Una relaci¨®n necesaria

El gran misterio del proyecto de Florentino P¨¦rez es haber invertido 270 millones en fichajes sin contar m¨¢s que con Guti para desempe?ar el papel de enganche. La plantilla del Madrid no tiene otro especialista en dar el ¨²ltimo pase -otro diez- y hace m¨¢s de un a?o que Guti decidi¨® poner fin a su carrera madridista. Esto lo sab¨ªan todos en Chamart¨ªn.

El viernes nueve de abril, la v¨ªspera del cl¨¢sico contra el Bar?a, el partido m¨¢s importante de la temporada, Guti anunci¨® que dejaba el Madrid en junio. Lo hizo con el aire bohemio que lo caracteriza, un poco socarr¨®n, un poco incr¨¦dulo. En cierto modo, su destino parec¨ªa coincidir con el de su entrenador, Manuel Pellegrini. Ambos se necesitaban y ambos se presentaban como dos figuras tr¨¢gicas a ojos de la hinchada.

"Si est¨¢ bien yo le pongo", ha dicho con frecuencia el entrenador chileno

El director general madridista, Jorge Valdano, coincidi¨® con Guti hace un a?o y lo not¨® harto del f¨²tbol. A pesar de la impresi¨®n, tras llegar al club y conversar con el jugador, resolvi¨® apostar por ¨¦l. Hizo bien porque la plantilla ten¨ªa pocos volantes creativos y a¨²n le esperaba un recorte. Valdano no lograr¨ªa persuadir a Florentino P¨¦rez, el presidente, de la necesidad de retener a Sneijder y Robben, ni de la conveniencia de fichar un interior que hiciese pareja con Xabi. Con el correr de la temporada se hizo evidente que Kak¨¢ no har¨ªa una contribuci¨®n relevante al medio campo. Tambi¨¦n qued¨® patente que Guti, de 33 a?os, hab¨ªa iniciado su inexorable retirada. Como sol¨ªa decir Valdano cuando era entrenador: "El que dice que se va es porque ya se fue".

Durante la temporada pasada el ex entrenador Juande Ramos denunci¨® al club que Guti no cumpl¨ªa con las normas de conducta exigibles a un capit¨¢n, y que muchas veces sencillamente daba toda la impresi¨®n de que prefer¨ªa no entrar en las convocatorias. A pesar de todo, Juande fue criticado por prescindir del talento.

Lo primero que hizo Pellegrini al llegar a Valdebebas fue tenderle una mano a Guti. Le dio la titularidad en la segunda jornada de Liga, contra el Espanyol, y tambi¨¦n en partidos de tanta relevancia como los de Sevilla y Lyon. Todo hizo pensar que les unir¨ªa una relaci¨®n prol¨ªfica. No fue as¨ª. En alg¨²n punto, uno de los dos empez¨® a fallarle al otro. Guti dijo que el t¨¦cnico no le dio la titularidad en muchas ocasiones, a pesar de estar bien f¨ªsicamente. El entrenador argument¨® que Guti no estaba listo. En los ¨²ltimos meses Pellegrini ha tenido que dar explicaciones de todo tipo para justificar las ausencias de un jugador que tanto necesita.

A lo largo de la campa?a pasada, Guti fue titular en 13 ocasiones. Hasta el cl¨¢sico, el media punta hab¨ªa jugado de inicio en seis partidos de Liga. Desde el curso 2001-2002, cuando Zidane ocup¨® su puesto, Guti no compet¨ªa menos minutos. Claro que ahora tiene otra edad, est¨¢ de salida y ha estado numerosas veces en los partes m¨¦dicos.

Despu¨¦s de la derrota ante el Bar?a (0-2), Pellegrini comenz¨® a poner a Guti de titular. Lleva dos jornadas consecutivas haci¨¦ndolo. Cuando le preguntan por el cambio, el entrenador se encoge de hombros: "Si est¨¢ bien yo lo pongo". Da a entender lo mismo que insinuaba Juande: que las m¨¢s de las veces, Guti no est¨¢ para jugar, o no quiere estarlo.

Pellegrini admiti¨® el domingo que a su plantilla le falta la clase de talento que posee Guti: "Quiz¨¢ hemos practicado un f¨²tbol m¨¢s directo de lo que mucha gente pretend¨ªa, pero he intentado adecuar el funcionamiento del equipo a los jugadores que tenemos".

Adem¨¢s, el t¨¦cnico declar¨® en la SER, con tono f¨²nebre, que su relaci¨®n con Florentino P¨¦rez es muy particular: "Con el presidente no hablo. El conducto correcto que ¨¦l quiere es que yo hable con Valdano y Pardeza".

A diferencia del media punta, el entrenador aguarda su futuro con incertidumbre. Pellegrini necesitaba a Guti para armar el rompecabezas que le entregaron en junio. Guti necesita a Pellegrini para despedirse dignamente de su afici¨®n.