Strauss-Kahn se perfila como l¨ªder de la izquierda y rival de Sarkozy
El director del FMI supera en los sondeos a las socialistas Aubry y Royal
Desde hace meses, el actualmente ubicuo y atareado director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, antiguo ministro de Econom¨ªa, aparece como el l¨ªder socialista franc¨¦s m¨¢s mimado por todo tipo de sondeos para convertirse en el candidato de la izquierda, hu¨¦rfana de l¨ªder, para disputar a Nicolas Sarkozy la presidencia de la Rep¨²blica en 2012. ?l se deja querer pero guarda silencio: por imperativo legal (tiene prohibido, por el cargo que ocupa, opinar en p¨²blico sobre la pol¨ªtica francesa) y por estrategia (desde que vive en Washington, lejos de la refriega local, su imagen p¨²blica ha mejorado mucho).
El ¨²ltimo de estos sondeos se public¨® ayer en el semanario Le Nouvel Observateur. Ah¨ª, entre votantes en general, el actual presidente del FMI aparece en primer lugar con un arrollador 49% de partidarios por delante de Martine Aubry, primera secretaria del PS, con un 16%; Fran?ois Hollande, ex primer secretario, alcanza un 9%, lo mismo que S¨¦gol¨¨ne Royal, ex candidata presidencial. La ventaja de Strauss-Kahn es menor (aunque tambi¨¦n evidente) si en vez de votantes en general se trata de simpatizantes de izquierda. Ga?l Sliman, el director de opini¨®n de la empresa BVA, que ha llevado a cabo este sondeo, asegura en Le Monde que Strauss-Kahn ha visto en los ¨²ltimos a?os reforzada su credibilidad y la imagen del organismo que dirige. "Ya no se ve al Fondo Monetario Internacional como el horrible monstruo liberal que estrangula las econom¨ªas de los m¨¢s d¨¦biles sino como una especie de bombero de guardia".
Tiene en contra la lejan¨ªa de Francia y la falta de contacto con el ciudadano
Investido en su papel de bombero jefe del desastre financiero mundial, a la cabeza de la organizaci¨®n que, junto con la Uni¨®n Europea, presta dinero a Grecia para que salga del laberinto de sus deudas, la popularidad y ascendencia del pol¨ªtico franc¨¦s crece.
Naci¨® hace 61 a?os en Neully-Sous-Seine, fue diputado en 1986 y ministro de Econom¨ªa en 1997 con Lionel Jospin. Diez a?os despu¨¦s, una arrolladora S¨¦gol¨¨ne Royal le arrebat¨® la plaza para batirse, al frente del Partido Socialista franc¨¦s, con Nicolas Sarkozy.
Ahora, muchos aseguran que volver¨¢ a intentarlo. En contra tiene lo mismo que lo ha aupado: la lejan¨ªa de Francia, la prohibici¨®n de meterse en la batalla de todos los d¨ªas, su falta de contacto con el ciudadano de a pie. Eso, que le ha servido para sobrevolar los problemas de Francia sin mancharse y conseguir que se le considere -en algunos medios- como una especie de mes¨ªas salvador, le puede convertir a la larga en un candidato fantasma si desembarca demasiado tarde.
Su mandato al frente del FMI, en el que sustituy¨® a Rodrigo Rato, expira en 2012. Pero nunca ha prometido que se quedar¨¢ hasta el final. El verano de 2011, en Cannes, se cierra la presidencia francesa del G-20. Ser¨ªa un buen momento para apearse en marcha del trono econ¨®mico y bajar a la arena pol¨ªtica. Pero para eso es necesario que el calendario de primarias del Partido Socialista franc¨¦s, a¨²n no fijado, le convenga.
Por lo pronto acapara entrevistas (en las que habla de la crisis, claro) y en las que mira para otro lado si se le pregunta cu¨¢ndo se va a decidir a ser candidato. Hace dos d¨ªas, en Le Parisien, se limitaba a responder "a tiempo". Todo apunta a que ser¨¢ dentro de unos meses.
Mientras tanto, comienzan a surgir libros sobre ¨¦l y su entorno que amenazan su imagen de todopoderoso gestor econ¨®mico en tiempo de incertidumbres financieras. Una misteriosa periodista que se esconde bajo el seud¨®nimo de Casandra, y que asegura haber pertenecido a su equipo de colaboradores, publicar¨¢ el lunes uno titulado DSK, Les secrets d'un presidenciable, donde le define como un hombre "ambicioso, manipulador, mentiroso patol¨®gico y perseguidor de faldas". Tambi¨¦n como "de inteligencia superior".
En los pr¨®ximos meses aparecer¨¢n m¨¢s libros y vol¨²menes sobre el personaje del a?o. Algunos de ellos, cr¨ªticos. Su equipo ha reaccionado encargando una biograf¨ªa m¨¢s o menos controlada. La intenci¨®n: que Strauss-Kahn no pierda su trabajada imagen conseguida en su pa¨ªs a base de no pisarlo y no hablar nunca de ¨¦l.
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