"El periodista vive la historia, el pueblo la padece"

Jean Daniel, el prestigioso periodista franc¨¦s, fundador de Le Nouvel Observateur, uno de los mejores semanarios franceses de actualidad, contin¨²a escribiendo casi cada semana, a sus 90 a?os, una p¨¢gina sobre la actualidad, francesa, mundial o ambas cosas. Ayer recibi¨® en su casa de Par¨ªs la noticia de que se le hab¨ªa concedido, por toda su trayectoria profesional, el premio Ortega y Gasset de Periodismo y lo primero que quiso hacer constar es que el galard¨®n le honraba mucho. Despu¨¦s, este veterano periodista y maestro de periodistas record¨® que son precisamente los periodistas los que tienen el privilegio de "vivir la historia, de contemplarla, mientras que el pueblo la padece y los gobernantes la hacen".

"Ahora es m¨¢s dif¨ªcil ejercer la profesi¨®n que cuando yo empec¨¦"

Luego asegur¨® que fue periodista por casualidad, que ¨¦l nunca lo hab¨ªa pensado, que todo cambi¨® tras un oportuno telefonazo que le revolucion¨® la vida en 1953, cuando Daniel contaba 33 a?os: el telefonazo de Albert Camus. "Me llam¨® cuando yo hac¨ªa una revista que se llamaba Caliban. Y a partir de ah¨ª, ¨¦l me mostr¨® el camino". Fueron amigos. Los dos eran argelinos, de origen europeo. Pero rompieron, precisamente, por sus diferentes posiciones sobre la guerra de Argelia. Con todo, Daniel jam¨¢s ha olvidado su deuda con el escritor: de hecho, su ¨²ltimo libro publicado en espa?ol se titula Camus, a contracoriente, y es un homenaje a su viejo amigo y Nobel.

Elegido mejor periodista franc¨¦s en 1978 y Premio Pr¨ªncipe de Asturias de Comunicaci¨®n y Humanidades en 2004, autor de m¨¢s de 18 libros, amigo de Fran?ois Mitterrand, ha logrado conjugar la calidad del periodismo bien hecho y de altura con la gran tirada. Ah¨ª est¨¢ Le Nouvel Observateur, revista que fund¨®, de la que fue redactor jefe desde 1965 y director durante muchos a?os, para demostrarlo. Pero no olvida que la profesi¨®n period¨ªstica se encuentra en un momento particularmente confuso. Y esto le hace ser un punto pesimista con respecto al futuro: "Todo lo cambi¨® la televisi¨®n. Y luego las tecnolog¨ªas, Internet. Ahora, parece que cualquiera puede ejercer de periodista y eso equivale a un cierto descr¨¦dito. En cierta manera, ahora es m¨¢s dif¨ªcil ejercer la profesi¨®n que cuando yo empec¨¦".