Bulo de Estado
Un rumor conyugal relativo a Sarkozy y Carla Bruni acaba en asunto nacional por la mezcla explosiva de Internet, la prensa amarilla y la histeria de alg¨²n pol¨ªtico
Esta es la historia de un jugoso, pero inofensivo, rumor conyugal relativo a Nicolas Sarkozy y Carla Bruni que ha acabado convirti¨¦ndose en un asunto de Estado tras la incorporaci¨®n de varios elementos que juntos convierten cualquier cosa en una mezcla pol¨ªtica explosiva: la rapidez mete¨®rica de propagaci¨®n de internet, la intervenci¨®n algo paranoica de un consejero presidencial, la inclusi¨®n de una furibunda ex ministra venida a menos apartada del poder, la irrupci¨®n de la prensa brit¨¢nica, una investigaci¨®n de la polic¨ªa algo fantasmal y la declaraci¨®n de la mujer del presidente de la Rep¨²blica, madame Bruni-Sarkozy, en la radio con la intenci¨®n -no lograda- de aplacar la marea y desactivar la bomba de relojer¨ªa en la que estaban sentados.
El asesor presidencial Pierre Charon lleg¨® a asegurar que el cotilleo responde a una conspiraci¨®n
Todo empez¨® en Twitter: hace m¨¢s de un mes y medio, un becario de una cadena audiovisual francesa anot¨® un mensaje: "O¨ªdo en la m¨¢quina de caf¨¦: Sarko+Carla, over". El mensaje se reprodujo en las redes sociales aqu¨ª o all¨¢, se mezcl¨® con otros parecidos que ven¨ªan de d¨ªas atr¨¢s, se unieron a una alusi¨®n cr¨ªptica en una entrega de premios musicales que engord¨® a su vez la bola, hasta que el 9 de marzo, bajo el seud¨®nimo Mik107, alguien escribi¨® en un blog de Le Journal du Dimanche: "?Noticia bomba! Tras Hait¨ª, Chile y Turqu¨ªa, damos cuenta de que el El¨ªseo ha sido afectado por un terremoto de una magnitud nueve en la escala de Richter". Despu¨¦s aseguraba que la pareja presidencial se encontraba al borde de la ruptura y hasta citaba los nombres de los nuevos acompa?antes de Sarkozy y su esposa: la secretaria de Estado de Medio Ambiente, Chantal Jouanno, y el m¨²sico Benjam¨ªn Biolay.
El blog en cuesti¨®n dur¨® poco: horas despu¨¦s de su aparici¨®n en pantalla fue borrado y sustituido por el siguiente mensaje: "Dado que se atenta gravemente contra la vida privada, la redacci¨®n del JDD.fr ha decidido suprimir este post".
Demasiado tarde: el peri¨®dico sensacionalista The Sun ya hab¨ªa recogido en su propia web el rumor, convirti¨¦ndolo en noticia publicable al citar como fuente "el prestigioso peri¨®dico dominical franc¨¦s Le Journal du Dimanche". La prensa francesa, celosa de la vida privada de sus pol¨ªticos, dej¨® el tema de lado. La europea, no: hubo art¨ªculos, reportajes y llamadas en primera p¨¢gina. De hecho, el 12 de marzo, tres d¨ªas despu¨¦s de la aparici¨®n del blog, un periodista pregunt¨® a Sarkozy en Londres, en una rueda de prensa conjunta con Gordon Brown, sobre lo publicado sobre su separaci¨®n. El presidente franc¨¦s respondi¨®, malhumorado, que no iba a perder en eso "ni un microsegundo". Los peri¨®dicos franceses dieron cuenta del desmentido de forma discreta y todo el mundo dio por enterrado el asunto.
Todos, menos Pierre Charon, asesor del presidente de la Rep¨²blica, que el domingo, en una entrevista a un peri¨®dico digital, aseguraba que la filtraci¨®n del rumor obedec¨ªa "a una especie de complot organizado con los movimientos financieros". Y lo explicaba: "El hecho de que estos rumores hayan sido propagados en la prensa inglesa, alemana y suiza hacen pensar en un complot, dado que Francia se prepara a presidir el G-20 en 2011".
