El Senado avala la 'ley mordaza' de Berlusconi contra las escuchas
La oposici¨®n denuncia la "muerte de la libertad" en Italia
"Hoy ha empezado la masacre de la libertad". As¨ª defini¨® el jueves la oposici¨®n italiana la ley mordaza de Silvio Berlusconi. El pol¨¦mico proyecto legislativo que restringe las escuchas judiciales y proh¨ªbe su difusi¨®n fue aprobado con 164 votos favorables y 25 contrarios en el Senado, tras una sesi¨®n-farsa marcada por la arrogancia de la mayor¨ªa ante las protestas de la oposici¨®n, los movimientos ciudadanos, la prensa y la magistratura. Los diputados del Partido Democr¨¢tico abandonaron la C¨¢mara antes de votar para denunciar "la muerte de la libertad".
Los representantes de Italia de los Valores, del ex fiscal Antonio Di Pietro, tampoco participaron en la votaci¨®n porque fueron expulsados por haber ocupado el hemiciclo la noche anterior y depositado varias banderas italianas sobre los esca?os. "Esto no pasaba ni con Mussolini", dijo Di Pietro, "vivimos un estado de ilegalidad constante en el Parlamento".
"Esto no pasaba ni con Mussolini", dijo el diputado y ex fiscal Di Pietro
El presidente de la Rep¨²blica puede vetar la ley por inconstitucional
La norma, justificada por Berlusconi como una defensa de la intimidad de los ciudadanos, pondr¨¢ profundas limitaciones a la justicia, la lucha contra la mafia y la libertad de prensa. El proyecto proh¨ªbe publicar cualquier escucha judicial en la prensa mientras no acabe la investigaci¨®n preliminar (que en Italia suele durar a?os), bajo penas de hasta 450.000 euros para los editores y de hasta 30 d¨ªas de c¨¢rcel para los periodistas. Adem¨¢s, limita el uso de las interceptaciones telef¨®nicas, que desde ahora solo se podr¨¢n realizar cuando el fiscal detecte "graves indicios de delito" y durante un m¨¢ximo de 75 d¨ªas, prorrogables de tres en tres. Y restringe a 72 horas la utilizaci¨®n de micr¨®fonos ambientales, que no se podr¨¢n usar en lugares privados. Los jueces y las fuerzas de seguridad han advertido de que la batalla contra los delitos econ¨®micos y el crimen organizado sufrir¨¢ un "enorme retroceso".
Para la aprobaci¨®n definitiva, la ley tiene ahora que pasar la tercera lectura de la C¨¢mara de Diputados, pero el texto ha sido blindado por la mayor¨ªa y no se prev¨¦n retoques. La fecha elegida es el 9 de julio. La firma del presidente de la Rep¨²blica, Giorgio Napolitano, ser¨¢ decisiva en ese momento. Si el presidente descubre indicios evidentes de inconstitucionalidad, puede devolver la ley al Parlamento para que sea modificada. Si el Gobierno la reenv¨ªa otra vez al Quirinal, Napolitano estar¨¢ obligado a firmarla. El jueves, el jefe del Estado replic¨® a quienes le piden que no firme con una frase seca: "Hablan por hablar".
La ley ha levantado una oleada de protestas en todo el pa¨ªs. El llamado Pueblo Violeta, el movimiento pac¨ªfico en defensa de la Constituci¨®n italiana nacido en las redes sociales de Internet, ha vuelto a organizarse: el mismo d¨ªa por la noche celebr¨® un velatorio por la "muerte de la democracia en Italia". La Federaci¨®n Nacional de Prensa ha convocado para el 9 de julio una jornada de "silencio informativo y huelga de noticias", y advirti¨®: "Hace falta parar esta ley antes de que sea definitiva, la batalla por la libertad ser¨¢ muy dura; debemos impedir la vuelta al r¨¦gimen de 1925 [bajo Benito Mussolini]".
Los editores, por su parte, expresaron su "firme protesta" contra la aprobaci¨®n de un texto que "no cumple el objetivo de defender la intimidad, sino que simplemente tiene un efecto intimidatorio contra la prensa". Incluso los consumidores se sumaron al coro: "El Gobierno confirma, una vez m¨¢s, su voluntad de hacer favores y regalos a los corruptos, los estafadores y los maleantes", dijo la Federaci¨®n de Consumidores.
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