Una brasile?a acusa al due?o de un club de amenazas de muerte

Kajane Arnaud lleg¨® de Brasil en 2004 y el 15 de junio de 2006 fue detenida como presunta intermediaria de una red que introduc¨ªa mujeres en Espa?a, por lo general v¨ªa Par¨ªs, para trabajar en clubes de la comarca de A Coru?a (Heidi, Chang¨®, Millenium) y de Ourense (Orense Noche). Estas extranjeras, para obtener el billete (entraban por Madrid y luego tomaban un enlace a Vigo o A Coru?a), contra¨ªan una deuda de 3.000 euros que ten¨ªan que saldar trabajando en los prost¨ªbulos. Por cada una de estas operaciones, Arnaud deb¨ªa cobrar, supuestamente, unos 300 euros de los jefes de los clubes, y adem¨¢s se llevar¨ªa la primera cuota de un seguro de vida que presumiblemente les tramitaba a las mujeres Carlos Ramos Vilela, director de la agencia de viajes Barbol, que vend¨ªa vuelos a cr¨¦dito, asociada al grupo Mars¨¢ns y con clientes en Ferrol.

Una testigo dice que los jefes multaban a las mujeres si se pon¨ªan enfermas

Seg¨²n Arnaud, los propietarios de los clubes eran los que adelantaban el dinero a las mujeres, y luego intentaban entorpecer el pago de la deuda para retenerlas. Adem¨¢s, les impon¨ªan multas por llegar tarde, quedarse dormidas o estar enfermas. Cuando se sent¨ªan a disgusto en un local, ella asegura que iba a rescatarlas en su coche a hurtadillas. Tambi¨¦n acusa a algunos de los proxenetas de coaccionar a las mujeres, y al due?o del Orense Noche de amenazar de muerte a ella y a su hijo en el portal de su casa.

En la primera de las cuatro sesiones del juicio que tiene lugar en la Secci¨®n Sexta de la Audiencia Provincial de A Coru?a, con sede en Santiago, Kajane Arnaud, para la que el fiscal pide nueve a?os de prisi¨®n, se enfrent¨® con su testimonio a los otros procesados: los propietarios del club Heidi (?ngeles Vilanova Recarey y su marido Manuel Fari?a Santiso, que se present¨® en el juicio con un certificado m¨¦dico de amnesia); el due?o del Chang¨® (Juan Jos¨¦ Agr¨¢s Sixto); el del Orense Noche (Jos¨¦ Vidal Teijeiro); el director de la agencia de viajes y la propietaria del negocio (Montserrat Ferro Mosquera), supuestamente ajena a las gestiones que realizaba su empleado con la brasile?a. El responsable del club Millenium de Arteixo (Ram¨®n L¨®pez L¨®pez) se declar¨® en rebeld¨ªa al no presentarse al juicio.

En total, el fiscal pide para los ocho procesados 65 a?os de prisi¨®n por delitos de prostituci¨®n y contra los derechos de los extranjeros. Para cada uno de los responsables de los clubes, pide nueve o diez a?os, y para cada uno de los acusados de la agencia, como "cooperadores necesarios", cinco.

Ayer, ante el juez, y a pesar de que existen grabaciones policiales de conversaciones telef¨®nicas y se ha intervenido documentaci¨®n que indica lo contrario, los due?os de los burdeles lo negaron todo: las amenazas, las multas, la privaci¨®n de libertad a las mujeres, los pagos anticipados de billetes de avi¨®n y el cobro de la deuda qued¨¢ndose con la mitad de lo recaudado por cada servicio sexual... Incluso negaron que sus empleadas fuesen obligadas a acostarse con los clientes. Las chicas, dicen, s¨®lo trabajaban para ellos tomando copas (en el Heidi, frente a la Audiencia de A Coru?a, a 20 euros), y ellos les pagaban un porcentaje.