Los respetuosos peri¨®dicos franceses, al observar algo estupefactos que el caso tomaba un sesgo pol¨ªtico -impulsado por el mismo El¨ªseo-, reprodujeron, con la iron¨ªa y la reserva que merec¨ªan, las opiniones de Charon sobre el supuesto complot contra la pareja presidencial alentado desde oscuros y poderosos despachos financieros de Londres o Berl¨ªn. Mientras, Le Journal du Dimanche, propiedad del empresario Arnaud Lagard¨¨re, amigo de Sarkozy, hab¨ªa echado a un responsable de su p¨¢gina de Internet y al periodista encargado del blog origen de la pol¨¦mica.
A todo esto, el peri¨®dico sat¨ªrico Le Canard Encha?n¨¦ y el mismo Le Journal du Dimanche aseguraban que el entorno de Sarkozy atribu¨ªa el origen del bulo a alguien m¨¢s concreto, m¨¢s pegado a la realidad y nada sospechoso de operar para complots internacionales de financieros del G-20: Rachida Dati, ex ministra de Justicia, ex portavoz de Sarkozy durante la campa?a electoral, ex colaboradora favorita del presidente, amiga de la ex esposa del l¨ªder, Cecilia. Nunca muy amiga de Carla. Ca¨ªda en desgracia tras su calamitoso paso por el ministerio, Dati fue destituida en 2009, apeada del poder, apartada de los c¨ªrculos presidenciales, exiliada en el lejano Parlamento Europeo, desde donde asegur¨® a una amiga en septiembre, sin saber que la estaban grabando: "No puedo m¨¢s, no puedo m¨¢s".
?Una suerte de venganza pol¨ªtica por haberla desterrado? ?Una rabieta porque Sarkozy le ha privado, como asegura Le Canard Encha?n¨¦, de coche oficial? Hace unos d¨ªas, Charon desliz¨® delante de un grupo de diputados que la polic¨ªa investigaba las llamadas de Dati a la b¨²squeda de pruebas.
El martes, harta, Dati salt¨® a la palestra con un comunicado en el que protestaba "con indignaci¨®n" por la situaci¨®n. El mi¨¦rcoles, en una radio francesa, a?ad¨ªa, de viva voz: "No tengo miedo de nada, pero todo esto tiene que parar ya". Y a?adi¨®: "Los rumores, las calumnias, los comentarios sobre la vida personal son absolutamente inadmisibles. He sido acusada indirectamente y lo encuentro extremadamente escandaloso".
Paralelamente, ministros y diputados del centro-derecha cerraban filas (y la boca) para que la historia, no muy edificante y no muy ¨²til desde el punto de vista electoral, acabara cuanto antes.
Y en un decisivo intento para clausurar definitivamente el caso, horas despu¨¦s de que Dati hablara en una radio, la mism¨ªsima esposa del presidente se present¨® en otra, Europe 1, propiedad tambi¨¦n del grupo Lagard¨¨re, para aclarar que ni ¨¦l ni su marido creen ser v¨ªctimas de ning¨²n complot; que los rumores son inevitables, poco agradables, pero que ni ella ni Sarkozy les otorgan ninguna importancia y que el asesor Charon hab¨ªa hablado empujado por la amistad, pero que no era su portavoz.
"Los rumores est¨¢n ah¨ª. Siempre estar¨¢n ah¨ª. (...) Y Rachida Dati sigue siendo nuestra amiga. Las acusaciones que le se?alan a ella como culpable son rumores, y yo no creo en los rumores", a?adi¨® Carla Bruni.
Luego sentenci¨®: "No hay ninguna investigaci¨®n policial sobre este asunto. Es inimaginable decir una cosa as¨ª".
Todo terminado, pues. ?Todo? No, claro. Bernard Spuarcioni, alto cargo policial, aseguraba minutos despu¨¦s, contradiciendo a la primera dama, que la investigaci¨®n en torno al blog y al rumor s¨ª que se hab¨ªa producido.
As¨ª que... continuar¨¢...
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