Fergie huye a Los ?ngeles y pide perd¨®n

Una Sarah Ferguson "destrozada y arrepentida", tras la difusi¨®n de un v¨ªdeo que le muestra aceptando dinero de un supuesto empresario a cambio de favores del pr¨ªncipe Andr¨¦s, ha concentrado su comunicado de disculpa en defender la integridad del segundo hijo de la reina de Inglaterra. Su ex marido "no estaba al tanto de las conversaciones" con un reportero del dominical News of the World, que asumi¨® la identidad de un acaudalado hombre de negocios, aseguraba ayer la v¨ªctima de la trampa period¨ªstica.

La grabaci¨®n de los tejemanejes de Ferguson, quien reclam¨® a su interlocutor el ingreso en su cuenta personal de medio mill¨®n de libras a cambio de facilitarle acceso ilimitado al pr¨ªncipe, ha puesto en entredicho el papel de Andr¨¦s como representante especial de Reino Unido en cuestiones de comercio e inversiones, un papel que viene ejerciendo a lo largo de la ¨²ltima d¨¦cada.

Ferguson estaba con naomi campbell en cannes cuando estall¨® el esc¨¢ndalo

La propia duquesa asegura en la cinta que su ex marido es "m¨¢s blanco que el blanco", pero al mismo tiempo deja entender que Andr¨¦s estuvo al tanto de la operaci¨®n e incluso que fue ¨¦l quien sugiri¨® la cifra acordada con el periodista encubierto.

Las c¨¢maras del tabloide han inmortalizado el momento en que Sarah recibe 40.000 d¨®lares en fajos de billetes como adelanto, acuerdo que sella con un apret¨®n de manos en un apartamento del barrio londinense de Mayfair.

Mientras el hijo de Isabel II celebraba ayer una reuni¨®n de urgencia con sus asesores de palacio, la prensa brit¨¢nica daba por hecho que Fergie -apodo popular por el que se conoce a Sarah Ferguson- va a tener que abandonar definitivamente las dependencias que segu¨ªa ocupando en la mansi¨®n de Andr¨¦s en Windsor desde el divorcio de ambos.

El esc¨¢ndalo pill¨® a la duquesa pelirroja en el Festival de Cine de Cannes, mientras asist¨ªa con su hija mayor, Beatriz, a la fiesta del 40? cumplea?os de la modelo brit¨¢nica Naomi Campbell. Inmediatamente, tom¨® un avi¨®n rumbo a Los ?ngeles, desde donde emiti¨® una nota de disculpa por su "inexcusable falta de juicio".

La comprensi¨®n que la ex nuera de la reina merec¨ªa por parte de la opini¨®n p¨²blica brit¨¢nica, a causa de su marginaci¨®n de los c¨ªrculos reales y de la exigua pensi¨®n de divorcio que percibe (15.000 libras anuales, unos 17.400 euros), se ha evaporado tras el desafortunado episodio.

El asunto ha sido censurado incluso por parte de una integrante del nuevo Gobierno brit¨¢nico, en un gesto de cr¨ªtica a los Windsor que no tiene precedentes. La nueva n¨²mero dos del Ministerio del Interior, la liberal dem¨®crata Lynne Featherstone, calific¨® el hecho de "deprimente" y se pregunt¨® en voz alta "qu¨¦ pensar¨¢ la monarca de todo esto". Para la secretaria de Estado y tantos otros ciudadanos de a pie, las maltrechas finanzas de Sarah no pueden ser esgrimidas como excusa para justificar el tr¨¢fico de influencias y el soborno. En el aire queda, por el momento, la idoneidad de Andr¨¦s para seguir desempe?ando la labor de embajador de las empresas brit¨¢nicas que hacen negocios en el extranjero.