de los que piensan que la situaci¨®n actual no conduce a nada sin un plan de viabilidad. "Esto es como un barco a la deriva, si queremos que se vaya al fondo s¨®lo hay que esperar a que choque contra algo". Sin embargo, sabe que los principales interesados en que Factor¨ªa Naval siga adelante son los mismos peque?os empresarios a los que la firma adeuda m¨¢s de 50 millones.
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