La memoria de los Zarr¨ªas
A Gaspar Zarr¨ªas, secretario de Estado de Pol¨ªtica Territorial y responsable federal del PSOE de Pol¨ªtica Institucional, le puede soliviantar m¨¢s o menos el procesamiento contra el juez Baltasar Garz¨®n. Ahora bien, ante todo acudi¨® al acto de la Universidad Complutense, organizado por los sindicatos, como homenaje a su padre y al padre de su padre; tambi¨¦n por el abuelo materno; represaliados por el franquismo. El PP pide su dimisi¨®n por estar sentado, entre el p¨²blico, en ese acto, junto a Pedro Zerolo, responsable de Movimientos Sociales del PSOE.
El padre del secretario de Estado, Juan, con 19 a?os, fue testigo del fusilamiento de su progenitor, Gaspar. Padre e hijo estaban presos en la c¨¢rcel de Cazalilla en Ja¨¦n, pueblo del que Gaspar, del PSOE, era alcalde. Una ma?ana de febrero de 1940, la guerra hab¨ªa terminado hac¨ªa 10 meses, se oy¨® un grito: "?Zarr¨ªas!" "?Padre o hijo?", pregunt¨® el funcionario de la prisi¨®n.
El padre fue la respuesta. Le fusilaron de inmediato. A media ma?ana lleg¨® la abuela del secretario de Estado para visitar a su esposo y a su hijo. Ya no estaba el primero. Juan, el hijo, continu¨® en la c¨¢rcel hasta 1946. Nada m¨¢s salir, se dedic¨® a reconstruir el partido en la provincia de Ja¨¦n. Le detuvieron enseguida, y, de nuevo preso hasta 1953, en distintas c¨¢rceles.
El azar llev¨® a que una joven que iba a visitar a su padre en la c¨¢rcel de Yeser¨ªas de Madrid, el entonces secretario general de UGT de artes blancas (panaderos y harineros), Carlos Ar¨¦valo, conociera al joven preso Juan Zarr¨ªas. Nada m¨¢s salir de la c¨¢rcel se casaron y en 1955 naci¨® Gaspar, con su abuelo materno a¨²n en la c¨¢rcel. Estos d¨ªas, sus amigos y compa?eros rememoran esta historia y se explican el gesto de dolor que Gaspar Zarr¨ªas tuvo durante todo el acto de la Universidad. La misma expresi¨®n que mantuvo C¨¢ndido M¨¦ndez durante todo el acto. Los dos son amigos y sus familias, en Ja¨¦n, estuvieron unidas por una tragedia similar de fusilamientos y c¨¢rcel.
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