La izquierda 'abertzale' reprocha a ETA ser un obst¨¢culo en su objetivo
Los radicales siguen sin pedir la desaparici¨®n de la organizaci¨®n terrorista
La izquierda abertzale dio ayer un nuevo paso, a¨²n insuficiente, en el camino de su desvinculaci¨®n del terrorismo al remarcar su apuesta por v¨ªas "exclusivamente pol¨ªticas" y, sobre todo, por reprochar a ETA, por vez primera, que la reanudaci¨®n de su actividad terrorista se ha convertido en un obst¨¢culo para el avance en sus objetivos pol¨ªticos. La declaraci¨®n, le¨ªda ayer en Pamplona por Txelui Moreno y Karmele Aierbe, dice expresamente que "la reanudaci¨®n de las acciones armadas, lejos de solucionar los bloqueos en el di¨¢logo, no han hecho sino producir un bloqueo superior". Es un paso m¨¢s sobre la llamada declaraci¨®n de Alsasua, aprobada en febrero, en la que propon¨ªa un "proceso democr¨¢tico en ausencia de violencia".
Los radicales siguen la estrategia de pasos cortos del Sinn Fein con el IRA
La declaraci¨®n de Pamplona, en la que participaron cerca de 200 representantes de la izquierda abertzale, entre ellos su dirigente, Rufi Etxeberria, la secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, y la abogada Jone Goirizelaia, se encuadra en el pulso que mantiene la formaci¨®n pol¨ªtica ilegal con ETA, a la que disputa la vanguardia del autodenominado MLNV (Movimiento de Liberaci¨®n Nacional Vasco), desde que la banda rompi¨® su ¨²ltima tregua en junio de 2007.
La izquierda abertzale quiso escenificar ayer una demostraci¨®n de fuerza ante ETA a la que no s¨®lo reproch¨® que su actividad terrorista es un obst¨¢culo para sus objetivos pol¨ªticos sino que tambi¨¦n le pidi¨® que asumiera la declaraci¨®n de Bruselas. En esa declaraci¨®n, del 29 de marzo pasado, el mediador surafricano, Brian Currin y asesor de la izquierda abertzale, respaldado por la Fundaci¨®n Mandela y cuatro premios Nobel -el ex presidente surafricano Frederick de Clerk; el arzobispo Desmond Tutu; el ex primer ministro irland¨¦s, John Hume, y la ex presidenta irlandesa, Mary Robinson- reclamaron a ETA un "alto el fuego permanente e incondicional, controlado por un organismo internacional independiente".
La izquierda abertzale est¨¢ siguiendo una estrategia similar a la del Sinn Fein con el IRA, cuando el brazo armado del nacionalismo irland¨¦s rompi¨® la tregua de 1994. En ese momento, el Sinn Fein, liderado ya por Gerry Adams, disconforme con la ruptura de la tregua por parte del IRA, opt¨® por abrir una l¨ªnea de reproches p¨²blicos sucesivos hacia el brazo armado para conducirle hacia el abandono de las armas, pero sin emplazarle a una resoluci¨®n dr¨¢stica que pudiera saldarse con la ruptura.
La clave de que la izquierda abertzale siga un proceso de pasos cortos hacia el objetivo de terminar con la violencia y con ello poder participar en los procesos electorales, radica en que no quiere una ruptura con ETA.
Sus dirigentes temen que una amenaza de ruptura a ETA si no cesa la violencia podr¨ªa precipitar la divisi¨®n no s¨®lo en la banda sino en todo el movimiento abertzale. La direcci¨®n de ETA atraviesa por un momento de confusi¨®n y caos por el acoso policial, por un lado, y por las reclamaciones cada vez m¨¢s decididas por la izquierda abertzale a que abandone la violencia.
La cautela de la izquierda abertzale con relaci¨®n a ETA y la propia situaci¨®n de la banda impidieron que la declaraci¨®n de Bruselas, del 29 de marzo, y el esfuerzo de Brian Currin cuajara. La izquierda abertzale no hizo en aquel momento la declaraci¨®n prevista, de respaldo activo a la declaraci¨®n de Bruselas. Fuentes pr¨®ximas a la izquierda abertzale se?alan que en aquel momento sab¨ªan que ETA iba a emitir un comunicado con motivo del Aberri Eguna (D¨ªa de la Patria Vasca), celebrado el 4 de abril, y decidieron esperar al texto de la banda.
El texto de ETA no aport¨® nada nuevo. En ese momento, la izquierda abertzale decidi¨® tomar la iniciativa para mantener la llama y no defraudar las expectativas de sus bases, que aprobaron masivamente en febrero un nuevo proceso "por v¨ªas pol¨ªticas y pac¨ªficas y en ausencia de violencia". La toma de iniciativa se plasm¨® en la declaraci¨®n de ayer.
La mayor¨ªa de los partidos estima que la declaraci¨®n de Pamplona es un avance en la nueva l¨ªnea marcada por la izquierda abertzale, pero insuficiente. Creen que para ser un partido legal tiene que terminar el recorrido para decidir, finalmente, entre dos opciones: o convencer a ETA de que abandone la violencia o desmarcarse de ella.
El Gobierno de Zapatero no acepta el emplazamiento de la declaraci¨®n de Bruselas al di¨¢logo con ETA. Su ministro, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, ha insistido en que s¨®lo aceptar¨ªa un final dialogado cuando ETA abandone definitivamente las armas.
Tres fechas para un mismo recorrido
- Declaraci¨®n de Alsasua (Noviembre de 2009). A los dos a?os de la ruptura por parte de ETA del ¨²ltimo proceso de final dialogado del terrorismo y tras una etapa convulsiva de discrepancias por el modo de finalizar aquel proceso, la izquierda abertzale presenta en Alsasua una nueva propuesta. Dicha propuesta, esta vez unilateral, aboga por aunar las fuerzas independentistas vascas en una plataforma pol¨ªtica que abra un nuevo proceso de di¨¢logo en ausencia de violencia.
- Declaraci¨®n de Bruselas (Marzo de 2010). Brian Currin y cuatro premios Nobel proponen a ETA que declare un alto el fuego permanente con verificaci¨®n internacional y al Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero un nuevo proceso de di¨¢logo.
- Declaraci¨®n de Pamplona (Abril de 2010). La izquierda abertzale asume la declaraci¨®n de Bruselas. El Gobierno de Zapatero s¨®lo admite di¨¢logo cuando ETA anuncie que abandona la violencia definitivamente.
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