La ruleta vuelve a la ciudad

La primera ley de juego de la democracia autoriz¨® la apertura de nueve casinos en Espa?a. Los legisladores optaron por ubicarlos todos a una prudente distancia de los grandes n¨²cleos urbanos. En Valencia se concedi¨® una licencia en el t¨¦rmino de Pu?ol y en Alicante, otra en La Vila Joiosa. Pero la cesi¨®n de las competencias sobre el juego a las comunidades aut¨®nomas y la crisis econ¨®mica han devuelto la ruleta a la ciudad.

El Casino Costa Blanca se ha transformado en Casino Mediterr¨¢neo, con sede en Alicante, y su propietario, el fabricante valenciano de m¨¢quinas tragaperras Acrismatic, ha cerrado, al menos temporalmente, la sala de La Vila Joiosa. Cirsa, propietario del Casino Monte Picayo, tiene previsto abrir una sala en un hotel de la avenida de las Cortes Valencianas, junto al Palacio de Congresos de Valencia, antes de seis meses. Y Orenes, primer competidor de Cirsa, arranc¨® a la Generalitat una tercera licencia para Castell¨®n y estren¨® hace dos a?os una gran sala en el puerto de la capital de La Plana.

El cambio legal facilit¨® la vuelta de los casinos a las capitales

La evoluci¨®n del sector del juego es paralela a la de la riqueza

La modificaci¨®n legal que facilit¨® la vuelta de los casinos a las capitales de provincia se aprob¨® a finales del a?o 2005. El Consell abri¨® en aquel momento la puerta a una tercera licencia de explotaci¨®n de un casino en Castell¨®n, suprimi¨® las distancias de seguridad y consinti¨® la apertura de salas vinculadas en otros n¨²cleos urbanos, como Torrevieja, en Alicante, o Gandia, en Valencia.

El cambio de normativa permiti¨® que a principios del mes de marzo de 2009 se abriera en Alicante un ap¨¦ndice del casino de La Vila Joiosa. Un tiempo despu¨¦s se traslad¨® a Alicante la sala central de la provincia. Ahora el casino de La Vila ha bajado la persiana. Los 121 trabajadores est¨¢n formalmente de vacaciones pero la empresa ya ha solicitado su despido a trav¨¦s de un ajuste de empleo colectivo.

"La direcci¨®n ha solicitado una suspensi¨®n temporal de la actividad durante seis meses, a partir de ah¨ª ya veremos", comenta el director de Casinos del Mediterr¨¢neo, Antonio Barajas, al ser preguntado por el futuro.

La empresa argumenta p¨¦rdidas econ¨®micas. Las partes intentar¨¢n encontrar un punto de acuerdo esta semana, antes de que la Direcci¨®n General de Trabajo se pronuncie sobre el ERE, el pr¨®ximo 7 de mayo.

La Generalitat otorg¨® la licencia a Acrismatic en 1999, cuando la empresa recibi¨® la adjudicaci¨®n del casino y la titularidad de sus instalaciones en un complejo concurso a dos bandas que adjudic¨® Jos¨¦ Luis Olivas, entonces consejero de Hacienda. La empresa asumi¨® la plantilla del casino y sus condiciones laborales. Ahora, cree insostenible un convenio colectivo que el comit¨¦ est¨¢ dispuesto a negociar.

Ubicado a medio camino entre Benidorm y La Vila Joiosa, en la antigua carretera nacional, el casino vivi¨® momentos boyantes. Jos¨¦ Antonio Conejero, presidente del comit¨¦ de empresa, recuerda que lleg¨® a emplear a 300 personas hace pocos a?os.

La empresa alega unas p¨¦rdidas de 14 millones de euros para justificar el ERE que plante¨® el 18 de marzo. El comit¨¦ asegura que las p¨¦rdidas corresponden a los tres centros de Alicante a partir de informaci¨®n que atribuyen a la propia empresa. Y agregan, por otro lado, que la direcci¨®n fue recortando en La Vila su oferta de juego, lo que al final ha restringido la demanda.

El director del casino asegura que los 14 millones son p¨¦rdidas de La Vila y subraya que las salas de Torrevieja y Alicante "est¨¢n entre perder un poquito y cubrir costes". Y a?ade que el de La Vila siempre ha sido estacional, muy de fines de semana y vacaciones y, por ello, "m¨¢s sensible a la crisis".

El comit¨¦, que parte de la premisa de reclamar la reapertura del casino, quiere sentarse a hablar de temas sociales, no solo de dinero. La ¨²ltima propuesta de la firma es de 45 d¨ªas por a?o trabajo con un m¨¢ximo de 17 mensualidades. "La empresa ha llegado m¨¢s lejos de lo que se pod¨ªa", afirma Barajas, "b¨¢sicamente por las presiones de la Direcci¨®n General de Empleo. A partir de ah¨ª la ¨²ltima palabra la tiene el comit¨¦ de empresa", advierte.

El casino de La Vila se levanta en una parcela con la calificaci¨®n de uso terciario e industrial, informa Artur Balaguer. Cuando la empresa cerr¨® la persiana, el Grupo Socialista municipal forz¨® un pleno extraordinario del Ayuntamiento para que el edificio, construido a finales de los a?os setenta del siglo pasado, fuese declarado Bien de Relevancia Local y evitar as¨ª otros usos del suelo. El PP, con mayor¨ªa en La Vila Joiosa, rechaz¨® la moci¨®n.

Hace un par de a?os, la empresa que explota el casino present¨® un proyecto para construir un rascacielos en el suelo que ocupa la sala de juego. Nada se concret¨®.

La sociedad tambi¨¦n posee un solar en Benidorm donde est¨¢ haciendo obras. Fuentes sindicales aseguran que podr¨ªan habilitar all¨ª otra sala de juego. La empresa responde tajante: "No estamos en condiciones econ¨®micas de afrontar un proyecto de estos", apostilla Barajas.

La evoluci¨®n del sector del juego es pr¨¢cticamente paralela a la evoluci¨®n de la riqueza. El p¨²blico juega lo que lleva en el bolsillo. Los casinos no dan cr¨¦dito. Pero intentan hacerse visibles en las ciudades para tentar al mayor n¨²mero de potenciales clientes y sobrevivir frente a la competencia que suponen la creciente oferta de apuestas en Internet.